SOBRE LAS ALAS DE UN COLIBRI

El amor: un don doloroso

Asi duele el amor madre, duele como una cuchillada en el estómago, como la destrucción de tu mundo ideal emocional, como la traición de tu primer amor, como la ausencia de lo más querido, como la ruptura o la separación de los padres; así duele el amor, madre, como esas agujas que te hincan por todo el cuerpo (en los pulmones)que muchas veces no te dejan respirar; como una pulmonía, como cuando se te mete el agua a los pulmones que cuando aspiras te hinca y si expiras te hinca; así, con ese dolor se va el amor de tu cuerpo, y cuando eso sucede el corazon se que hueco, vacío, sin ser, sin nada, sin vida, sin uso, sin importancia... 

En una ciudad donde la necesidad es un lujo no hay tiempo para perderlo en historias sentimentales, me dijiste.                                                                                                                                              La vida tiene que pasar como pasa el tiempo y nosotros los necesitados tenemos que contentarnos con lo poco que te escupe la desgracia o la compasión. Pero no podemos estar metiendonos en estrabismos, ni en suposiciones irreales, las posibilidades son unicas cuando se trata de los pobres y el saldo posterior es lo que tenemos, es lo que todo mundo ya sabe: hombres crecidos a fuerza de pura casualidad. Yo, me pregunto madre, como somos los seres humanos casuales, (de pura casualidad) no tenemos causa y nuestro efecto es una ventilada de silencios y oscuridades, una fila de banco donde nose vende ni se cobra nada, una farmacia que no controla ni un catarro y ni el reflujo de un pulmon enfermo...eso somos; al final, seres enfermos y desgraciados por la desdicha del Espiritu Santo, Amen.