Capítulo 3

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Capítulo 3

Takuma le miraba desde una esquina de la habitación no muy alegre, mientras Hanabusa no dejaba de alagar como se veía y Kain sacaba una segunda cerveza mientras miraba por la ventana hacia donde se encontraba Ruka sentada con Rima.

—No me gusta, pareces un pelele —Comentó de pronto Takuma y Aidou lo miró impactado abriendo exageradamente su boca— Te ayudaré escoger algo adecuado —El rubio se levantó y caminó al armario— ¡Vamos novio que esto es por ti!

Kaname ahogó un suspiro y siguió a su amigo quién estaba al final de aquel largo guardarropa mirando los trajes de manera curiosa, moviéndolos, sacándolos y devolviéndolos mientras negaba con la cabeza.

—Supe lo de Zero ¿Cómo estás? —Pregunto el rubio aún sin mirarlo mientras seguía moviendo los trajes eliminándolo solo con la vista

—¿Cómo puedo estar? Lo de nosotros era solo un juego lo único que me preocupa son los show que están haciendo y que molestan a Yuki —Kaname guardó las manos dentro de su bolsillos mientras desviaba la mirada

—Es curioso que menciones que te moleste —Comentó Takuma mientras sacaba un traje blanco de entre los conjuntos y se lo entregaba— Este te irá bien, no permitas que otro lo ocupe

—Takuma —Su voz sonaba seca y profunda pero el rubio solo le dedicó una sonrisa y salió del armario

Takuma era su mejor amigo desde que tenía memoria, su padre era dueño de uno de los más grandes Internados lo cual lo convertía en un importante momento en el círculo de sus padres y eso fue lo que los unió. Ambos estaban tan atrapados en un mundo que no deseaban que se vieron reflejado en el otro formando una fuerte amistad, aquellas que con solo una mirada uno sabe cuándo algo está ocurriendo.

Él había sido el primero en notar como se había quedado fascinado con el pequeño salvavidas, un Zero joven y lleno de dolor. Fue también el primero en notar cuando había cometido el gran error con Ruka y fue quien le ayudó a superar dicho error -aunque aún estaba pagando por este.

Pero, con Zero siempre fue un juego, ambos sabían que aquello no sería para siempre.

¿Cierto?

Cuando se puso el traje y se miró en el espejo del ropero tomó una profunda respiración mientras una vieja conversación volvía a su mente.

—Que estirado te ves —Había comentado Zero cuando salió con su traje de gala, la verdad había esperado algún comentario de él pero no ese precisamente— ¿No tienes algo más? ¿Algo que te haga ver menos... amargado?

Había abierto la boca para contestar pero en eso Takuma río suavemente interrumpiéndolo.

—Zero tiene un punto a favor —Opinó el rubio mientras se montaba en la silla y le miraba con las manos apoyadas en el respaldo

—Pues lo siento pero esto es lo único que tengo —Había contestado arreglándose el cuello de la camisa mirándose en el espejo, fingiendo no ver a los otros dos por el reflejo de este

—Creo que uno blanco le haría ver mejor —Había comentado Zero y Takuma asintió— Resaltaría su cabello y ojos, sin contar que sacaría ese aire de estirado pasado a naftalina

Zero tenía razón, el blanco resaltaba su piel, sus ojos parecían brillar y se veía mucho más joven, solo faltaba una corbata y tenía una en mente.

Pero no era adecuado.

Cuando salió Takuma sonrió con satisfacción y sacando su celular le saco una foto, Aidou le alabo y mucha gente que pasaba se volteó a mirarlo, desgraciadamente Zero había tenido razón.

Ahora Es MíoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora