Les dije que el anterior capítulo fue crudo de escribir, lo fue para mi, muy duro pero debemos seguir con el fic, esto se va a poner peor
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Aunque aún no se había despejado el cielo y las nubes se veían bastante cargadas, se agradecía la tregua que dio el que dejara de llover, talves si tenían suerte podrían llegar a casa del de ojos verdes sin tener que mojarse más los zapatos, el paraguas cubría sus cabezas pero no así los pies
Ambos muchachos cada uno perdido en un pensamiento caminaron más rápido a su destino
La casa de Sorey
Sorey siempre pensó que su casa era encantadora, a lo menos antes de volver su padre, se pasaba horas y horas escondiéndose en cada rincón jugando a las escondidas con su madre
Cómo añoraba esos días, donde la única preocupación que tenía era despertar, comer y jugar
Ahora solo vislumbrar su casa sentía que iba directo a una cárcel, donde el esconderse había sido divertido después se volvió indispensable para evitar oír los gritos del hombre que se decía su padre
¿Acaso un padre es alguien que solo da terror con su presencia?
No, eso no era un padre, era un monstruo disfrazado de padre
Cuánto más se acercaban a la puerta más aumentaba la pesadez en su pecho, últimamente su madre se hallaba más nerviosa y no sabía porqué, le preguntó varias veces, pero ella no le decía nada, solo le respondía que parecía que haría mal tiempo esta semana, esto había empezado el domingo por la noche
Antes del domingo no estaba tan nerviosa
Aunque unos días antes del domingo parecía nerviosa cuando veía a Mikleo, molesta... O más bien preocupada por algo, pero desde ese domingo algo cambió
No sabe que es, pero le inquieta
- Pasa algo? - le pregunta Mikleo cuando el silencio entre ellos se siente extraño, siempre han hallado conversación sobre cualquier tema por lo que el silencio en su amigo le molesta
- no, nada, solo me preocupa lo de la ropa - sonríe intentando aplacar al de ojos violetas
- ya te dije que te ayudaría a recoger - le contesta algo molesto por insistir en eso y no decirle de una vez lo que de verdad le pasa
-si, lo se, lo siento?
- deja de disculparte por algo como eso, no tienes la culpa de que llueva y no me molesta en nada ayudarte, eres mi amigo y los amigos están para ayudarse no? - Mikleo le responde esperanzado de que pueda leer entre líneas de que puede confiar en el, que no lo va a juzgar, pero viendo la cara del otro sabe que sus esfuerzos son en vano
- si lo se, pero aún así siento que tengas que ayudarme con la ropa - responde a pesar de si haber captado le mensaje de su amigo, "amigo" es una palabra que se le está haciendo corta a Sorey para referirse a esta hermosa persona que se preocupa tanto por el
Más al llegar a su destino prefiere dejar de pensar en eso, si sigue pensando en las cosas le va a dar migraña, abre la puerta de su hogar a pesar de que siente asfixiarse, más se recuerda que a su lado está Mikleo, con Mikleo es más fácil respirar ese aire tan oprimido que rodea su casa
- buenas tardes, mamá estoy en casa - indicando a Mikleo donde dejar su paraguas busca a su madre para saludarla y también para cerciorarse de que está bien, más cuando llega a la cocina sabe que algo no está bien, su madre intenta disimular mientras se limpia la cara de que no a estado llorando - pasa algo mamá?