Mixtpe

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Su banda favorita sonaba de fondo mientras terminaba de grabar el último cd que le iba a dar a Jin, habían terminado hace un mes, pero seguían hablando, y era obvio para todos que Nam no estaba llevando bien todo ese tema. Jin estaba ganando la ruptura y por mucho, no porque fuera malo, o porque no haya querido a Nam, la verdad es que había sido solamente una atracción, se había enamorado de alguien más en el tiempo que había estado con Nam, y antes de serle infiel, había decidido terminar con él. Pero NamJoon no tenía idea de ello, es por eso que seguía creando mezclas de música como si fueran adolescentes en los ochenta, con cds en vez de cassettes.

Lo que Namjoon tampoco sabía, era que Jin no escuchaba ninguno de sus mixtapes, y todos se los entregó a uno de sus amigos más cercanos, Park Jimin, quien extrañamente tenía el mismo gusto musical que su ex.

—Hey esto es demasiado bueno, ¿como es que ese chico conoce a Lany? —Le preguntó la primera vez que vio una de las mezclas en el casillero abierto del mayor de sus amigos.

—Joon es muy fan de esta música, es solo que yo no tengo el mismo gusto que él —Respondió Jin recuperando todos los discos que tenía en su casillero— de hecho creo que solo compartimos un gusto, esa de quien es fluffy, y fue porque tu me lo mostraste.

—Where's Fluffy, Jin, no Who's. —Voló los ojos pero con una sonrisa ligera, igualmente no le prestó mucha atención, pues continuaba viendo la playlist que tenía el cd.— Jin... ¿eres idiota? —el mayor le miró ofendido— ¿¡Como puedes ignorar las mezclas de este chico!?

—¡Pues porque no soy masoquista, y esta música no me gusta! —cerró el casillero de metal de golpe, sobresaltando al castaño de menor estatura.— Sabes, iba a darte todos los discos, pero ahora olvidalo. —comenzó a alejarse con mucha velocidad del lugar en el que estaban conversando, con intención de perder a su amigo menor.

—¿¡Que!? No. ¡Jin! —Pero este no lo permitió, y corrió detrás de él— ¡Era una forma de decirlo!

—¿De decir qué? ¿Que soy idiota?

—Sí- ¡no! ¡No por las razones que tu crees! —Jin se detuvo y giró abruptamente, haciéndo a Jimin chocar contra su pecho, se tambaleó, y estuvo a punto de caer, pero protegió más el disco que su propia integridad.— Okay, escucha.

—Escucho. —se cruzó de brazos y alzó una ceja.

—Mira, si te dedican música, es porque quieren decirte algo sin decirlo directamente, tienes que ver más allá de lo que ves...

—Oh, ahora eres Rafiki —Jin giró los ojos y se marchó nuevamente.

—¡Oh vamos! ¡El nombre de este es Absolute Beginners! —Jimin continuó siguiendo al rubio cenizo— Dice "absolutamente te amo, como un absoluto principiante" —Jin siguió sin hacerle caso— ¡Vamos, es David Bowie!

Eso ocurrió la primera vez que tuvo en sus manos uno de los cds de "RM" o Joon, no sabía quién era, no sabía cómo se veía, pues Jin nunca en los dos meses en los que estuvieron juntos, se dignó a presentarlos, y de ello ya habían pasado cinco meses, Jin había terminado con Namjoon hacía un mes, y llevaba la misma cantidad de tiempo saliendo con este chico nuevo, Yoongi, pero los Mixtapes de RM seguían llegando.

—Jimin. —Suspiró Jin llegando con él, pero el menor no se volteó, Jin notó que llevaba los audífonos puestos, y como si fuera poco, llevaba en el cinturón un aparato circular y grande. Negó suspirando y tiró fuertemente de uno de los auriculares y gritó— ¡Jimin!

—¡Ay la puta madre que te-! —gritó, volteándose abruptamente con una mano en el pecho— ¿¡Qué está mal contigo!?

—Joon está mal conmigo —Jin suspiró apoyándose en la pared y levantando un nuevo cd que tenía la portada blanca— Me llegó esto ayer en la noche.

—Oh bueno... esto es totalmente nuevo. —Jimin pausó ahora el disco que estaba sonando, observó con detención el nuevo, era un papel de color crema, y tenía con una caligrafía casi infantil.— "mono".

—Bueno... —El tercer amigo del grupo apareció. Taehyung— ¿Ya está soñando con tu ex?

—No estoy soñando con el ex de Jin. —El castaño hizo un mohín con los labios, mientras que cambiaba el cd de su discman el cual era, si no se equivocaba "I think ur a Contra" para cuando habían terminado Jin y el mezclador misterioso, aunque solo para Jimin, por supuesto.

—Creo que lo ama más de lo que hice yo. —El rubio rió cruzándose de brazos

—Yyy... ya lo perdimos. —Tae frunció los labios dejando de ver al castaño— ¿Quieres ir a John's para almuerzo?

—Está mejor que la comida de la universidad.— el mayor se encogió de hombros comenzando a caminar, dejando a Jimin solo con su nuevo disco.

Por su lado, Namjoon estaba ansioso, era la primera vez que le envía sus canciones a Jin, no eran simplemente canciones de bandas que le gustan, y le recuerdan a él, no, era la primera vez que se abría realmente a alguien, y estaba ansioso por una respuesta. Tan ansioso estaba que no escuchó el timbre de su puerta, ni el sonido de Killing an Arab de The Cure que tiene como tono de llamada, lo que sí escuchó, fue la voz de Hoseok mientras entraba por su ventana, voz que le hizo sobresaltar y caer de su silla mientras veía cómo el resto de sus amigos entraba por la misma ventana.

—Que tal, Joon —Dijo Hoseok con una sonrisa mientras se tumbaba en la desarmada y apestosa cara de su amigo— Ugh ¿desde cuando que no lavas esto?

—¿Qué hacen aquí? —Se quejó mientras sobaba su ojo reseco por la cantidad de horas frente a la pantalla de la laptop.

—Pues... Rescatándote —Dijo Lisa con un tono de obviedad tumbándose al lado de Hoseok— Ay no, Namjoon, ¿Cuanto llevas sin bañarte?

—Seguramente desde que Jin lo dejó —Añadió Jackson, el último en entrar.

Nam los ignoró y cerró su laptop pues sabía que se burlarían de él si se enteraban de que había enviado su corazón a su ex, que encima... no les caía bien. Siempre decían que merecía a alguien más, a alguien, a alguien que lo valorara, y lo hubiera considerado como su primera opción, y esto era porque... no conocían toda la historia, no podían juzgar a Jin sin haber estado en sus zapatos, al menos eso creía él.

—Bien, como sea, hoy vas a salir con nosotros, así que, quieras o no te vas a bañar... y usarás pantalones. —Dijo Hoseok levantándose de la apestosa cama.

—¿Qué posible razón existe que sea lo suficientemente importante como para hacerme usar pantalones? —Preguntó Namjoon viendo como sus tres amigos intercambiaban sonrisas cómplices— Y si hablan los tres al mismo tiempo, juro que los echo de aquí, y cierro las ventanas.

—Imposible, te intoxicarías con tu propio olor.

—Lisa tiene razón, Joon.

—¡Al punto! ¿Para qué me quieren afuera?

—Fluffy está en Seúl hoy.

La Playlist infinita de Jimin y NamjoonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora