Capítulo 4

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Nathalie le pidió a Gorila que ese día no pasará a recogerla, ella llegaría por su cuenta a la mansión, iba caminando con su hija, la tenia tomado de la mano, Marinette iba sumamente feliz porque ese era su primer día de clases, Nathalie aún no podía deshacerse de ese sentimiento que la consumía, ¿Cómo debía enfrentar ese momento?, sabía que este era el primer paso, luego su hija estaría en secundaria, la universidad, si seguía pensando en el fututo iba a vomitar, debía relajarse, pero no era tan fácil, estaban a punto de llegar a las instalaciones de la escuela, se podían ver más niños y padres caminando hacia ahí, la emoción de Marinette aumentaba, al llegar al salón de clases Miss Bustier se encontraba alegremente recibiendo a cada niño, les dedicaba una tierna sonrisa y luego se presentaba, después de eso podían ingresar y tomar asiento en el salón de clases, algunos seguían pegados a las piernas de sus padres o les atemorizaba entrar, Marinette no perdió más tiempo y se despidió de su mamá y rápidamente ingresó al aula

—Desearía que todos tuvieran la misma actitud— confesó la profesora

Nathalie soltó una pequeña risa

—¿Caline?— preguntó mientras la observaba, cuando matriculó a su hija le informaron del salón de clases y el nombre de la Miss, pero Nathalie no había pensando mucho en eso, hasta ahora que la vio, si su memoria no fallaba, ambas habían asistido al mismo instituto

—Nathalie Sancoeur— dijo asombrada al reconocerla— Cuánto tiempo, no sabía que habías regresado a Paris— mencionó

—Vine hace poco tiempo, que gustó verte— dijo

—Parece que será la maestra de tu hija, es asombroso lo rápido que pasa el tiempo— reflexionó y al ver a Marinette no cabia duda de que era hija de Nathalie, eran muy parecidas

Nathalie se despidió de su vieja amiga, debía irse o llegaría tarde y la puntualidad era muy importante para ella

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Llegó a la mansión y comenzó con sus labores diarias, ese día parecía ser uno tranquilo, no tenía tantas reuniones programadas, el Sr. Agreste estaba en su taller diseñando y claramente no debía ser molestado, estaba sentada en su escritorio coordinado entregas y realizando compras de materiales en el extranjero, en su bandeja de entrada ahora figuraba un nuevo mensaje, el asunto solo decía "Importante" y el remitente era: Emilie Graham de Vanily, aquello le generó un alto grado de curiosidad, por lo que ahora se encontraba dándole clic al correo para leer su contenido:

"Buenas Gabriel, esperó que te encuentres bien. Este email podría ser un poco impersonal, pero si te llamó no respondes mis llamadas, así que opté por usar este medio, como tal vez recuerdes este fin de semana es el cumpleaños de nuestro hijo, sabes que los sentimientos que tengas hacia a mi me tienen sin el menor cuidado, pero si al menos pudieras llamarlo y felicitarlo o enviarle un regalo a Adrien al internado te lo agradecería."

Sin más que decir me despido.

P.D esperó que tu asistente te pase el mensaje, antes de que te molestes, quiero aclarar que fue la mejor idea que se me ocurrió para comunicarme contigo.

Emilie.

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Nathalie estaba atónita, acababa de leer un correo de la ex esposa de su jefe, inclusive sentía que había violado la privacidad, pero no entendía porque ella le había enviado ese correo entonces, estuvo unos minutos más dándole vueltas al asunto, pero debía concentrarse en su trabajo, después se encargaría de pasarle el mensaje a su jefe, la casa era tan silenciosa que a veces solo se escuchaba el sonido de las teclas cuando escribía en el ordenador o el resonar de sus tacones cuando caminaba, ya era la hora de ir a recoger a su hija y se sentía ansiosa por escuchar que tal le había ido en su primer día

Destino (Gabenath)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora