Capítulo Único

185 26 29
                                    

Éste pequeño One Shot es para  Ann Xavier Eisenhardt.
Espero te guste, lo hice con mucho aprecio ♡

Raven no dejaba de toquetear el traje de Charles, limpiando las pelusas del traje y tratando de camuflar cualquier arruga

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Raven no dejaba de toquetear el traje de Charles, limpiando las pelusas del traje y tratando de camuflar cualquier arruga.

-Hermana, estás demasiado nerviosa, ni siquiera eres tú la que se casa.
-Lo sé, Charles. -lo mira fijamente- Pero si tu no te vas a ansioso yo lo haré por ti.

Nuevamente, comenzó a arreglar cualquier imperfección que pudiera ver.

-¿Cómo no voy a estar ansioso? -la mirada del telépata relució con indignación- Estoy en ayunas y aún así tengo el estómago revuelto. -se lleva las manos al rostro- No he visto a Erik en una semana, ¡una semana! por el Kabalat panim judío. Y temo olvidarme de todo el protocolo de boda, aunque ni siquiera sea 100 por ciento judía.

Raven se alejó unos pasos, viendo como quedaba el traje, luego levantó su mirada y posó sus manos en los hombros del contrario.

-Todo va a salir bien, hermanito. Luces fantástico y te prometo que no te vas a olvidar de nada porque estaré pensando en cada uno de los pasos para que lo leas de mi mente.

Los ojos del telépata brillaron con diversión y alegría.

-Confío en ti, Raven, no me dejes en ridículo.

En ese momento entró Hank a la habitación.

-Luces bien Charles, ya va a ser hora de ir. ¿Estás listo?

El mencionado asintió ligeramente con la cabeza, temiendo despeinar su cabello.

-Entonces, vamos.

Azazel reía al ver el rostro pálido de Erik

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Azazel reía al ver el rostro pálido de Erik.

-¿No te estarás arrepintiendo, verdad?
-Jamás. -la voz del judío sonó solemne- Jamás me arrepentiría de casarme con Charles.
-Woah, sentí toda tu determinación. -dijo Alex, mientras se arreglaba las mangas de la camisa- Es bueno, demuestra que lo amas.

El alemán suspiró tratando de relajarse.

-Claro que lo amo. ¿Cómo podría no hacerlo? -se acomoda el bléiser- Solo que temo olvidar algo o hacer mal algo, sabes que la ceremonia no es completamente judía y eso lo complica más.

Więzi MałżeńskieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora