Ahora Es Mío

Capítulo 5

Capítulo 5

Kaname se había escapado de su despedida de soltero media hora después de haber estado hablando con su tío, pero ahora estando en el Hotel "Luna Nueva" se sentía estúpido ¿Por qué se encontraba haciéndole caso a su tío? El hombre nunca había tomado responsabilidad alguna en su vida ¿Por qué ahora haría algo correcto?

Pero las palabras de Rido taladraban su cabeza insistentemente ¿A qué se refería con hombres? ¿Qué pretendía con lo que había dicho? Antes de poder enfriar su cabeza y evitar que el alcohol tomara control de sus actos subió al ascensor donde apretó al piso indicado, al ser el futuro dueño no fue difícil sacar la llave maestra de la recepción.

Aunque nada de lo que se imaginó lo preparó para lo que vio, sintiendo como el suelo bajo sus pies se abría y dándose cuenta que verdaderamente había perdido a Zero por algo que no lo valía.

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Ichiru observaba por la ventana del departamento de Takuma mientras jugaba con el poco café que tenía en su taza. No pasaron mucho tiempo en la despedida de solteros, el ruido, la música, las personas con poca ropa rosando sus cuerpos entre sí; no era un ambiente donde se sintiera cómodo, algo irónico considerando que llevaba tres años trabajando como barman.

—¿Qué sucede? —Preguntó Takuma saliendo de la ducha vestido con su pantalón de pijama y una polera desteñida

—¿Por qué Kuran está haciendo todo esto? —Preguntó finalmente

Aquella pregunta le había estado carcomiendo desde que había visto al mayor terminar con su hermano gemelo, fue un momento tan tenso y frío que no entendía cómo su hermano había mantenido la compostura.

Él había temido alguna vez aquel final con Takuma, el rubio también era parte de un círculo familiar muy poderoso y tradicional, pero el chico había dejado todo atrás, rompió su compromiso con su prometida y había dejado la casa de su familia, pero sobre todo se había quedado a su lado. ¿Por qué Kaname no podría hacer lo mismo?

—¿Hace cuánto que te molesta esa pregunta? —Takuma se acercó y abrazó con cariño al menor— Kaname es hijo único, algo que nunca agrado mucho a su abuelo y siempre crítico, ante esto Haruka siempre exigió que Kaname fuera perfecto para demostrar que él era digno de la familia Kuran. Él siempre tuvo que pelear por su posición en su propia familia y creo que el miedo a perder lo único que sostiene su mundo no lo deja ceder a sus propios deseos

—¿Pero tú pudiste? —Ichiru alzó la vista viendo como el rubio lo miraba con sorpresa

—Pero yo nunca tuve que pelear por mi lugar, al contrario siempre estuvo ahí —Takuma río suave y dulcemente— Posiblemente siga ahí. No es que lo justifique, pero sé que no es algo difícil de superar

Ichiru hizo un pequeño mohín antes de ahogar un suspiro, la verdad es que no entendía la dificultad de la que hablaba Takuma, pero él había crecido en un mundo donde tenían que trabajar duro para conseguir lo que deseaban y si algo no les gustaba eran libres de cambiar eso.

—¿Alguna vez tú volverías a esa vida? —Preguntó de pronto

—¿Y perder todo esto? —Takuma volvió a reír suavemente— Es la primera vez que tengo la libertad de escoger hasta qué quiero comer, no estoy loco

Ichiru sonrió antes de eliminar la distancia entre sus labios y los de su novio, estaba feliz por poder disfrutar aquel momento con el rubio, sin importar si solo fuera por un día o un año más él lo disfrutaría al máximo.

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Tomando una profunda respiración hizo lo único que había aprendido en su familia, ser un Kuran. Dibujo la sonrisa más burlona cerró la puerta tan fuerte que ambos hombres se separaron para observar, ambos completamente desnudos, notoriamente bajo el velo del deseo.