Llanto Inocente

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Advierto desde un principio que esta es una historia con un principio bastante agresivo y doloroso, así que no es apta para personas sensibles.

El vídeo es la Canción con la cual me inspiré para hacer este fic, solo venía a casa en bus devuelta del trabajo y comencé a crear esta historia con esta canción que la escuché hasta el cansancio, soy virgo tipo de sangre B3,  de las obsesivas compulsivas :D

Para quien no sepa la película es:  el Origen 

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Uchiha Sasuke de 35 años conocía muy bien el amor, y los desastres que éste provocaba, también conocía divinamente el odio, era un sentimiento que manejaba a la perfección, gran parte de su vida la dedicó al odio, y se cerró por completo al amor, él simplemente era una bestia. El "Asesino de Fiscales" como lo llamaban sus pares, era abogado, uno de los mejores del mundo, a pesar de su juventud, desde sus 24 años que practicaba, un abogado penalista de temer, que conjunto a su soberbia apariencia, su metro ochenta y siete de estatura, su amplia espalda, de perfecto torso marcado, estrecha cadera y largas piernas, junto con su rostro esculpido en granito, facciones fuertes, mandíbula dura, labios semi carnosos, rictus cínico, y ojos negros como el mismo anochecer, de mirada fría y sagaz, más su aguda inteligencia hacían de él una combinación mortal. Era un hombre deseado por muchos y temidos por todos, en lo que llevaba ejerciendo contadas veces había perdido un caso.

Le habían ofrecido muchas veces ser juez, magistrado, fiscal, por su actitud y rectitud implacable, mas él se rehusaba prefería trabajar por su cuenta y no tener que estar bajo el escrutinio público, además a lo largo de sus años como abogado había comenzado a tener aversión por los fiscales, a muchos los encontraba flojos, muchas veces juicios enteros se iban al tacho de la basura por un fiscal que no hizo bien su trabajo, delincuentes quedaban libres e inocentes iban a prisión, las policías terminaban frustradas por los tecnicismos de las leyes, Sasuke odiaba ver eso.

Pisaba suelo japonés luego de largos seis años, desde que había perdido a su hermano menor, y ahora volvía con solo una meta en la cabeza acabar con la persona que destruyó a su hermanito, Sabaku no Gaara y lo haría de tal manera que Gaara nunca se iba a volver a levantar.

-Sasuke- la voz de su hermano mayor lo sacó de su fuero interno, sonrió verdaderamente al ver a Itachi, muy parecido a él, de la misma altura y contextura, solo su rostro cambiaba un poco ya que tenía grandes ojeras marcados en su guapo rostro y su cabello era largo- Pensé que no vería este día-

-Idiota- Saludó el menor abrazando a sus hermano- Juré que un día iba a volver a Japón cuando tuviera con que destruir a Sabaku No Gaara- No había regresado antes porque dudaba de sí mismo que pudiera estar en el mismo lugar que ese hombre y no matarlo.

-Quisiera saber qué vas hacer cuando termines con tu venganza- Inquirió ciertamente preocupado, hacía mucho tiempo que su hermano solo pensaba en la venganza, no era algo que él mismo no deseara, ver como cayó su hermano menor en la locura por una persona que nunca le amo aparentemente, hizo que su familia se desquebrajara, no solo perdió a uno de sus hermanos sino a los dos, Sasuke era un completo obsesivo cuando algo se le metía en la cabeza nada lo sacaba de ahí. Desde ese entonces su hermano solo pensaba en la venganza y como hacer pagar al varón que le quito todo a su hermano menor.

-Viviré en paz al fin, sin tener que pensar que no hice nada por Sai- Contestó serio, pensando en su pequeño hermano doncel.

Uchiha Sai siempre fue el más peculiar de los tres hermanos Uchiha, nacidos en el ceno de una familia clase media, con dos padres amorosos pero estrictos, quizás no tenían dinero a montones pero tenían el suficiente para arreglárselas sin problemas con tres hijos, muy inteligentes gracias al cielo, aunque Fugaku Uchiha el padre de ellos decía que se debía a sus superiores genes y su mujer Mikoto siempre lo golpeaba diciendo que ella era más inteligente que él. Gracias a esa inteligencia siempre fueron a las mejores instituciones educacionales con becas, y cuando Harvard aceptó primero a Itachi luego a Sasuke y por último a Sai, el mundo se abrió para la familia.

Sangre InocenteWhere stories live. Discover now