Capítulo 25. 1: Happy end.

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Asuna pov:

Camine lentamente por el lugar donde se realizaría la boda, pero me detuve al notar como una persona encapuchada hablaba con Yui, me llene de terror y me acerque rápidamente a ellos... pero me detuve al notar a Eugeo entre ellos.

-- Es demasiado linda.

-- Si... saco la belleza de su madre...

Me escondí y los seguí observando, ¿Quien era aquella persona?

-- ¿Seguirás con el plan?

-- Debo hacerlo, si no lo hago tu me mataras y Alice se decepcionara.    

¿Plan? ¿Alice? ¿De que demonios estaban hablando?

-- Entonces supongo que nos veremos más tarde... canarito.

-- No me llames así.

El hombre encapuchado soltó una carcajada y se alejo, seguido de otras personas que vestían igual que el.

-- Sospechoso...

-- ¡Asuna-san!

-- ¿Selka? ¿Que ocurre?

-- La boda ya va empezar, creo que sería mejor que usted...

-- Entiendo, Iré en un rato.

Ella asintió y comenzó a alejarse de mi, mire de nuevo a Yui, quien ahora parecía jugar con una hermosa niña de cabellos rojizos y ojos marrones. Suspire y lentamente me dirigí hacía el Altar

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  Eugeo se veía completamente pálido y por alguna extraña razón parecía rechazar todas las caricias que quería darle. 

-- No...

-- ¿Que?

Me quede pálida y deje de intentar rozar nuestras manos.

-- Lo siento... no acepto casarme contigo...  

Eugeo se alejo lentamente del altar.

-- No soy la persona adecuada para ti...

Alice lo rodeo con sus brazos sin darle importancia a la mirada llena de confusión que tenía antes de lanzar el anillo a alguien que parecía estar detrás de mi.  

-- Cuanto tiempo sin verte, princesa...

Mi corazón latió con fuerza antes de que volteara lentamente a ver al dueño de aquella voz.

-- Kazuto...

-- Si me lo permites... yo si deseo casarme contigo.

-- Deja de bromear...

-- ¿Esto te parece una broma?

-- Todo lo que tu haces resulta ser una broma de mal gusto...

-- Te demostrare que no es una broma de otra forma entonces...

Kazuto acaricio mis mejillas y saco una pequeña caja de piel de una de las bolsas de su traje.

-- ¿Que es eso?...

-- Supongo que ya sabes lo que hay dentro.

Me cubrí la boca con mis manos.

-- Por favor... no juegues conmigo...

El suspiro y abrió la caja mostrándome un hermoso anillo de oro cubierto con unos pocos diamantes.

-- Asuna Yuuki, ¿Me harías el honor de ser el hombre más feliz del mundo...

-- ¡Si!

 No lo deje terminar y me lance a sus brazos antes de besarlo, sellando así nuestra unión.

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Unos años después: 

Pov Autora: 

-- ¡Espérame!

-- ¡Eres muy lento! ¡Papá y mamá se acabaran el postre si no llegamos pronto!

-- ¡Lo se! pero... ¡No corras tan rápido, Yui!

-- ¡Eres muy lento Alistair!

Un hombre de cabellos oscuros y ojos plata apareció delante de ellos.

-- ¡Papá! ¡Yui dice que soy lento!

-- ¡Pues es la verdad!

-- Niños, dejen de pelear, o los castigare y...

-- ¡Pero...

-- Niños obedezcan a su padre.

Una hermosa mujer apareció cerca de ellos con un par de mellizos entre sus brazos.

-- Si mamá...

-- Ahora vayan a la cama.

Los niños hicieron pucheros pero obedecieron al mirar el rostro molesto de su padre, La mujer suspiro y coloco a los mellizos en sus cunas mientras el de ojos platas la miraba fijamente.

-- Son igual de tercos que tu.

-- No digas eso princesa... Oye... ¿Y si hacemos otro bebé?

El de cabellos oscuros acaricio seductoramente la cintura de su esposa antes de darle una nalgada.

-- ¡No empieces o dormirás con las mascotas!

-- Eres muy cruel Asuna...

La chica le sonrió y lo beso apasionadamente.

-- Solo deja que las niñas se duerman y haremos lo que desees.

Ella le guiño el ojo y se alejo de el moviéndose de una manera provocativa, Kazuto la siguió, pero cuando estuvo a punto de entrar a su habitación, ella le cerro la puerta en la cara.

-- ¡Asuna!

-- Buenas noches Kirito.

-- ¡Abre la puerta!

-- Nop.

Asuna rió mientras escuchaba los quejidos de su esposo.

-- Te abriré hasta que tus hormonas se calmen.

-- ¡Pero es tu culpa que este así!

-- No es verdad.

-- ¡Agh! ¡Bien! ¡Dormiré afuera hasta que la princesa quiera abrirme!

-- Así es, buenas noches.

-- Descansa... mi sexy y excitante princesa.

Kazuto soltó una carcajada antes de que un zapato se estampara en su rostro.

-- ¡Idiota!

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Hola!!!! Eh aquí el primer final de la historia jsjsjsj, espero que las haya gustado y les agradezco todo su apoyo.

Hasta la próxima!          


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