Joaquin estaba acostado en su cama, no tenía ninguna intención de levantarse y prepararse para ir al instituto, hoy era el comienzo del nuevo año y no estaba para nada entusiasmado con la idea, y es que para que emocionarse sí le esperaba lo mismo de todos los años, nuevos Alfas por aquí, nuevos omegas por allá y nuevos betas ajenos a toda la situación.
Los años pasados solía emocionarse pues un nuevo año era igual a nuevos Alfas, pero con con el paso del tiempo esto cambió pues los Alfas parecían pasar olímpicamente de él, no es que no le hablarán, no, es sólo que parecía que nadie estaba interesado en él de forma romántica, y no es como si los culpara.
Joaquin era un omega, claro que no tenía todos las actitudes de un omega, en la sociedad los omegas eran conocidos por ser sumisos, tranquilos y ordenados incluso miedosos.
Él no era nada de eso, no era un chico sumiso, no tenía por que hacer lo que cualquiera le ordenara, lo haría sí, pero sólo cuando encontrara a su alfa, ¿tranquilo? No claro que no era tranquilo y es que era Joaquin Bondoni el único omega hiperactivo de la historia, ordenado mucho menos, faltaba sólo ver su curto para saberlo, miedoso ni en broma el solía hablar con cualquier persona sin importarle sí era un alfa o un omega él no se dejaba intimidar por cualquiera.
Él no tenía la actitud de un omega, en cuanto apariencia era otra historia, era un omega precioso, nadie podía negarlo, un poco alto más no lo suficiente, la piel blanca adornada por varios lunares que le daban un toque adorable, cabello castaño brilloso y suave, unos hermosos y grandes ojos color whisky, una linda nariz respingona y para rematar uno labios suaves y rosas, sí sin duda un omega hermoso, por eso no entendía por que ningún alfa lo había cortejado aún, claro que apostaba a que era por su actitud, pues incluso su esencia era deliciosa, era una mezcla de chocolate y menta, era dulce pero no empalagoso, sin duda delicioso, pero a nadie parecía importarle, tal vez también tenía mucho que ver el hecho de que era el hijo del shérif, con lo cual muchos Alfas, incluso betas, mantenían las distancias con el.
Cuando se dio cuenta de que definitivamente llegaría tarde por fin se levantó y fue directo al baño para darse una ducha, al salir se vistió con lo primero que encontró, bajó, desayuno sólo un tazón de cereal, después salió corriendo y se montó a su jeep para después salir rumbo a la escuela.
Al llegar se encontró lo mismo de siempre, alumnos nuevos por aquí alumnos nuevos allá, Alfas acosando a algunos omegas y omegas caminando de la mano con sus Alfas, alguno que otro beta por ahí, sí exactamente lo mismo de siempre.
Caminó a su taquilla para acomodar sus cosas, sintió a alguien abrazarlo por la espalda, sabía de quién eran esos pequeños y delgados brazos, se giró para abrazar a su mejor amigo, su único amigo.
Diego, un pequeño omega, el mejor amigo de Stiles, el chico era un omega muy lindo, Rubio con ojos azules, un poco pequeño pero perfecto tratándose de un omega, el chico era el único que siempre estaba ahí para El, lo apoyo durante la enfermedad de su madre y posteriormente su muerte, el Rubio siempre estuvo ahí para él, pero el Rubio a diferencia de Joaquin, sí que era un omega muy codiciado claro que nadie trataba nada con él, pues el pequeño Rubio era cortejado por scott, un alfa, era buen tipo y a joaco le agradaba por que trataba bien a diego, no como harían otros Alfas, y a pesar de ser una persona amable y agradable era un alfa muy fuerte, puede que no lo pareciera pero se decía que su voz alfa era algo de lo que temer, sabía que estaba en la manada marcos.
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Buscando el amor (Emiliaco, omegaverse)
Loup-garouEmilio sabía que le hacía falta algo, su otra mitad, pero nunca imagino que su pareja sería un chico como Joaquin bondoni. Joaquin por otro lado siempre pensó que jamás encontraría a su pareja y que sí lo hacía este lo rechazaría como el resto de lo...