La Verdad

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Marcela intenta respirar profundo, ahora se arrepiente de haber dicho si quiera que quería hablar con Betty, debió haber firmado e irse, escucha conversaciones en la sala de juntas y Betty está frente a ella expectante

-Doña Marcela, por favor -Usted no quiere oír nada de lo que quiero decirle, Beatriz

-Se equivoca, Doña Marcela, ahora más que nunca quiero escucharla, necesito escucharla

Marcela no sabe por donde empezar y su voz se quiebra -Yo lamento profundamente todo esto, no debí decir nada... yo lo único que quiero es irme de acá y lamento no haber sido 100% sincera con usted, yo... de ninguna manera quiero meterme en su vida, ni en la vida de Armando... pero él se sigue metiendo en la mía y me cansé... estoy harta de tener que ser yo siempre la que sacrifica todo, estoy harta de tener que tragarme mis palabras, mis sentimientos, yo ya no quiero ser la que salva a Armando... porque sencillamente él no se lo merece, nunca mereció mi comprensión ni mi sacrificio, nunca mereció el hecho de que yo le contara a usted la verdad... él no se merece nada

Beatriz la observa con tristeza, se levanta y le da la espalda a Marcela, las voces en la sala de junta se hacen cada vez menos entendibles

-Armando me ha estado engañando? -finalmente dice Betty a punto de llorar

-Beatriz, yo no necesito confirmarle eso... porque usted ya lo sabe, usted lo presiente y ese instinto nunca falla

Beatriz voltea a ver a Marcela... esta vez con cara de furia -Usted no ha podido superarlo, y solo quiere venir acá a llenarme la cabeza de ideas, usted nunca soportó que Armando se enamorara de mi

-A ver Beatriz... quién fue la que me citó en privado para hablar de Armando? acaso fui yo? yo sólo vine acá a despedirme definitivamente de esta empresa, jamás mi intención ha sido vengarme o tratar de destruir su relación... tarde o temprano el mismo Armando lo hará y usted lo sabe perfectamente... yo ya no siento nada por Armando... yo decidí dejar ir a Armando el día que le conté toda la verdad a usted... si yo le pedí hoy que conversáramos es porque todavía queda en mi algo de solidaridad femenina

Betty se quedó callada, ambas se miraron por unos segundos... finalmente Beatriz habló

-Usted tiene pruebas? usted lo vio a él en algo raro? dígame

-Usted sabe donde estuvo Armando anoche? -en casa de sus papás

-hmmm... sí... él fue a casa de sus papás... la misma Margarita me lo confirmó esta mañana cuando fue a mi apartamento a pedirme que me quedara callada... sabe usted donde estuvo él antes de eso? está segura que al salir de la casa de ustedes él se fue directamente donde Roberto y Margarita?

-Por qué no se deja de tantos rodeos y me cuenta que es lo que sabe... para eso estamos acá no? -La interrumpe Betty con voz amenazadora

-Armando fue a mi apartamento anoche... fue a gritarme que los dejara en paz, que me fuera... y creame que eso me sorprendió muchísimo... porque el día anterior él me pidió que conversáramos... salimos en su carro... me juró que usted sabía que él estaba conmigo... luego intentó besarme

-Eso no puede ser verdad -Por qué no se lo pregunta usted misma? -Marcela señala puerta de la sala de juntas -Pregúntele a ver si es capaz de negarlo en mi cara

Betty no se movió y eso le dio pie a Marcela para continuar -Luego... me soltó un discurso de que yo le estaba afectando y logró lo que no había podido hacer el día anterior... besarme

La cara de Betty se transformó... una mezcla de ira y desilusión -Yo no le voy a negar que le respondí el beso... pero yo jamás sería amante de ningún hombre casado y a parte reaccioné y me di cuenta de a quien estaba besando... y traté de detenerlo pero él no cedía... intentó forzarme... tuve que darle un cachetada para quitarmelo de encima... Beatriz, usted no tiene idea del daño que Armando me ha hecho a lo largo de mi vida... tuve que gritarle que se fuera y entre todo el trauma y la ira por haber intentado forzarme a pesar de que le grité que parara

Marcela comenzó a llorar de nuevo -Mire, Beatriz... a mi no me interesa lo que usted y Armando hagan a partir de ahora... yo solo quería contarle mi verdad... usted conoció a Armando, usted fue su celestina... usted fue testigo del daño que Armando me hizo y aún así... usted pensó que gracias al amor que él tenía por usted él podía cambiar... pero lamentablemente, los hombres como Armando son seres egoístas... que sólo les importa tomar y tomar y nunca dan nada... ellos te vuelven tóxica, enferma, te hacen repudiarte a ti misma porque te conviertes en algo que siempre juraste que jamás serías... la novia o esposa paranoica que necesita saber cada paso que él da para asegurarse que no está viendo la cara de idiota... pero ellos siempre se salen con la suya, una mirada, una mentira y caes rendida... un te amo y es suficiente para perdonar, olvidar y comenzar de nuevo... ese infierno yo me niego a vivirlo de nuevo...

Betty esta destrozada, lágrimas caen y ella no sabe que decir, Marcela se limpia sus lágrimas y coge sus cosas

-Usted verá que hacer... -Marcela está a punto de salir y Betty abre la puerta de la sala de juntas, Armando está sentado y los Mendoza y Calderon en una esquina y Daniel al fondo... Beatriz lo ve, Armando se levanta... Marcela observa la escena desde atrás

-Betty -susurra Armando -Betty se dirige a él con furia y le planta una cachetada super fuerte... Margarita y Roberto se exaltan y Daniel y Mario observan sin entender... Marcela se retira... Daniel sale detrás de ella

DespuésDonde viven las historias. Descúbrelo ahora