Nunca fui alguien realmente estable, mis emociones me traicionaban, cada vez que tenía algo a mi alcance dudaba hasta que decidía dejarlo ir, nunca fui alguien estable en la vida de las personas, en descuidos, o en la oscuridad que no notaran mi ausencia o presencia, optaba por irme. Siempre fue así.
No esperes mucho de mí, ni de mi estabilidad en algún lugar o en la vida de alguien, porque suelo irme cuando menos lo esperes, no sé dónde será mi próxima parada, ni quiero saberlo, no tengo fecha ni hora para volver, el tiempo no es algo u alguien a mi favor, suelo olvidar las fechas, los meses y hasta los días importantes en mi vida, no tengo un manual de instrucciones ni un recordatorio.
Nunca fui amante de quedarme en un solo lugar por tanto tiempo, mis crisis emocionales me desesperaban.
No fui ni soy una persona de guardar los recuerdos de un momento, los abrazos, los besos, las miradas, pues el corazón y mi autodefensa van borrando una a una para cuando llegue el día de la despedida no duela tanto, no hieran tanto y que la miseria de la soledad me invada haciéndome sensible y frágil ante el adiós.
No soy alguien estable.
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Pensamiento Adolescente
PoetryCosas que he querido decir, pero siempre me las guardo para mí..
