TÓXICA

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Vivía bajo su sombra, al sonido de su voz mi corazón y mente lo obediencia, al escuchar el chasquido de sus dedos corría hacia él, arrodillada ante él.
Mi opinión no era valía si él no la pedía, tenía que resguarda mis ganas de vestirme con aquel vestido floriado corto que tanto amaba, pero él lo odiaba, poco a poco fui dejando el maquillaje en aquel cajón, con lavarme la cara era suficiente, las tardes de alegría fueron disminuyendo cada vez más. Pasaba tanto tiempo sentada en aquel sofá, esperando a horas de la madrugada para verlo llegar, lo veía entrar por aquella puerta ebrio, gritando mi nombre  a aoto volumen que mi cuerpo se estremecia, rápidamente corría hacia él para ayudarle a llevarlo a la cama, entonces hasta ese momento podía dormir.
El desayuno debía estar a las 7:30am servido sobre la mesa, para que él no se molestará antes de irse al trabajo, deje de  visitar a mi madre para que su cena estuviera al mejor horario, me límite a salir por un café, una reuniom con amigos, pp5rque cada que iba era motivo para discutir con él, quería verlo feliz y sólo podía hacer feliz con lo que él me dijera....
Era tanto aquel amor que incluso habría  muerto o asesinado por verlo feliz.

Aún recuerdo la noche de aquel abril, íbamos de camino a aquella cena de trabajo, pero mi vestido era demasiado "destapado e indecente", sus socios iban a señalarlo por mi, así que después de aquel golpe deci quedarme a dormir...

Escuchaba decir a todas las personas a mi alrededor:
¡sal de allí!
Él no te quiere, no te ama, no te cuida, te lastima cada vez que puede
¿Acaso no te das cuenta? Es una persona tóxica y esta envenenando tu alma.
¡Un dia de estos quizás y hasta te mata!...

No sabia como salir de él ¿cómo hacerlo? Creo que se habia hecho rutina, el amor enfermo que me tenia, el amor enfermo que le tenia.
Me quería tan poco que veía el amor de esa manera.
Quizás la tóxica era yo, pues no sabía decir adiós, pensando que era feliz.

Años atrás no podía dejar de sonreír. El día de nuestra boda fue el más feliz, me había sacado la lotería con aquel hombre que elegí.

En el transcurso de los años, cada dia era un poco mas monótono, quizas había sido mi culpa, pensando que con el tiempo sería feliz...
Y hoy estamos aquí, Él tras las rejas esperando su sentencia y yo, en un hospital tratando de sobrevivir.

Pensamiento AdolescenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora