So Fucking Precious [SixxNeil, Tommick]

03. Demasiado rápido para enamorarse

Nikki fue el primero en despertar; tenía el cuello adolorido. Se levantó cuidadosamente tratando de no despertar al rubio. Fue rápidamente a su habitación y se llevó una almohada para ponérsela al rubio debajo de su cabeza.

—Si que tienes un sueño pesado, Vinnie.—Susurró para sí mismo con una sonrisa.

El cuervo se dirigió a la cocina para prepararse algo de desayunar, y justo cuando había acabado de prepararlo el teléfono sonó.

—¿Si?—Dijo una vez el artefacto estaba en su oído.

"Nikki, soy yo, Tommy " Dijo con un tono algo preocupado y al mismo tiempo aliviado.

—¿Qué se te ofrece, viejo?—Preguntó al mismo tiempo que veía si Vince no había despertado.

"¿Dónde estabas? ¿Acabas de despertar?" Preguntó gritando un poco.

—Si, me acabo de despertar, ¿por qué la pregunta?—alzó una ceja sin que el castaño lo pudiera observar.

"¡¿Son las tres y media de la tarde y tú apenas te despertaste?!" Gritó provocando que el pelinegro despegara un poco el teléfono de su oído.

—Lo siento, viejo, estaba muy cansado y....

"¿Cansado? ¿Pues qué hiciste?" Interrumpió Tommy con un tono juguetón  y burlesco.

—Nada, y si hubiera hecho eso no hubiera sido con Vince.—Susurró pues el rubio  comenzaba a despertar.

"Lo que tú  digas, amigo. Te dejo porque parece que estás ocupado." Dijo Tommy y colgó. 

Nikki dejó el teléfono en su lugar y se dirigió a la cocina por su comida y la de Vince. Los llevó a la pequeña mesa de centro y los dejó encima, cuidando de que no se les caiga nada.

—Que lindo trasero tienes...—Escuchó que susurraron detrás suyo. Se dió media vuelta y, se encontró con un rubio sonrojado y con una sonrisa en el rostro, tratando de ocultar lo que acababa de decir.—Hola.—Saludó fingiendo inocencia.

—Si te escuché, Vince.—Se cruzó de brazos.

—E-es mejor que ya comamos, si no, se enfriará.—Cambió de tema el rubio, haciendo que Nikki rodara los ojos.

Luego de haber tenido una agradable plática mientras comían, decidieron salir un rato y despejarse un poco.

En el camino Nikki logró distinguir a Tommy caminar cerca del kiosco de la ciudad acompañado con alguien de la estatura de Vince.

—¿Ese es Tommy?—Preguntó Vince observando al cuervo asentir con la cabeza.

—¿Vamos?—Le preguntó al rubio quien asintió con una sonrisa.

Ya cuando estaban un poco más cerca del baterista, Nikki le dió un leve golpe en el hombro, haciendo que volteara junto con su acompañante.

—Oye, ¿qué demonios te...? ¿Nikki?—Le sonrió al cuervo mientras que rodeaba el cuello de su acompañante con su brazo, ignorando la incomodidad de éste.

—Hola de nuevo, viejo.—Saludó Nikki.—¿Quien es él?—Le preguntó a Tommy refiriéndose a el otro pelinegro.

—Oh, el es Mick Mars, un amigo que parece más bien mi mamá.—Rió por lo último al igual que los otros dos.

—Un gusto, Mick.—Dijo ahora Vince.

—Si, el gusto es todo tuyo.—Respondió de forma sarcástica para después sonreír un poco.

—Te quería proponer algo, Tommy.—habló de nuevo el bajista.

—¿Qué sucede, amigo?

—Como tengo dos recámaras de sobra en mi departamento.... ¿que les parece si se vienen a vivir con nosotros?—Dijo Nikki con una sonrisa, agarrando a Vince de un poco más arriba de la cintura.

—Lo que diga Tommy.—Habló Mick.

—¿Por que  no, viejo? Es una buena idea—Aceptó el más alto de los cuatro.

—Entonces los espero mañana a la hora que quieran en mi departamento.—Sonrió de oreja a oreja junto con el rubio.—Nos vemos, Tommy, nos vemos, Mick.—Se despidió para después dar media vuelta e irse con Vince.

—¿Estas seguro de lo que estás haciendo?—Preguntó Vince inseguro.—Digo, no conozco bien a Tommy y mucho menos a Mick pero Tommy parece ser algo desastroso.—Miró a Nikki y éste le sonrió con dulzura.

—Tranquilo, sé lo que hago, Vinnie.—Le revolvió el cabello a Vince y siguieron con su camino.