En alguna parte de la Ciudad de Oaxaca, cierto dúo travieso se encontraban caminando por el enorme patio de su escuela.
-No me gusta venir a la misma escuela sin la presencia de nuestro hermano- Exclamó la pequeña niña con su cabello agarrado en una coleta.
-A mi tampoco pero papá no nos quiere cambiar de escuela- Ahora habló la niña con cabellos suelto con rizos en las puntas.
-Isabella, Laura, ¿Qué hacen tan solas? Creí que estarían con sus amigos- Un chico más alto y con ojos color negros, se acercó a las niñas, las cuáles le sonrieron.
-No, queríamos estar solas. Todo esto del divorcio nos tiene mal- Murmuró Isabella con tristeza.
-Si a Daniel le dio muy duro, no me imaginó a ustedes, ¿Ppr qué no me acompañan a la sala de música? Debo mirar el sonido para la ceremonia dentro dos horas-
-Suena bien, de pasó podemos aprovechar y enseñar un poco antes de la presentación- Habló Isabellsx ahora con una sonrisa. -Gracias por ser como un hermano para nosotras-
-Le prometí a Daniel cuidarlas mientras él no este aquí, y lo planeó cumplir; así que no intenten una de sus diabluras y caminando al salón de música-
Mientras tanto, en la Ciudad de Oaxaca. Cierto jovencito ojimiel se encontraba sólo en una de las mesas de la cafetería.
Hace dos días inició las clases en su nueva escuela y como ya se lo esperaba, no ha hecho ningún amigo en esos dos días.
Sólo era él y su celular mientras comía lo que compraba dentro de las instalaciones educativas.
A unas cuantas mesas de la suya, se encontraban un pequeño grupo de amigos integrado por dos chicas rubias y ojos azules y un chico de cabellos negros.
-Oigan, ¿Y si le hablamos al nuevo? Llevas dos días y ni un solo amigo ha hecho, ¿Creen que sea antisocial?- Preguntó una de las chicas.
-Posiblemente se le dificulte hablar con gente nueva, a nadie le gusta ser el nuevo- Musito la otra chica rubia, mientras bebía su refresco. -Yo digo que si le hablemos, ve tú Valeria-
-Si, ve tú Valeria- Apoyo el unico chico del grupo de amigos.
-Oigan no es justo, ¿Por qué yo?- Reprochó.
-Tú fuiste la de la idea- Argumentó la otra chica.
-No se vale, vamos todos o ninguno- Valeria miro seriamente a los otros dos.
Solos atinaron a rodar las ojos sabiendo que no iban a poder con Valeria.
Cada quién agarró lo que estaba comiendo y caminaron a la mesa del chico.
Daniel se encontraba mirando fotos antiguas de cuándo su familia todavía estaba unids, la tristeza era inevitable.
Pero apartó su vista de la pantalla cuando sintió como alguien se sentaba al lado suyo.
-Hola, me llamo Valeria.
-Eh....¿Hola?-¢
-Me siento adelante tuyo, ellos mi hermana Juliana y mi amigo Julián, queríamos invitarte a ser parte de nuestro grupo de amigos-
-Ehm......escuchen, es muy amable de su parte quererme invitar a su grupo, neta, pero no soy bueno hablando con personas que no sean mi familia o mi mejoe amigo-
-Eso es lo de menos, aparte que estar solo no creo que sea muy divertido ¿Ó si?- Valeria lo miro con una sonrisa "inocente".
-Uhm.....bien, tú ganas- Refuño con decepción de él mismo por perder contra esa chica.
Y al parecer de tener un solo amigo pasó a tener tres nuevos amigos, al menos ya no va a estar tan aolo.
Las horas pasaron, y con ello la Jordana escolar había terminado por hoy para comer chico de ojos color miel.
Ingresó a su casa, siendo recibido por su pequeño hemano que corrió a aferrarse a sus piernas.
-Hola chaparro- Saludó el mayor, alzando a su hermanito.
-Buenas tardes joven- Una chica bastante joven, llegó donde estaban los hermanos.
-Oh, hola, supongo que tú debes ser la niñera- Sonrió con amabilidad.
-Así es, un gusto, me llamo Fernanda; ahora que usted ya regresó yo me retiró-
Después de despedir a la niñera, se dirigió a la cocina para ver que había para preparar algo de comida para él y su hermano.
Para él se preparó un sándwich con un jugó de mango y para su hermano por suerte había en la nevera una papilla de manzana.
Antes de sentarse a comer subió a su cuarto por su laptop.
Sentado en el comedor, y ayudando a su hermano para comer. Le dio iniciar una videollamada con su amigo.
Videollamada
-Hola, ¿Qué tal todo?-
-Hey, no pues nada, acabo de llegar del colegio, ¿Y tú?-
-Igual, pero a la 1:30 debo regresar al colegio para la ceremonia, lo bueno fue que nos darán dos días de descanso-
_Qué suerte la tuya, ¿Y como va todo por allá?-
-Normal, tua hermanas hoy harán una presentación en la ceremonia y sobre el tema del chofer, no creo que sea una mala persona-
-De todos modos no bajes la guardia-
-Tú tranquilo, ¿Y como vas con el tema de hacer amigos?-
-Uy, hoy hice tres amigos nuevos, pero una chica de ese grupito esta medio loca-
-¿Y por qué medio loca?-
-Practicamente es como tú, una maipuladora profesionql-
-Ob, mira tú, de mi no te liberas facilmente-
-Sebastián, 15 minutos-
Se escuchó de fondo la voz del hermano mayor del menor.
-¡Jodete wey!......debo irme Daniel, adiós-
Finalizada
Después de colgar la videollamada, se disputó a terminar de comer
Luego de eso, subio al segundo piso y entró al cuarto de su padre para buscar unos papeles. Entre tanto busqué y busqué se encontró con un sobre que tenía escrito "Infiel"
Con duda y miedo de lo que podría encontrar, abrió ese sobre. Sus ojos de aguaron al ver esas fotos, era imposible.
Negó rápidamente con la cabeza y se limpio las lágrimas.
-Imposible, esto es mentira, mi padre no haría algo asi.....voy a encontrar la verdad, cueste lo que me cueste-
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Operación Aristemo [Reescribiendo] ©
FanfictionDaniel Steven, hijo mayor de Aristóteles Córcega y Cuauhtémoc López. A sus 14 años fue testigo de que sus padres decidieron divorciarse. Él y su pequeño hermano, Erick Camilo; se mudaron con su padre Cuauhtémoc a la Ciudad de México, la capital. Sus...