Me devolviste la vida {Nico Di' Angelo y ___________}

Capítulo 6 ~ ¿Por que no me dejan en paz?

Narra _________________

Hacía 2 días que Nico se había ido. Desperté temprano, me di una ducha y me vi los cortes que tenía, esto solo era un recordatorio, nunca estaría bien, por más que lo intentara no lo estaría, me vestí y como hoy hacía frío, me vendé las muñecas y encima de la camiseta holgada de mangas largas de color azabache, me puse la chaqueta de Nico y suspire, me arregle el cabello en una sencilla trenza, mis jeans eran oscuros y me puse unos converse, tome mi bolso y salí del apartamento, fui más despacio a la escuela, cuando entré, nadie dijo nada, lo cuál agradecí, mi mandíbula tenía un morado, el cual maquille, llegué a mi casillero, saque lo que si necesito y metí lo que no, por suerte no habían dejado tarea, fui a mi salón, que era la clase de Ética y Valores, no tenía que escribir mucho, lo que si es que cuando hacia examen, la profesora lo hacia de forma oral, me preguntaba y yo le contestaba, así que sacaba buena calificación en esa materia, entre y agradecí que no hubiera llegado nadie, mi asiento estaba enfrente, así que me senté, deje mi bolso a lado de mi lugar y me recosté sobre la mesa, cerré los ojos e imagine lo que haría Nico si estuviera aquí, de seguro ya me habría echo reír, me hubiera preguntado que es lo haríamos después de hacer los deberes, o me habría preguntado si ya desayune, o cualquier otra cosa, pero de algo estoy segura, el haría todo lo posible para sacarme una sonrisa, el salón se lleno y saque mi libreta, la profesora entro y dejo su portafolio en la mesa, ella era joven, tiene a lo máximo como 26 años, era muy buena persona, pero a veces se pasaban con ella, pero aun así era muy buena, era delgada, tez morena de ojos café y cabello corto, bonita y joven. Empezó a dar la clase, la escuche y anote lo que pude, terminó la clase y la que me tocaba era la de Matemáticas, fui a clase y después de eso, fui a la que seguía y a las demás, cuando compre mi almuerzo, llegue a la mesa en la que siempre me siento con Nico, mi charola solo tenía agua, uvas, plátano y una manzana junto a un mango, que era el mago, me comí el mango, poco a poco y me tome el agua, si Nico me hubiera visto, me habría echo comer más que unas simples frutas y no me dejaría levantarme hasta que comiera, tiré la basura y fui a mi casillero, saque los libros, me quite la chaqueta de Nico, ya que tomaría gimnasia y no queria estropear su chaqueta y la metí ahí, ya hiría por ella a la hora de la salida, me iba a ir a clase, cuando me tomaron de el cabello y me chocaron contra los casillero, eran ellas, Amelia, Kim y sus clones, ellas me veían con una sonrisita de suficiencia y me chocaron contra los casilleros.

-hola cerebrito, vengo por los apuntes de química, ética y sociales- dijo Amelia, le hizo una sena con la cabeza a Kim para que me quitara el bolso, trate de impedirlo, pero Amelia tomo mis muñecas y enterró sus uñas, me mordí el labio, ahogando el grito de dolor, deje escapar un pequeño aullido y cerré los ojos, sentí unas mano en mi cara

-abre los ojos estúpida- dijo ella, lo hice y la vi, ella tenia un brillo de locura en sus ojos, sonreía tan feo, que me dio miedo, temblé levemente y su sonrisa se ensanchó aún más. -eso, me gusta que sepas que soy superior a ti- susurro, por suerte la chaqueta de Nico estaba en el casillero. -y no veo a Di' Angelo desde ayer, ¿o que? ¿te dejo sola al igual que Solace? Nico y Will solo estaban contigo por lástima, la niña sin madre y sin atención en casa- dijo haciendo un puchero para luego reír, cuando Kim encontró lo que buscaba, aventó mi bolso a mis pies, patéandolo y sacaron todo, los cuadernos y los libros, desparramando el contenido en el pasillo, todos se alejaron y se fueron, esto ya era normal para ellos. Entre Kim y Amelia me tomaron del cabello y me aventaron contra los casilleros, haciendo que mi cara chocara y me saliera sangre, me sostuve como pude de los casilleros y alguien hizo que volteara a verla. Vi a Amelia y ella me veía con asco pero con cierta satisfacción.

-¿por que no me dejan en paz?- pregunte con algo de valor, ella aferró su agarre en mi cabello, tirándo de el hacia ella.

-por que... da la casualidad de que... ¡me das asco! ¡eres una maldita cerda! ¡y me molesta si quiera saber que existes! Ojalá y murieras, le harías un favor a el mundo, por eso no te dejo en paz, no te dejaré en paz hasta que mueras- dijo sonriendo como si viera lo más agradable del mundo, estrello mi cara por última vez contra el casillero, se fueron y como pude recogí mis cosas del suelo, fui al baño, me vi la nariz, no la tenía rota, así que me limpie la cara, cuando me vi al espejo, enfrente de mi no había más que una chica obesa, gorda y horrible, me di asco yo misma, corrí hacia el cubículo más cercano, cerré la puerta y me deje caer de rodillas, enfrente al inodoró, debía de bajar de peso, de aldelgazar, las palabras de Amelia, de la que una vez fue mi mejor amiga, rondaron por mi cabeza, junto con recuerdos de como me decían que era una gorda, sin pensarlo más, metí mis dedos hasta mi garganta, una arcada me vino nuevamente y vomité todo, lo que comí en el almuerzo, vomité hasta que salió todo, sentí el estómago vació, me levante y me limpie la boca, le jale al inodoro y salí del cubículo, me enjuague la boca y me lave las manos, me vi, tenia una limera capa de sudor, me sequé y salí del baño, me dirigí hacia gimnasia, le dije al profesor que estaba enferma, el me creyó y me dejo ir temprano a casa, no sin antes buscar mis cuadernos, los encontré y los llevé conmigo, tal vez me matarán, pero no les dejaría mis cuadernos a ellas, saqué la chaqueta de Nico y me la puse, fui a casa, entre al departamento y fui a mi habitación, hice los deberes y me acosté en la cama, con la chaqueta de Nico, me hice bolita y vi el peluche de perro.

-Nico, por favor regresa- susurre, no soportaba estar sola más tiempo, me quite loa converse y abracé el peluche contra mi pecho, cerrándo los ojos y dejando escapar las lágrimas, necesitaba a Nico ahora, las lágrimas recorrían húmedas y ardientes mis mejillas hasta llegar frías a la almohada, lloré toda la tarde, hasta que quedé dormida.

Narrador Omnisciente

___________________ se encontraba dormida, había llorado y estaba susurrando un nombre: Nico, ese chico al que ella quería demasiado.

Un chico pálido como la leche llego a su apartamento, saliendo de las sombras, le dijo a Chirón que encontró a la mestiza, el le dijo que todavía no era necesario que ella fuera al campamento, pero si que siguiera bajo su protección, pues no estaba segura, Chirón sabía quien era la madre de ella, pero no le quiso decir, así que Nico partió hacia su apartamento, estaba tan cansado por el viaje sombra, se dejo caer en la cama, aparto los cobertores y abrazo la almohada, se acomodó y sonrió. Al menos, el vería a ___________________ al día siguiente, se durmió con una sonrisa, vería a esa chica, esa niña tierna e inocente que era su única amiga y que le quería.

(....)

Amaneció y _______________ se levanto, tenía los ojos hinchados de tanto llorar, se quito la chaqueta de Nico y dejo a lado el peluche, se dio un baño y se puso jeans, una camiseta de color café claro y un suéter, junto con sus converse, se cepilló los dientes y solo tomo agua, sus llaves y se fue al la escuela.

Nico estaba despertando, se baño, se pusos jeans, camiseta, converse negros y su chaqueta de aviador, su mochila y salió hacia la escuela.

_______________________ llegó a a la escuela, guardo y saco cosas de su casillero, cuando alguien lo cerró de golpe, haciendo que ella pegara un brinco. Amelia y Kim no estaban de buen humor.

-¡maldito ratón miópe de biblioteca! ¡te llevaste los cuadernos que necesitabamos! ¡pero lo pagarás caro- grito Amelia, _______________ trato de huir, pero no pudo, ya que Kim la tomo de los brazos junto con otra amiga, ellas la empujaban y ________________ trato de huir, pero no pudo, hasta que la aventaron contra algo duro, que le impacto en la nariz, ¿tenían manía con su nariz o que? Lo que impacto su cara fue la mano de Amelia, __________________ cayo al suelo, la sangre brotaba por montones de su nariz, manchando su suéter un poco, le tomaron los brazos.

-come ceridta, oink oink oink, cerdita oink oink- dijo riéndo Amelia, le embarró un pastelito de cerdo en la nariz, pedazos del pastel se metían en su nariz, ella respiró por la boca, pataleo hasta que, como pudo, le dio una patada a Amelia, se soltó demlos clones de Amelia, en ese momento unos brazos fríos la cargaron y la llevaron al baño, se limpio la cara con ayuda de Nico, ¿como es que sabía que era él? Por sus brazos fríos y por su loción, cuando estuvo limpia, ella lo vio, no aguanto más y se lanzo a abrazarlo, enterrando su cara en sus hombros y llorando, el la abrazo y acarició gentilmente su espalda y cabellos.

-shhhh, tranquila, regresé... tranquila hermosa- susurro un Nico preocupado, cuando ella dejo de abrazarlo y de llorar, Nico vio la poca sangre que todavía escurría por su nariz.

-dioses... vámonos de aquí, vamos- dijo Nico, ______________ asintió y el la cargo, salieron del baño y ella pensó que Nico la llevaría a la enfermería o a el salón de clases, pero no paso así, salió de la escuela y la llevo al apartamento de él, sin importarle que el apartamento de _________________ estuviera enfrente, la llevo hasta su habitación y la dejo en su cama, sacó el alcohol que tenía con unas gasas y curo a __________________ de la nariz

-re dejo para que... para que descanses- dijo Nico, ya había guardado las cosas y se iba a ir, cuando _________________ lo tomo del brazo.

-no... no me dejes sola por favor- susurro, Nico se acostó a su lado sin decir nada, ella se quedo dormida en los brazos de Nico y el igual, la mantenía junto a el, no la dejaría sola, no otra vez.