TRADUCCIÓN.
Vegeta es un Príncipe Saiyajin, pero a diferencia de otros miembros reales de su raza, es extremadamente único. Es por eso que en tiempos donde despierta su calor, el saiyan dentro de Goku no tardará en percibirlo. ¿Qué será de ellos?
Gé...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Después de que los dos Saiyajin descubrieron que tendrían una niña, lo primero que hicieron fue decirle al Rey Vegeta. No estaba demasiado sorprendido para decir lo menos. Llevaba tiempo adivinando que iban a tener una hija. El rey sonrió y los abrazó a ambos con fuerza.
—¡Felicitaciones! Ahora salgan de aquí y vayan a hacer algo juntos. Tal vez regresen a la Tierra por un día y pasen un tiempo disfrutando del sol. Kami sabe que no tenemos suficiente de eso aquí —Se rió entre dientes mientras miraba. Los dos Saiyajin.
Goku sonrió y miró a Vegeta. —Sé el lugar perfecto al que podemos ir —dijo mientras acercaba el otro al pecho. —Vamos, podemos ir a saludar a los niños y a Bulma, y luego relajarnos todo el día—Le sugirió mientras acariciaba su mejilla; con la esperanza de que diga que sí.
Vegeta puso los ojos en blanco y sonrió antes de alcanzar el rostro del joven Saiyajin. —Creo que podemos hacer eso hoy, se está volviendo un poco aburrido aquí de todos modos. No he tenido la oportunidad de gritarle a algunos mocosos que sólo saben molestar —Se rió mientras miraba a su compañero y procedió a besarlo con alegría en la mejilla.
Goku sonrió emocionado —Está bien... voy a ir a casa y empacar algunas cosas —declaró mientras acariciaba el estómago de Vegeta. —Regresaré pronto —dijo antes de volar a su pequeña casa.
Vegeta suspiró feliz mientras lo veía irse. Escuchó a su padre reírse detrás de él. El príncipe se volvió para mirar a su padre. —¿Qué es tan gracioso, eh? —preguntó mientras se cruzaba de brazos.
—Has cambiado... No pensé que fuera posible que alguien cambiara tanto como tú, pero me alegro de que estés feliz —explicó el Rey Vegeta mientras se acercaba a su hijo. —Todo ese estrés que ten haber pasado ya pasó. Te he estado observando desde aquí. —continuó— Te has convertido en alguien de quien cualquier padre estaría orgulloso.—Él sonrió mientras miraba a su hijo, al ver que tenía lágrimas en los ojos. Se rió y lo abrazó fuerte.
Vegeta no estaba seguro de qué decir, pero sabía que sus hormonas estaban obteniendo lo mejor de él y lo hacían llorar ante la muestra de afecto de su padre. Se apoyó contra él mientras el Rey lo abrazaba. Vegeta miró hacia afuera y sonrió un poco, al ver a Goku volando en su dirección. El príncipe sonrió y fue hacia la puerta para abrirla para su compañero. —¿Estás listo para ir? —Goku preguntó mientras sonreía a su compañero, y tomaba sus manos entre las suyas.
Vegeta sonrió y asintió con la cabeza hacia él, mirando a su compañero poner dos de sus dedos en la frente. Cerró los ojos y sonrió cuando sintió que se materializaban en la Tierra. Miró a su alrededor y vio a sus dos familias, sentados juntos en Capsule Corp.
Gohan fue el primero en hablar. —¡Hola chicos! Cuánto tiempo sin vernos —sonrió, mirando el estómago de Vegeta. Había crecido bastante desde la última vez que lo vio. Cuando Gohan miró al príncipe, notó que parecía mucho más relajado de lo normal. Mientras miraba más lejos, vio que en realidad había una pequeña sonrisa en su rostro. Gohan estaba muy feliz por su padre y el príncipe.
