S I E T E

570 85 16
                                    

Emilio llego al departamento por eso de las casi tres de la mañana, entró y vio la mesa acomodada perfectamente, las flores y las velas. Bufa de la frustración, había olvidado por completo la cena que le prometio, comienza a caminar a la habitación, entra y ve a Joaquín dormido, se coloca su pijama y se acuesta rodeando a su prometido por la espalda en un abrazo.

— Perdón por no llegar a la cena, en verdad lo siento y mucho —le da un beso en la sien y se apega mas al cuerpo del contrario.

A la mañana siguiente Joaquín despertó, se intento levantar pero sintió un agarre en su cintura, con sumo cuidado toma la mano, la levanta y se libera del agarre.

Se dirige a la cocina y comienza a preparar su desayuno, se encuentra disfrutando de su desayuno, cuando siente como lo toman de la cintura y le dan un beso en la mejilla

— Buenos días, hermoso ¿cómo dormiste? —le intenta dar un beso pero, el castaño se voltea— Amor, perdón por lo de ayer.

— Debiste avisarme, quede como un estúpido al esperarte por mas de tres horas —habla con el ceño fruncido

— De verdad lo siento, se me olvido por completo. —se intenta excusar

— ¿Qué estabas haciendo que se te olvido? ¿O qué? —un poco mas molesto que antes

— Tuve una pequeña complicación con mi paciente y después de eso tuve una cirugía y pues... —Joaquín levanta la ceja esperando respuesta y el rizado continúa— Me quede platicando con una enfermera, mientras estaba al pendiente de mi paciente.

— Bueno pues también deberías casarte con la enfermera, se ve quien es mas importante —se levanta de su lugar dispuesto a irse, pero lo toman del brazo— Suéltame Emilio, no quiero hablar contigo

— ¡Joaquín! Por favor no te pongas de esa manera —pide Emilio

— Ponerme ¿cómo? Emilio, pase toda la tarde pensando que hacer de cenar, una vez que me decidí, preparé la comida con todo el cariño, arregle el departamento para tener una bonita velada, te espere por mas de tres horas y me fui a dormir un poco cabizbajo, pero no me mortifique porque pensé que era por tu trabajo, pero no fue así —suspira— Ni siquiera te acordaste de la cena que me prometiste —se safa del agarre y se encierra en la habitación de visita.

Emilio bufa, y justo en ese momento recibe un mensaje del hospital, pidiéndole que necesita que vaya lo mas pronto posible. Se dirige a la habitación donde él castaño se encerró y toca la puerta.

— Amor, me necesitan en el hospital, en serio perdóname y cuando regrese me gustaría hablar contigo —al no recibir respuesta— Te amo como a nadie, no lo olvides

Sale del departamento y Joaquín al escuchar la puerta del departamento, suspira y susurra un "también te amo"

Emilio solo esta un par de horas, en el hospital y en cuanto se desocupa, va de inmediato al departamento, ya que quiere arreglar las cosas con Joaquín lo mas pronto posible, odia estar peleados. Entra al departamento y no ve a Joaquín a si que va a la habitación y lo ve en el balcón que tiene la habitación, se acerca y se coloca detrás de él.

— Creí que llegarías, igual de tarde que ayer a lo mejor te quedabas platicando con tú amiga la enfermera —habla en un tono un poco molesto

— Ella no es importante ni indispensable y tú si —aclara— ¡Amor! Mirame —niega aún dándole la espada— Por favor —voltea a verlo y Emilio toma su rostro entre sus manos— Perdón en serio se que fui un estúpido y lo que tú quieras, pero por favor, no me gusta estar peleado contigo.

— Prometes no volver a dejarme plantado —asiente y Joaquín suspira— Esta bien te perdono

— Mira el día de hoy tú y yo vamos a ir a cenar a un bonito restaurante, como recompensa por lo de ayer —lo toma de la cintura, y se acerca a su oído— Y tal vez de regreso, te podría hacer el amor —de inmediato se sonroja el castaño y le da un golpe— ¡Auch! No me golpes es maltrato

Mi Corazon Donde viven las historias. Descúbrelo ahora