Te conté

3 0 0
                                    

"A veces me salen lindas palabras al hablar. Pero no siempre. Entonces, te cuento que:

En un tiempo sentí que estaba intentando no enamorarme. Y me sales con esa sonrisa, con esa mirada...

Y entendí que ya era elemental. Mi debilidad tenía nombre y apellido. No es lo que siento por tí, es lo que no siento por nadie más.

Sólo me gustas vos, ni tan simple ni tan complicado, pero sí. Me gustas un montón".

Esa fue mi declaración de amor.
En un minuto supo lo que yo había callado durante 10 meses de mi vida.

Cariño y dolor: lo cotidianoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora