Continuación

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Entre tanto Benítez y su cuadrilla a sacadole punta a su estupidez.

- Si esta es la Dama de Elche mi madre es la Dama de Alora que es de donde ella es natural - gritaba Benitez.

Y Herrraiz esa sepia que rezumaba tinta por todos sus poros el mayor explotador de boligrafos que he conocido en mi vida riendo las gracias con su risa de hiena:

- ji ji ji Benitez. Vaya callo malayo la Dama de Elche. He oído decir que en realidad es un tío un travelo vamos.

Hasta que llego la hora de visitar la sala de arte egipcio donde me correspondía a mi asumir de nuevo todo el protagonismo. Todavía hoy me pregunto como ocurrieron los hechos cual fue su secuencia. Recuerdo que nos colocamos en torno a la urna que guardaba el sarcofago con la momia de Sothis y que yo acababa de leer en voz alta la traduccion de una de las inscripciones talladas en la piedra una que había junto a un gran ojo cuando de pronto el museo se quedo a oscuras. ¿ Recuerda lo que decía aquella inscripción? << El espiritu de mi amado Serdna vagara hasta que su mirada me traspase como un rayo. Entonces nos levantaremos yo y el velo que cubre su memoria para vivir la vida que nos fue arrebatada. Mas tarde nuestro amado hijo el pequeño Serdna se reunira con nosotros. Hasta que esto se cumpla moren vuestras almas alli donde sea necesario. Pueda mi alma ver mi cuerpo y descansar sobre mi momia y que nunca parezca ni se aleje del cuerpo para siempre>>.

Apenas puede volver abrir la boca porque una vez que se produjo el apagon caisteis sobre mi como se lanzan los leones hambrientos sobre la cebra de nuevo me converti en objeto de vuestras iras.

- Ya estas otra vez con el numerito Patarroyo. Eres un pelmazo. Te pasas la vida provocando apagones y vas a acabar aburriendo al personal me dijo Pesarradona.

¿ Acaso le tienes mania a la luz electrica Patarroyo? - grito Ramorez.
Y asi hasta que vuestras voces se convirtieron en una jauria. ¡ Cianta razon tenias! ¡ Yo era el culpable de todo aquello! Claro que aun no lo sabias.

Menos claro tengo lo que ocurrio a continuacion. Creo que oimos como estallo la urna en mil pedazos una explocion que por su virulencia nos lanzo a todos contra el suelo. Y asi estabamos cuando volvio la luz besabamos el frio suelo de la sala por temor a que aquella fuerza incontenible que se habia desatado en el sarcofago de Sothis nos arrastrara con ella por temor a que nos fulminara. Luego todo se volvio frío. El aliento de la sala la mirada de cada uno de nosotros el corazon de don Panfilo que estuvo a punto de pararse para siempre las preguntas de la palicia... <<¿ vieron algo?¿ Fue un robo? ¿ Una broma de muchachos? ¿ Un número de magia?>> preguntaban una y otra vez. ¡ Qué poca imaginación tiene a veces la policía! Estuvimos cuatro o cinco horas soportando preguntas y luego lo recuerdo perfectamente cuando por fin nos dejaron salir del museo alli estaban las camaras de television y Benitez para hablar con ellas con su desparpajo de muchachote bruto y sano con su pecho ralo que enseño almundo entero para mostrar la magulladura que segun el le habia producido una pisada del ladron en su precipitada huida. Lo cierto es que no pudo caer aquella pisada en mejor fanfarron. Supongo que pasaria el verano sin camisa a la espera de que alguien incluso un mosquito le preguntara:

- Muchacho ¿ Y esa magulladura de ahí?

Entonces el respondería:
- Se trata de una herida de guerra. Soy el heroe de la batalla del Museo Arqueologico Nacional donde fue robada la momia de Sothis.

Pero creo que estoy divagando a costa del pobre Benitez. Despues de todo su fanfarroneria no era tan

La momia que me amóDonde viven las historias. Descúbrelo ahora