Metamorfo

633 66 2
                                    

Cuando la nave llegó al cuadrante; habían pasado dos días desde que Spock se transfirió de turno y aunque intentaba, no estaba llevando muy bien la situación; además McCoy no podía encontrar lo que causaba sus malestares, esto produjo que tuviera que someterse a realizar más pruebas, aunque esto no le resulto nada agradable a Jim, accedió a hacerlo.

A pesar de todos sus esfuerzos McCoy no había podido encontrar la causa de los malestares de Jim, sin embargo, las pruebas que realizó a profundidad mostraban pequeñas alteraciones en el sistema hormonal del capitán y aunque al principio esto no parecía relevante, llegó a sospechar que todos los síntomas eran provocados por estos cambios. Así que decidió enfocar todo su esfuerzo en entender que estaba desencadenando estas alteraciones.

Pero mientras Bones trataba de entender lo que sucedía con Jim, este debía enfocarse en cumplir con toda la burocracia propia del cargo que desempeñaba, aunque esto era algo que no le agradaba del todo, Jim lo tomó con una salida para evitar enfocarse en sus problemas personales.

—La reunión con el grupo asignado será esta noche, capitán ¿Quisiera saber en dónde desea que se realice? —pronuncio Carl quién era el remplazo de Spock, Jim separo los ojos de su PADD y asintió.

—La reunión se llevará a cabo en la sala cinco —declaró Jim—, informa a todos los integrantes.

El comandante Carl asintió, Jim se puso de pie y dejó el puente. Ya no quería estar en ese sitio y sobre todo necesitaba hablar con alguien. Así que fue con la única persona en quien podía confiar.

—Dime que encontraste algo —comentó esperanzadoramente Jim mientras entraba en la oficina de su McCoy.

—Tengo una idea de lo que puedes tener, pero no estoy seguro de ello —respondió el médico.

Jim ocupó la silla frente a su amigo.

—¿De qué se trata? —dijo Jim cruzándose de brazos.

—Para empezar, puedo decir con seguridad que los médicos que te atendieron cuando estabas pequeño eran unos idiotas. Habiendo aclarado eso, debo decirte que toda tu vida te mintieron.

Jim alzó la ceja y suspiró con evidente confusión.

—Esta conversación está siendo demasiado unilateral, Bones. Siento que tiene que ver con mi condición, pero no entiendo por qué dijeron que eso no sería un problema nunca.

—¿Acaso no acabo de decir que tus médicos eran unos idiotas? mira Jim, sé que tu diagnostico dice una cosa, pero me tocó realizar todos los exámenes de nuevo y no tienes una falla genética como te dijeron, aunque a simple vista lo parece.

Jim miró con curiosidad a McCoy, recordaba que toda su infancia la pasó en hospitales debido a su "extraña condición", eso le causó muchos problemas con su madre y provocó que pasara por muchas clínicas, esa era una de las razones por la cual lo odiaba las pruebas médicas. Su madre estaba decidida a corregir su condición para que fuera un omega normal, pero se olvidó de apoyar aquello que realmente era.

Él nunca le reclamó eso, sabía que estaba buscando la forma de que fuera igual a los de su casta, pero fue doloroso para él ver cómo su madre sufría porque su condición era "extrañamente única" y no tenía solución. A pesar de que entendía el proceder de su madre, le hubiese gustado un poco más de apoyo en esa etapa de su vida.

—Jim. —McCoy le entregó un PADD con información—, tú genética como omega era diferente, pero no porque estuviera fallando como te hicieron creer, tienes una pequeña anomalía y se relaciona directamente con la razón por la cual no manifiestas aroma. Pero no se debe a que te falte ese gen, más bien este debe responder a un estímulo más profundo.

Lazo ProfundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora