Esta historia comienza durante la edad media. Los hermosos castillos de cimiento de piedra donde vivían reyes y reinas. Guerras épicas y leyendas legendarias. El reino de Konoha era el más famoso de la región y la envidia deambulaba por todos lados. Muchos deseaban haber nacido en cuna de oro, no tener que pasar hambre y usar harapos de mala calidad. El rey Fugaku y la reina Mikoto tenían dos hijos. Los futuros gobernantes del reino y un mar de jovencitas que suspiraban de amor por el dúo.
Itachi Uchiha el mayor de los hermanos, estaba pronto a casarse con la princesa del reino vecino. Una matrimonio arreglado por sus padres. Si bien el amor no existía de por medio, el joven príncipe estaba dispuesto a aceptar la condición impuesta por su padre. Después de todo, él también pasó por lo mismo y terminó amando a su madre. Tal vez con el tiempo, él llegaría a querer a Konan. Lo que tanto deseaba su progenitor, era tener nietos antes de morir y quedar tranquilo de que sus hijos seguirían con la tradición.
Sasuke Uchiha de dieciocho el menor tenía constantes discusiones con su padre. A diferencia de su hermano Itachi, él tenía una personalidad fuerte y nada paciente. No estaba dispuesto a casarse con una desconocida, tampoco se sentía listo para convivir con una persona en su lecho y traer críos al mundo. Era demasiada responsabilidad. Le gustaba ser libre. Lo que su padre no sabía es que tenía una extraña obsesión con uno de los criados de la casa.
Su sed insaciable de puro sexo por el joven plebeyo que vivía desde niño bajo su mismo techo. Naruto había llegado con su madre a pedir trabajo. Su madre fue la cocinera mientras él ayudaba con la limpieza. A muy corta edad supo que su vida sería miserable, pero mientras estuviera con ella nada lo deprimiría. Hasta que llegó algo desgarrador a su vida. Su madre murió. Una extraña enfermedad acabó con su luz. Tenía trece cuando quedó desprotegido y solo. La reina sintió compasión por el pequeño y convenció a su esposo de no echarlo a cambio de que siguiera ocupándose de sus labores originales junto con el jardín que ella tanto amaba.
Fue entonces que en ese tiempo el príncipe Sasuke de quince años comenzó a acecharlo desde las sombras. Sus ojos no podían despegarse de ese hermoso ser que lograba cautivarlo fácilmente. Naruto no enterado seguía con su trabajo orgulloso. Transcurrió un año más y el príncipe sorprendió con la guardia baja a Naruto en su propia habitación que no era para nada lujosa. Poco le importó ese hecho a Sasuke, esa noche violó al bello rubio de ojos azules que tenía tan solo catorce años de edad. Miedo por el azabache de ojos carbón guardó silencio ante sus desagradables amenazas, lo hizo por años.
Las violaciones continuaron, pero ya no eran consideradas como tal. Naruto no oponía resistencia y Sasuke era más gentil que las veces anteriores. Y ahora con dieciséis años de edad... los acontecimientos continuaban igual.
—¡Naruto!
—¡Ah! ¡Ah!
Sasuke penetraba rápido y duro el interior del blondo deleitándose con el calor que cobijaba su enorme miembro a punto de estallar entre las piernas del menor. Se encontraban en la habitación del príncipe, entre aquellas finísimas sabanas que solo la nobleza podía adquirir de vivaces colores como el rojo fuego. La cama acompañaba a la pareja con los potentes movimientos pélvicos del mayor que besaba sin darle tiempo al otro de recuperar oxígeno. Las lenguas se enredaban y ocasionaban un delicioso sonido húmedo junto con el obsceno de los testículos chocar fieramente los glúteos del criado.
—¡Eres tan exquisito! ¡Tu cuerpo es una droga para mí!
—¡Ah! ¡Príncipe Sasuke...!
Lo quisiera o no ya era parte del juego del Uchiha. Él disfrutaba y al mismo tiempo se tenía asco, porque era humillado y usado como un juguete sexual. Debía aceptar ese destino, un plebeyo como él debía estar agradecido de ser "el juguete favorito del príncipe" ¿pero qué ocurriría más adelante? ¿Qué pasaría cuando Sasuke se casara con una princesa? ¿Le dejaría en paz o seguiría torturándolo? Quería escapar. Su sueño era huir del castillo, cruzar la puerta, el foso, el puente levadizo e ir al pueblo más cercano.
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Obsesión
RomanceEl príncipe Sasuke se acuesta con el criado de la casa. No puede dejarlo un minuto en paz, no parece ser amor y Naruto sufre por ello. Desesperadamente haya la forma de huir del castillo cuando se acercan los preparativos para la boda de Itachi, el...