cap 1 lo que fue

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Hace no mucho una joven de no mas de 22 años, de una tez blanca y cabellos café. Vivía en la ciudad de Nueva York en un apartamento junto con un novio.

La joven era hermosa, con sus ojos verdes que mostraban una inocencia tan clara, y una sonrisa que podía alegrar a cualquiera.

Ella era muy alegre junto a su novio, no trabajaba, pues él le dijo que no era necesario que lo hiciera, su único oficio era cuidar la casa.

Un día como cualquier otro o eso parecía, ella se estaba entreteniendo mirando la televisión, fue cuando escucho que la puerta se abría. Fue a ver quien era, pero solo era su novio, quien al llegar ella le recibe con los brazos abiertos.

Él sin ningún reacción a tal acto solo le dice, como estas, ella aun feliz le trata de dar un beso que el corresponde. Aunque él no solía ser muy amoroso o cariñoso con ella, ella sabia que la quería y asi era como demostraba su amor hacia ella, o al menos eso quería creer ella.

Pues aunque no demostraba su afecto desde ya hace mucho, ella creía que aun así él la quería. Pues todo era parte de creer, ella creía en el, creía cada palabra cada acto y cada cosa, nunca le llevaba la contraria pues todo era cuestión de creer. Ella lo veía así de simple. Solía crear mucho en la gente y en sus creencias de ellos mismos.

Pero ese mismo día, ya mas tarde, ellos estaban cenando juntos. Como siempre ella siempre le pregunta como le había ido en el día, tratando de hacer conversación. Pero el siempre respondía sin interés como si las preguntas le molestaran. Pero eso no le cambiaba el humor a ella.

Ya en la noche ellos solían dormir separados en cuartos diferentes, a ella no le importaba aunque así lo quisiera, pues él siempre se negaba a su compañía.

Fue cuando ella se despertó, justo a la media noche escucho unos ruidos, pensó que seria tal vez él, se dirigió a su habitación.  Pero su novio al parecer no estaba solo.

Abre con cuidado la puerta y mira a través de la rendija, pues su novio estaba con alguien mas. Él estaba con otra mujer.

Algo en ella se rompió ese día, tal vez era su corazón, pues todo lo que ella creía sobre él era una mentira. Comenzaron a salir lagrimas de sus ojos, con cuidado sale del lugar se diré a su habitación para tomar unas cosas escribe una carta que la deja sobre su almohada y salir del apartamento.

Al salir a la calle que parecía ya totalmente vacía, no sabia donde irse. Comenzó a caminar sin rumbo por las calles aparentemente vacías.

Con tan solo un ligero abrigo que le protegía del frío, camino un largo trayecto. Hasta que llego a una calle vacía sin luces a excepción de un pequeño farol que alumbraba a 3 personas que aprecian vagabundos.

Ella al notar su presencia decidió alejarse en la dirección opuesta a ellos, pero ellos notaron su presencia y comenzaron a hablarle.

Hola señorita, ven aquí hermosa, por que no te acercas y hablamos un rato, ven acompañanos en esta fría noche, ven nos daremos calor juntos. Decían cosas como esas mientras ella solo caminaba lo mas rápido posible sin prestarles atención.

Ella sabia lo peligroso que podía ser las calles de Nueva York en las noches y trataba de alejarse de ellos lo mas posible, pero noto como aquellos hombres se pusieron de pie. Y empezaron a caminar en su dirección.

Ella empezó a correr cuando noto que la seguían, sin idea a donde iba los hombres la empezaron a perseguir, ella llego a un callejón oscuro pues había tomado una mala dirección. Ya no sabia donde ir estaba rodeada, hasta que notó una ventana rota.

Sin ninguna otra opción trepó hasta la ventana para poder entrar, pero los hombres llegaron y la vieron meterse en el lugar. Una vez que ella logro entrar dentro. Los sujetos fueron tras ella.

Ella mira a su alrededor y se encontraba en unos pasillos de madera, con una sustancia color negro y pegajoso que lo teñia, con algunas pocas luces que aun seguían prendidas, ella camina por los pasillos .

Cuando noto que los mismos hombres estaban entrando al lugar, ella empezó a correr por el lugar. Cuando ellos lograron entrar empezaron a perseguirla por el corredor de madera.

No sabia donde estaba o que era lugar, que parecía abandonado, solo le importaba el miedo que sentía en el momento, sin rumbo corre por todo el lugar. Hasta que llega a un cuarto lleno de esa sustancia que la chica no reconocía.

Los hombres la rodearon, ahora si no tenia escapatoria. Fue cuando se escucharon unos quejidos de las paredes y comenzaron a salir burbujas de la sustancia que los rodeaba.

Los hombres miraron a su alrededor cuando, empezaron a salir criaturas de la sustancia. De color negro como lo que les rodeaba, sin ojos, ni pies, arrastrándose con tan solo sus manos, empezaron a brotar de todos lados rodeando a ella y los hombres.

Ellos asustados empezaron a correr en dirección  de donde habían venido, pero las criaturas los rodearon. Hasta que apareció alguien de los pasillos.

La chica solo miraba asustada la escena, pues los monstruos estaban rodeadolos, hasta que de la oscuridad de un pasillos apareció un ser humanoide. Con aspecto humano llevaba un overol blanco y una hacha en manos, también llevaba una extraña mascara con una abertura en la boca.Ella se asusta ante tal presencia.

Los hombres se impresionan ante tal hombre amenazador, él camina hacia los sujetos. Con los monstruos por atrás y el extraño sujeto por adelante, ellos parecían rodeados.

De pronto  los hombres atacan al sujeto del hacha y extraña mascara, él los esquiva fácilmente y ataca a uno con el hacha dándole en la costilla, el otro lo intenta golpear pero rápidamente el esquiva el golpe y le pega en la espalda con su hacha, él ultimo de ellos intenta escapar. Con el camino libre intenta correr, fue cuando él extraño hombre de la mascara quita su hacha de la espalda de su víctima y la lanza, llegando hasta el que intentaba escapar

Le dio justo en una pierna, el cayó al suelo. El hombre de la mascara camina hacia él con su sequito mirándolo. Él intento escapar arrastrándose pero el tomo el hacha de su pierna, se paró en enfrente del moribundo hombre y le dijo, ¡ovejita, ovejita, ovejita, es hora de... dormir!.
Para después clavarle el hacha en la cabeza.

La chica se quedo impactada al ver tan atroces actos y las palabras del hombre dichas con tanta calma ante tales actos la aterrorizaron a un más.

Ella aprovecho que las criaturas que la rodeaban no le prestaban atención, empezó a correr, fue cuando sintió como la miraba aquella persona que aunque se cubría con su máscara sintió como sonreía.

La chica corrió lo mas posible para escapar lejos, pero parecía que nadie la seguía, llego a un punto en el que no podía escapar mas, pues ya había corrido mucho para una noche. Cuando se detuvo no había nada a su alrededor otra vez había quedado sin salida, en eso sus ojos se fijaron en una estatua de su altura, que tenia una gran sonrisa, con ojos de caricatura y dos cuernos de en su cabeza.

Ella toco a la escultura con la mano y por alguna razón la sonrió.

De pronto sintió un golpe en la cabeza, ella solo se desmayo mirando ya en en el suelo al que le había dado el  golpe diciendo... es hora de descansar. Ella callo dormida en el suelo.

Sammy Lawrence Donde viven las historias. Descúbrelo ahora