Mama se encontraba haciendo la cena, y en tan solo tres segundos ya todo estaba en los platos de los bebes. Obviamente no nos alimentábamos solamente de sangre humana, los platos estaban llenos de carne sin cocinar con mucha sangre alrededor de esta, claro era carne de animal.
–¿te quedaras para la cena? –me pregunta, recogiendo mi mechón sobresaliendo, lo coloca detrás de mí oreja.
–Tengo un nuevo viaje. –respondo.
–Ohh, claro. Alec me ha comentado. Tu padre también estará ausente este fin de semana. ¡Eso indica que estaremos solos! –grita la última frase. Mama amaba quedarse sola con mis otros cuatro hermanos, de seguro irán al “bosque de sombras” un lugar especial para casar, solo lo podemos ver los vampiros es algo raro.
–Bueno, no quiero llegar tarde al vuelo, ¿Alec envió los pasaportes? –pregunto.
–Esta todo en tu recamara. –volé hacia mi habitación. Las maletas ya estaban listas y los pasaportes y las identificaciones falces ya estaban empacadas.
Tome el auto y Salí para encontrarme con Jake.
*Me llaman al móvil*
Veo la pantalla, mierda. Estaciono el auto en una orilla de la calle. Es Esteban, mi novio. Nosotros los Strigoy no podemos hacer eso de tener una relación y mucho menos con un mortal.
*contesto*
–Mi amor, necesito que vengas lo más rápido posible a mi casa. –responde apenas contesto.
Revolví mis ojos y no respondí.
–¿Alice?
*colgué*
Ahora mucho menos quería ir a su casa, en realidad nunca lo quise. Desde aquel día que rompieron mi corazón eso es lo que hago yo, tratarlos de igual manera.
Cuando llegue a la cabaña en donde estaba Jake, baje solo lo más importante que eran los pasaportes y las identificaciones. Abrí la puerta y estaba dormido en el suelo. Reí al ver tan asquerosa escena. Estaba babeando. Odiaba a los humanos y de verdad lo hacía.
Le pateo para que despierte. Nada.
–Lennon!! –grite por su apellido. y despertó de golpe. –de acuerdo nos vamos ya.
–¿No puedo despedirme? –pregunta limpiando la baba sobresaliendo de su asquerosa boca.
–Obvio que no idiota, estas secuestrado. –le entregue sus papeles. –De acuerdo tu nombre de ahora en adelante es… –miro el papel. –Logan Parker, tienes 22 años y trabajas conmigo en la fábrica de mis padres. ¿Listo? –él negó. Lo mire firme y seria.
–Listo. –respondió en un hilo de voz.
ESTÁS LEYENDO
Stockholm Syndrome
Vampire"Yo sé lo que ha hecho, pero todavía la amo " " No sé por qué, pero la quiero de vuelta " "Sé que parece una locura , pero la echo de menos " .
