Los Elementales

La Luz De La Salvación: Capítulo 8

Mariah estuvo hablando con el rey sobre su travesía y la necesidad de tomar el antídoto que salvaría a su reina de la fiebre de las sombras.
-Entiendo entonces vuestra llegada tan apresurada - dijo el rey elfo tras haber terminado de escuchar a Mariah - por suerte en la pirámide de la izquierda tengo a él más brillante de los científicos trabajando justamente en las enfermedades mágicas y es un experto en la fiebre de las sombras, así pues le pediré que haga rápido un antídoto para vosotros. Vuestra vida es muy corta porque crecéis muy rápido y los años para vosotros pasan a penas en semanas e incluso días, fue por eso por lo que tuve piedad de vosotros y os enseñamos en su día nuestra lengua, os mezclasteis con nosotros y por culpa de la gran guerra de los titanes finalmente os fuisteis y nosotros reparamos nuestro error de intentar superar a los otros y simplemente nos quedamos con el territorio que conseguimos y dejamos al resto expandirse, hacerse la guerra y conquistar para después colonizar. Vosotros sois como nosotros aunque lo único que nos diferencia es que vosotros tenéis una sociedad la cual el más fuerte es el que lucha y el más débil trabaja, no sois capaces de pensar por vosotros mismos y tomad decisiones por vuestra cuenta, y nosotros si podemos porque sabemos que si cada uno pone su gramo de arena al final no hace falta decir a una persona que sea una cosa u otra, porque esa persona ya contribuye y mientras ayudé a los otros puede elegir hacer lo que quiera, yo solo estoy sentado en un trono para coordinar a la gente y darles de mi filosofía para que todo funcione como debe ser pero jamás les obligaría a ser algo que no quieren ser y para eso los que quieren ser soldados los entreno el tiempo que haga falta para volverse fuertes y eso independientemente de quienes sean. Igualmente los humanos funcionan de esa manera similar a la vuestra, el que es pobre es pobre y el que es rico se lo lleva todo, así es la filosofía de Tarian, él debe controlar y mostrarse el más fuerte como su padre le enseñó porque sino los otros Hombres lo van a traicionar y la alianza caerá. Esto os lo digo únicamente porque quiero que hagáis una diferencia entre lo que necesitáis y lo que os obligan a hacer innecesariamente. Vuestra reina os ha enviado para darle un antídoto a su enfermedad, sin embargo este llevará un alto coste y es que este antídoto debilita la oscuridad dentro de una persona y si vuestra reina solo desea poder entonces la lleváis a la muerte puesto que por algo ha debido de contraer esa enfermedad típica de los enanos que solo buscan oro en sus minas, o también lo que podéis hacer es dejar esta misión a parte y ser libres de lo que realmente queréis ser.
Splite quedó pensativa ante las palabras de aquel elfo, la verdad es que los entrenaban desde que salían del huevo únicamente para que uno solo consiguiera ser un guerrero y los otros los mandaban obligatoriamente a trabajar, nadie había pensado en decir lo contrario o de llevar la contraria a la reina porque nacían con esa idea de monarquía que Mariah la había enseñado tras nacer. ¿Y si la reina también tenía miedo a perder el control? ¿Y si Mariah era solo una marioneta como el resto? ¿Por qué debían de quedarse dentro de una cueva siendo ellos lo suficientemente capaces de vivir fuera? Esas preguntas empezaron a recorrer la mente de Splite que ya no veía el interés que tenía la reina en esconder todo un pueblo de gente que debía trabajar y obedecer puesto que es lo único que podían hacer de sus vidas cortas, y eso la hacía cuestionarse sobre algo importante, ¿su reina quería el bien de su pueblo o quiere solo el poder sobre ellos? Pero no tuvo tiempo en pensar una respuesta porque Mariah se puso firme con la mirada directamente en los ojos verdes del rey elfo que media a penas quince centímetros menos que ella pero que aún así se mostró sereno y tranquilo ante el cambio de posición de Mariah.
-Nozotroz zomoz incectoz y obedecemoz a nueztra reina porque ez la tradición y queramoz o no debemoz ceguir eza tradición a contra de nueztroz deceoz - dijo Mariah.
-Entonces no tengo nada que decir - dijo el rey y hizo unas señas a los guardias para que acompañarán a sus invitados a la pirámide de las cocinas y el laboratorio, aunque Splite se detuvo antes de entrar y miró hacia atrás porque sentía que el elfo le estaba mirando, cosa que así era - edy yjkaqal (ten cuidado) no dejes que otros tapen tu luz con sus ideas - Splite inclinó la cabeza como de agradecimiento por el consejo y se fue detrás de los demás dejando al rey elfo solo y meditando - xaaq apa akydeqeq (ella los liberará).