He marched far beyond my reach

III

Dos meses habían pasado desde que Louis dejo aquella casa, aquella que creía su hogar, recordaba muy bien su llegada a París la "Ciudad del amor" se dirigió a casa de Zayn y Liam su dos grandes amigos, que al saber lo que planeaba su amigo no dudaron en darle asilo, le era un poco difícil a Louis transportarse con sus pequeños y las maletas, aun más con su abdomen hinchado por el embarazo.

El transcurso no había sido muy tardado, sus pequeños miraban a todos lados curiosos.
Ellos aún tenían la esperanza de que verían a Harry, Louis aún no había tenido las palabras exactas para decirles que el y su papá Harry ya no estarían juntos.

Liam le había dicho que no se preocupara por el dinero, pues Louis aún no podría trabajar hasta que diera a luz.
Mientras tanto Leonard y Darcy se llevaban bien con la pequeña Sophia de tan solo 4 años, era la viva imagen de Zayn con sus pequeños ojos color avellana y sus enormes pestañas, su cabello lacio y castaño como Liam.
Louis trataba de ayudar con lo que podía en la casa, pues no le gustaría ser un arrimado, pero varias veces había recibido regaños por parte de la pareja diciéndole que lo mejor seria que mantuviera reposo.

Las cosas para Harry no cambiaron mucho, seguía viéndose con Jacob, tal parecía que este último empezaba a mudarse poco a poco a su casa, al principio esto le incómodo pues creía que Louis y sus pequeños volverían. Pero al pasar el primer mes supo que eso no pasaría, así que decidió rendirse, olvidarlos.
Continuar con su vida, conseguir felicidad, o al menos eso es lo que él pensaba.

El tiempo pasaba deprisa, Louis ya tenía ocho meses, y faltaba una semana para que los mellizos cumplieran ocho años, Zayn y Liam lo traban muy bien, sin duda no se equivoco con sus amigos, y gracias a ellos conoció a los Mendes, un lindo matrimonio de 6 años, Shawn y Niall esperaban a un bebé también, Niall tan solo tenía dos meses de embarazo, ellos estaban tan alegres.

Todo estaba saliendo bien, tal y como Louis lo quería, no negaba que habían noches en las que Louis no dormía bien, los primeros meses el castaño lloraba hasta quedarse dormido, aún no entendía como una relación de nueve años había terminado así, sin más.

¿Como es que Harry había dejado de amarlo?
¿Como es que había preferido a alguien más joven?

Esas y muchas más eran las preguntas que no lo dejaban dormir.
Trataba de no decaer enfrente de sus pequeños ni de sus amigos pero, como podía no hacerlo si había perdido al amor de su vida.
Sus hijos eran muy listos y escuchaban a su padre llorar, así que dejaron de hacerle preguntas, algún día tendrían las respuestas, pero para esto tendrían que esperar a que ya no le doliera tanto a su padre.

El día que sus pequeños tanto esperaban había llegado, se levantó más temprano de lo usual y bajo a adornar el pastel que había horneado el día anterior en casa de su rubio amigo una ves termino de decorarlo subió al cuarto de sus peques y comenzó a cantarles para que despertaran, estos con demasiada emoción no tardaron mucho en hacerlo, y abrazaron a su papi, quien siempre hacia lo posible por verlos sonreír, a los pocos minutos entraron Liam y Zayn quien cargaba a la aún adormilada Sophia para felicitar a los mellizos. La pequeña Darcy ya limpiaba algunas gotas saladas que salían de sus ojos mientras Leonard la abrazaba, nadie mentiría al decir que era demasiado sensible al igual que Louis.
Bajaron todos a la cocina y desayunaron el pastel que Lou había hecho, minutos después se escucharon unos toques en la puerta por lo que Liam salió a abrir recibiendo a Shawn y Niall, que llevaban varios regalos con ellos, al verlos los niños se entusiasmaron demasiado y comenzaron a brincar alrededor de ellos. Lou no hacia otra cosa que mirar a sus hijos mientras les dedicatoria una mirada de agradecimiento a los Mendes, él día estuvo resumido en los mellizos jugando con Sophia y sus nuevos juguetes. Mientras que los mayores se encontraban en la sala bebiendo té y hablando de trivialidades.