Capítulo 14: Almas gemelas, firmemente enlazadas

2.1K 299 135
                                    

Sé que me tardé, pero en mi defensa, son más de cinco mil palabras. XD

Sin corrección ortográfica, espero que les guste.


A las 8:00 AM, la escasa luz se filtraba por la enorme ventana con cortina de color azul cielo de la habitación de Hui Ying.

La puerta de la habitación de Hui Ying fue azotada por unos golpeteos constantes.

—Ah, como chingan... —murmuró Hui Ying, envolviéndose en las mantas, haciendo caso omiso al ruido.

—¡Papá! ¡Papá! —llamó Hui Yang impotente, y con voz nerviosa.

Al escuchar la voz del niño, Hui Ying rodó de la cama con mantas incluídas, azotando contra el suelo.

El Sistema, ". . ."

Hui Ying, ". . ."

Hui Yang que escuchó el ruido ". . ."

Hui Ying se incorporó, y respondió con voz seria.

—¿Qué pasó, Hui'er?

—El abuelo y la abuela quieren que bajes a desayunar, apresúrate.

—Vale, ya voy.

Hui Ying se levantó perezosamente, bostezó, y se frotó los ojos como un niño pequeño. Hui Ying había tenido tanta reacción porque usualmente Hui Yang era muy tímido, y siempre evitaba molestarle, por ende, al escuchar la voz del niño, se asustó, y se preocupó, por acto de reflejo intentó saltar de la cama, pero las sábanas se enredaron en él, y terminó cayéndose.

Hui Ying llamó a su Sistema deprimido.

《Xiao Xiao, ¿por qué parece ser que desde que llegué a este mundo me he vuelto torpe?》

Xiao Xiao que sabía la verdad, <<Anfitrión, debe de ser su idea. Quizás sólo se trate de un poco de mala suerte.>>

De mala gana, Hui Ying se dirigió al baño, se cepilló, se duchó, y se vistió con una ropa casual.

La reunión no era una fiesta de traje para los idols, así que no era obligatorio llevarlos, pese que muchos idols irían vestidos de traje, él no, tenía demasiada flojera de comprar un traje nuevo, y aguantar la incomodidad, por lo que se vistió con lo primero que entró en su vista, que fue, una camisa polo blanca, unos vaqueros, y tennis de color rojo vino con dorado.

Hui Ying se peinó y perfumó, bajó las escaleras, y se topó con que sus padres, e hijo adoptivo, le miraban ardientemente.

Hui Ying, "¿Eh? ¿Qué me ven?"

—Hijo, tenemos que hablar contigo.—murmuró la señora Hui.

"¿Eh?"

—Se trata de algo serio.—complementó el señor Hui.

"¡¿Eh?!"

—Tienes que tener cuidado. —terminó Hui Yang.

"¡¿Eh?! ¡¿Qué pedo?!"

—Vale. —tragando saliva con pesadez, Hui Ying se sentó en la mesa, diciendo con una mirada inescrutable mientras comenzaba a desayunar.—Tan temprano y sacándome sustos. Sean directos, y díganme a qué se debe tales caras.

—La fiesta puede que no sea segura. Hijo, recuerda no comer nada de dudosa procedencia, no beber nada de dudosa procedencia, y tener cuidado con tu alrededor. —dijo papá Hui.

Hui Ying enarcó una ceja, debatiéndose en si carcajearse por lo cómico, o ponerse a llorar por la desesperación debido a la situación.

Sus padres actuaban como si enviaran a su hijo a la guerra, ¿pues qué tan tonto creían que él era?

El Sistema De Reencarnación PerpetuaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora