Por segunda vez en muchos meses, Lena hizo un repentino cambio de planes y dio la vuelta cuando iba al aeropuerto.
No tenía opción, Kara estaba muy enfadada. De hecho, parecía histérica. Además del manotazo, algo de lo que jamás la habría imaginado capaz, le había gritado delante de un montón de gente. Era como si le hubiesen hecho un trasplante de personalidad. Sin embargo, ella sabía que era una persona amable, buena y cariñosa, incapaz de enfadarse.
Claramente, Mike Mathews era responsable de esos cambios. Él había destruido su tranquilidad, confundiéndola por completo. Por supuesto que Mike era el padre de ese niño. Pero, evidentemente, Kara no quería que Mike hiciera ese papel. Era obvio para Lena que el niñato había salido corriendo al conocer la noticia, dejándola en la estacada.
Pero, ¿qué le importaba?, se preguntó. ¿Por qué quería involucrarse? Kara tenía un problema y había acudido a ella a pedirle ayuda. ¿Por qué no le demostraba que ella era mejor que Mathews cuando las cosas iban mal?
De vuelta en el apartamento de Alex, Kara estaba metiendo ropa en una bolsa de viaje.
—¿Seguro que puedo irme a la casa de campo?
—Claro que sí. Mi madre está en Jersey y mi tía, la madre de Mike, se ha vuelto demasiado estirada como para ir al campo. Al menos, podrás airearla un poco —sonrió Alex— Pero, ¿seguro que es buena idea que te vayas de Londres ahora, sola?
—Necesito un poco de paz. Tengo que pensar en muchas cosas.
—No sobre lo que vas a hacer con el niño, eso ya lo sé. Te encantan los niños. Pero tengo la impresión de que huyes de algo...
Kara levantó la cabeza, con los ojos con una expresión desafiante.
—Sólo estaré fuera un par de días. Y no estoy huyendo de nada. Es que no quiero ver a Lena.
—No tienes por qué verla —la interrumpió Alex — Supongo que no se ha apuntado al concurso de madre del año, ¿no?
—Cree que el padre del niño es Mike —suspiró Kara.
—¿Qué? ¿No le has contado que estás de cinco meses?
—No, no me apetecía quedarme para charlar con ella —replicó — Ah, por cierto, también me acusó de intentar cargarle con el niño porque Mike no quería saber nada.
Su amiga hizo una mueca de asco.
—Menuda imbécil.
Kara se pasó una mano por el pelo.
—He intentado entenderla, intenté incluso disculparla por haber creído a su hermana antes que a mí. He intentado ser justa con ella porque es lo que hago con todo el mundo, pero se acabó —le confesó, cabreada— Ya está bien. Pensé que Lena tenía derecho a saber que iba a tener un hijo, pero ahora desearía no haberle contado nada.
—Tengo que decirte algo...—dijo Alex— Le he contado a Mike lo del niño. Ya, ya lo sé, no es asunto mío. Desgraciadamente, se me escapó.
Kara estaba segura de que Alex se lo había contado a propósito. Quizá no debería, pero no tenía la menor duda de que lo había hecho con la mejor intención.
Además, casi se alegraba de no tener que ser ella quien le diese la noticia. Contárselo a Lena había sido más que suficiente. Pero, como llevaba tres semanas saliendo con Mike, él tenía derecho a saberlo, naturalmente.
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Made Of Stone
RomanceLena Luthor nunca había estado con una mujer más de tres meses... hasta que Kara Danvers apareció en su vida. El tiempo sigue pasando, pero Lena es reacia a formalizar su relación. Kara, cansada de buscar "más", decide que debe olvidar a su primer a...