Amaura Salvatore - The Originals [2]

Capítulo 11: ¿Antídoto?

Amaura.
Mystic Falls...
Caminamos por el cementerio hasta llegar frente a la cripta familiar. Tío Stefan y padre dejan el ataúd sobre el suelo a un lado del hoyo que cavamos para enterrarla.

—Bueno, ¿Esto es todo? Estos son todos los del funeral—Pregunta Papá a Valerie y Nora se acerca.—¿Donde está tu novia?

—No te concierne—le responde Nora seriamente.

—¿Hay problemas en el paraíso?—bufo cansada mientras insiste.

—¿Que hay de Julián? ¿Dónde ésta?—le preguntó.

—No he escuchado nada de ellos en días—me responde Nora.—Yo me puse del lado de Lily. ¿O lo olvidaste?

—Solo somos nosotras—dice Valerie tratando de aligerar la tensión. —Beau no se atrevió a decir a Dios. 

—Estoy seguro de que simplemente no supo que decir—Bromea papá y ruedo los ojos desesperada.—De acuerdo, bajemosla.

—Espera—lo detiene Stefan. —Deberíamos decir algo.

—No, no deberíamos—Frunce el ceño.

—Papá, basta—le pido y el mira seriamente a Tío.

—Apoyo a Stefan—dice Nora.

Papá se aleja resignado mientras Nora camina hacia el ataúd.

—Cuando era niña, amaba a mi madre profundamente. Ella me amaba a mi también. Hasta que descubrió mi problema de absorber magia—Le susurra Nora.—Si ella supiera que eso es solo una cosa de las cosas que me hacen diferente. Cuando me dio la espalda...Pense que Jamás encontraría ese tipo de amor de nuevo. Tu me demostraste que estaba equivocada. Gracias, Lily.

Limpió mis lagrimas, y la veo acercarse al cofre darle un besó y alejarse.

—¿Quien sigue?—pregunta padre y Valerie se acerca.

—Tu me conociste en mi mejor y peor momento. Siempre viste mi luz interior sin importar mi humor. Te voy a extrañar, Lily—Se despide y voltea a verme y me ofrece un pequeño ramo de flores.

—Violetas color crema—sonríe Stefan. —Lo recordaste.

—Claro—dice y me mira esperando que las tomé. Respiro hondo y lo hago.

—Gracias—murmuro y ella se aleja.

—Los dejaremos—ella dice antes de que sevaya junto a Nora.

Papá levanta su mano en moviendola en despedida, y voltea a vernos.

—¿Y bien?—se acerca a mí, pero no estoy de humor de siquiera mirarlo por toda su indiferencia que ha tenido con Lily.

—¿Cuantas veces tienes la oportunidad de volver a decir elegía de tu madre?—le pregunta Stefan.

—Buen punto hermano—habla mientras se acerca.—¿Que tal esto?...Lily, fuiste una madre terrible cuando estabas viva y fuiste una madre terrible cuando estabas muerta—cierro mis ojos fuertemente.—Tienes razón, si que se siente bien.

Se aleja y yo niego. Tío Stefan está apunto de ir detrás de él, pero tomo su brazo para detenerlo.
—No, por favor—le pido y el respira hondo. Lo suelto y miro el ataúd frente a nosotros.

Abro la tapa del ataúd y dejo las flores.

—Lo siento muchísimo, pero te prometo que arreglare esto—murmura Tío Stefan antes de cerrar el ataúd.

Me mira y me abraza fuertemente, lo necesita, lo necesitó.

Adiós abuela, Lily.

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New Orleans.
Días después...