En un día de canasta, de mi trabajo, hay que buscarlo, hacer misiones, talvez sean de entrega, de vigía, de escolta, misiones aburridas solo para pasar el rato, hasta que anochezca. En una de esas misiones, escuche de una chica, un tanto especial, era de la alta sociedad, una adinerada, que estaba enferma, no solo de un veneno mortal que era incurable, sino también de estar acostada en cama, hasta esperar su inminente muerte, así que pidió a la Asociación a la cual yo trabajo, para ver quien la llevaba a una aventura final, para tener una experiencia feliz antes de irse para siempre... El problema de eso es que a esta niña nada le impresionaba, había vivido poco, pero igual esperaba grandes cosas de las aventuras, y por eso, nadie quería llevársela consigo por miedo a decepcionarla. Después de unas horas transcurridas la media tarde, mi jefe administrador, me dio la asombrosa tarea de tenerla en manos, cuidarla, viajar con ella.
Inmediatamente me había negado a hacerlo porque mi vida era demasiada aburrida, pero era el único que quedaba en la Asociación disponible, y no había más misiones que fueran aceptables para mi rango. Al caer la noche fui a mi cabaña, me acosté en mi cama de paja, y pensé en cómo iba a impresionar a alguien del tan alto clero.
En el calor de la mañana, desperté con el canto de los pájaros, preparándome para salir, note que alguien me esperaba en la puerta. A recibirla una chica de apariencia de 14-15 años, me sorprendí. Ella dijo:
- Déjame entrar en tu casa.
Y sin mi consentimiento, ella entro como si nada más en la vida pasara. A pesar de las múltiples preguntas que le hice, me ignoro como si no existiera. Cuando ella tomo aire, me explico por qué ella estaba en mi cama, pobremente hecha.
Explico por qué había venido a buscarme, que ya sabía de antemano, y me pidió una aventura llena de adrenalina, ella era la chica del alto clero, Su nombre era Aldara, y ella iba a ser mi nueva compañera de viajes.
Me negué rotundamente, yo siempre he trabajo solo, odio estar con otras personas, y soy muy malo confiando en estas mismas, talvez por traumas en el pasado, pero a nadie le importa.
Al intentar irme de ahí, ella se agarró de mí, y no me dejo caminar... Gracias a su insistencia, la acepte, pero con condiciones.
1.- Ella nunca iba a hacerse a mí, nunca de lo nunca jamanes, excepto si era una emergencia.
2.- Ella no me iba a hablar a menos que sea una emergencia.
Al alistar todo, Salí camino al bosque a intentar cazar comida, caminamos por todo los cedros, hasta que encontramos una cueva, que talvez parecía algo rara, pero que cosa no era rara en esta realidad? .- Yo le dije que era mejor que vayamos a investigar porque sería demasiado peligroso para los dos, pero como hablara con la pared, ella fue hacia la oscuridad.
