So Fucking Precious [SixxNeil, Tommick]

04. Se mi novio

Ya habían pasado varios días desde que Tommy y Mick se habían mudado al departamento de Nikki y Vince; y en ese lapso de tiempo el departamento era un verdadero caos gracias a Tommy.

—¡Tommy, no!

—¡Mueran malditas!—Rió el castaño a la vez que quemaba cucarachas de la cocina.

—Les dije que era una mala idea.—Suspiró Mick para después darle otro sorbo a la botella de vodka.

—Lo sé pero fue idea de Nikki.—El rubio le dió la razón a Mars mientras veía a Nikki intentar que Tommy deje de hacer desastre.

—Si, pero tú aceptaste.—Le gritó a Vince sin dejar de perseguir a Tommy.

—Si pero...—Pausó buscando una excusa.—Muy bien, tú ganas, Nikki.—Suspiró estirando sus piernas en el sofá.

Nikki comenzó a reír festejando su victoria, pero aún le faltaba atrapar a Tommy.

—¡Vince, ayúdame!—Gritaba Nikki aún persiguiendo al baterista.

El rubio soltó un quejido y se levantó del sofá, preparándose para comenzar a perseguir a Tommy.

—¡Nunca me atraparán!—Reía Tommy.

—Eso ya lo veremos.—Dijo Vince lanzándose sobre Tommy y tirarlo al suelo, seguido de tirarse encima Nikki haciendo una especie de "bola".

—Oh, rayos.—Se quejó Tommy.—Esta bien, me rindo.—Soltó el spray y el encendedor.

Los tres se levantaron del suelo y el pelinegro chocó las palmas junto con el rubio, señal de victoria.

—Dame eso, Tommy.—Ordenó Mick señalando el spray y el encendedor.

—Pero Mick...

—Dámelo.

Tommy le entregó los objetos y se fue a encerrar a su habitación.
Vince y Nikki fueron a su recámara, dejando a Mick solo en la sala de estar.

—Vince, tengo algo que decirte.—Dijo cerrando la puerta detrás suyo.

—Soy todo oídos.—Sonrió de lado a la vez que se sentaba en su cama.

—Sé que ya pasaron varias semanas desde que te rescaté de ese sujeto y pasó lo qué pasó así que...—Pausó para suspirar.—Quería preguntarte si... te gustaría...—Volvió a pausar intentando no ser tan directo.

—¿Qué?

Nikki se acercó hacia donde estaba Vince, se sentó a su lado y le dió un pequeño beso en la comisura de sus labios.

—¿P-Por qué hiciste eso?—Preguntó con la sagre hirviendo.

—Es que... Vince...—Suspiró para después proseguir.—Joder, eres muy lindo.—Soltó y besó a Vince sin dejar que éste dijiera algo.

—Nikki, yo...

—Lo sé, sé qué piensas que te mentí como siempre decías, pero te he dicho la verdad, yo te amo de a de veras, Vince.—Interrumpió al rubio parándose de la cama y caminando por la habitación sin rumbo alguno.

—No pienso que me mentiste, Nikki.—Habló el rubio.—Yo también te amo.

Nikki dió media vuelta, quedando enfrente de Vince.

—Entonces quieres...—Fué interrumpido por los labios del rubio sobre los de él; indicándole que aceptaba ser su pareja.

—Te amo, Nikki.

—Yo te amo más mi pequeño rubio.—Revolvió el cabello rubio y le dió un beso en la cabeza.

—Vamos a la sala, me muero de hambre pero por fortuna tengo al mejor cocinero del mundo a mi lado.—Sonrió Vince abriendo la puerta de la habitación.

—Tampoco exageres, Vinnie. —Rió entre dientes al salir de la habitación.

—Como tú digas, Nik.