Operación Aristemo [Reescribiendo] ©

T1: OO1

Un auto color negro y ventanas polisterizadas, se detenía frente a una privada.

El portero de aquella privada se acercó a la ventana del conductor, dándole un pequeños toques.

La ventana fue bajada dejando ver a un joven hombre de cabellos castaños.

—¿Usted es el señor Cuauhtémoc López?— Preguntó el amable señor de unos 50 años. Recibió un ligero "si" de respuesta, —Bienvenido, le entregó las llaves de su casa—

El castaño agradeció al recibir las llaves de su nuevo hogar.

Las puertas de la portería fueron abiertas dejando ingresar al auto a la privada.

Mientras llegaban a su destino, un pequeño de 12 años miraba el paisaje por la ventans, saltando ligeros suspiros con pesadez.

—Papá, ¿Por qué tuvimos que irnos de Oaxaca?— Preguntó con un tno triste.

—Ya te lo dije Daniel, para iniciar una nueva vida—

—¿Pero una nueva vida lejos de mjs hermanas?....lejos de Oaxaca— Musito con tristeza. —Mi vida está allá, mi único migo ahora vive a kilometros de mi—

—Míralo de otra modo, es un nueva oportunidad de conocer gente nueva, hacer nuevos amigos—

—¿Si recuerdas que soy pésimo haciendo amigos? Foor algo Sebastián es el único amigo que he tenido en toda mi vida, y ahora nos separa miles de kilometros—

—Podrás visitarlo en las vacaciones—

—Pero no será lo mismo, muchas gracias papá, arruinaste mi vida—

—Cuida tus palabras jovencito, tú todavía no te mandas solo—

El pequeño bufo pesadamente y recostó su cabeza en la ventana del auto, mientras miraba a su pequeño hermano al lado suyo en su silla para bebés.

—No crezcas tan rápido Erick, la vida no es tan fácil cuando empiezas a crecer la vida cada vez más se te cumppla—

Su hermanito no entendía nada y solo sonrió como si de algo gracioso se tratara, cosa que también logró sacarle una pequeña risa al más grande.

Después un pequeño trayecto de camino, el auto fue detenido.

Daniel bajó a su hermano de la silla para bebés y con en él brazos, bajó del auto.

—Oh, pues nada mal la nueva casa. Mira chaparro, esa es nuestra nueva casa—

Daniel señalo la casa al frente suyo, el bebé sólo reaccionó a aplaudir, cosa que le pareció tierno y gracioso al hermano mayor del pequeñín.

—Eres un excelente hermano mayor— Elogió el adulto a su hijo.

—No tengo a mis hermanas, al menos lo tengo a él—

Todos ingresaron a la propiedad, lo bueno fue que la casa ya estaba amueblada desde hace dos días.

—Pa', ¿Y si adoptamos un perrito? Apenas llegamod y ya se siente lo frío de la casa, un perro traería alegría a la casa, claro, junto a Erick—

—No lo sé, lo pensaré, ¿De acuerdo?—

El ojimiel asintió con una leve sonrisa.

El sonido de un celular llamó la atención de los presentes.

—Es mi celular, ¿Dónde lo dejé?—

Buscaba desesperadamente au dispositivo móvil.

—Ay Daniel, no pierdes la cabeza porqué la traes pegada, lo guardaste en mi maleta—

—Ay, si es cierto. Últimamente parece que viviera en las nubes—

Rebusco en la maleta de su padre; luego de encontrarlo desbloqueo la pantalla y en las notificaciones aparecía 4 llamadas perdidas de "Sebastián".

—No manches, le devolveré la llamada—

3 tonos bastaron para que la llamada fuera contestada.

Llamada

—¡Hey! Por fín das señales de vida, ¿Qué tal todo?—

—Disculpa, pero el viajé fue bastante largo, no hace mucho llegqmos—

—¿Qué tal la casa?—

—Está linda, pero se siente gacho no tener a mis hermanas y a papá—

—Ahora que los mencionas, hace rato estuve en la casa tu padre—

—¿Alguna novedad?—

—Pues no sé si sea importante o considerarlo una amenaza, pero tu papá contrato un chofer, muy lindo por cierto—

—Stop, no te distraigas, sin muchos detalles gracias—

—Era broma tonto, pero pues te informo para ver si tú me dices que hacer—

—Vigila a el chofer, si ves que puede ser una amenaza le dices a mis hermanas, estoy seguro que ellas sabrán que hacer—

—De accuerdo, debo cortar la llamada, el colegio organiza una ceremoniaven honor a nuestro rector y a mi me tocó encargarme del sonido—

—De acuerdo, adiós—

Finalizada

—Oye papá, ¿Y cuándo inició las clases?—

—El lunes, mañana vamos a comprar tu uniforme y útiles escolares—

—Bien, dos días de descanso antes de ir a clases—