🅛🅞🅢 🅣🅘🅔🅜🅟🅞🅢 🅒🅐🅜🅑🅘🅐🅡🅞🅝 🅙🅐🅚🅔.

𝓒𝓱𝓪𝓹𝓽𝓮𝓻 𝓣𝓱𝓻𝓮𝓮

Cuando sus ojos se abrieron a la luz del sol frente a él, se removió un poco incómodo al saber que la sabana se había caído de la cama, dejándolo sólo con una tela color negro tapando su redondo trasero y sus genitales, se levantó de un tirón sin andarse de rodeos, había descansado lo suficiente como para andar de flojo el día de hoy, para comenzar bien se dio una ducha tibia, se vistió con ropa cómoda especial para el frío abrazador que había y darse un corto receso antes de salir de su cabaña, había dormido desde que llegó junto con el británico, no le importo lo demás dejando su ropa en uno de los sofás que su habitación poseía, se acostó en su cama y se dispuso a dormir.

Malo para su suerte el hecho de despertarse agitado, con las mejillas sonrojadas, gimiendo el nombre de una persona que aún lo tenía loco, era tan de madrugada que no le importo si la gente lo escuchaba gemir, jadear, decir groserías al por mayor, debía satisfacer su necesidad y así lo hizo. Cuando terminó se limpio, se coloco de nuevo su ropa interior y se cayó nuevamente sobre las almohadas.

Se sacó un poco su propia imagen suplicando a alguien que no tenía a su lado, así que salió de la cabaña notando que había muy pocas personas afuera, tomó la llave de su habitación cerrando la puerta a su espalda para poder sentir el aire frío golpear su rostro, suspiro y camino hasta el restaurante que el pequeño mapa que estaba en su habitación le indicaba. Con sus manos dentro de sus bolsillos dejó salir un breve bostezo para después llegar al tan esperado restaurante, estaba hambriento, la comida era gratis así que aprovecharía de ello.

Cuando por fin satistacio su hambre, salió de ahí para poder ir a la zona de patinaje donde había quedado de encontrarse con Holland, los patines el chico los llevaría así que solo camino, en su camino en las escaleras hacia arriba vio a una chica sentada con una cámara aún lado de ella, sostenía su pierna derecha con varias lágrimas saliendo de sus ojos, preocupado por la rubia se acercó a ella y se agachó sacando un pañuelo del bolsillo trasero de su pantalón. Acercó este mismo a la rodilla que se veía perfectamente una raspaduras a través de la tela sintética rota que derramaba sangre en pocas cantidades.

—¿Estas bien? -

La chica levantó la mirada, y cuando vio solamente esos ojos azules no pudo evitar soltar un grito de emoción olvidando por completo de que tratando de subir un escalón, se resbaló golpeando su rodilla, Gyllenhaal se asustó un poco creyendo que la niña tenía miedo.

—¡USTED ES JAKE GYLLENHAAL!, ¡NO PUEDE SER Y YO QUE NO LE CRÍA A...¡OH POR DIOS TIENE QUE VENIR CONMIGO POR FAVOR! - La chica limpio su herida con rapidez, se levantó tomando la camara entre sus manos. Jake quién no entendía nada aceptó acompañar a la chica, subió con rapidez las escaleras junto con ella y de pronto se detuvo.

—¿Que pasa? -

La chica lo volvió a ver, le sonrió.

—Mi papá, usted trabajó con mi p-, ¡SANTO CIELO PAPÁ! -

Salió corriendo hacia la gran multitud de personas, Jake se quedó ahí unos segundos pero la acompañó, ¿trabajo con el?, ¿Quien será?, pidió permiso para pasar entre las personas que esperaban para poder comparar unos patines en filas desordenadas y cuando vio a la chica junto con un hombre arrodillado dándole la espalda, no le daba pistas de saber quien era no miraba su rostro, se topo con la mirada de la chica nuevamente y le Sonrió.

—¿A quien le sonríes? -

Bendito sea el momento en el que se dio la vuelta, bendito sea el momento en que su hija se topo con ese hombre, su boca se abrió de forma lenta, se levantó esta vez dándole la espalda a su hija, los dos se veían con sorpresa, un millón de recuerdos se les pasó por la mente, un millón de recuerdos que hicieron que a Jake por arte de magia se le movieran los pies, con rapidez se acercaba al castaño y sin pensar ni dos veces, de hecho ni lo pensó cuando se había lanzado a sus brazos. Ledger no se le negó.

—¡HEATH LEDGER HIJO DE... -

Heath aceptó el abrazo casi como había alzado los brazos, no podía aguantar su felicidad, se estaba muriendo, undio su cara en el hueco del cuello de Jake, a Gyllenhaal no le molesto pero cuando sentía algo húmedo en aquella zona se despegó del abrazo encontrándose con Ledger llorando, sus mejillas rojas donde bajaban las lágrimas, sus orejas igual de rojas, su brazo tapando sus ojos y su boca sonriendo aún a pesar de estar llorando. Matilda veía la escena conmovida, pero Holland se acercó apresurado a ella tomándola de la mano.

—Ven Matilda, vamos a patinar. -

Se la llevó de ahí, para que aquellos dos pudieran tener un buen reencuentro. Benjamín, bajo un poco la cabeza, frunció en ceño y le tomó de las orejas.

—Hey... - Dijo en un tono comprensivo, acarició el cabello del hombre y volvió a abrazarlo. Las miradas de las personas sobre ellos eran evidentes, nadie les tomaba una foto y solo porque quizá no los conocían demas. Pero no les importo. —Tranquilo, no llores... -

—Porqué....¿Por qué no debería si tengo el ser más maldita mente hermoso está justo al frente de mi...? -

Jake sintió muy bien su corazón llorar de amor en esos momentos, Heath una vez un poco calmado lo abrazo nuevamente pero cuando se dieron uenta de la escenita que hacían frente a las personas se separaron, pero Jake no se contuvo ni un segundo para poder tomarlo de la mano y correr junto con el hacia a las escaleras, volviendo abajo, con rapidez casi con desesperación Jake se limitó a decidir donde ir y les salía mejor ir al restaurante para poder tomar algo y platicar.

Ninguno de los dos ponía dejar de sonreír, ni en el momento en que sés entraron en una mesa frente al otro, Heath apenado tenía la mirada baja y sus manos metidas en los bolsillos de su chaqueta, pero Jake estaba sorprendido.

—una botella de su mejor whisky. - Pide Gyllenhaal, Heath lo mira sorprendido, era demaciado temprano para beber. Ledger sacó una de sus mano para tocar su propia mejilla.

—¿No crees que es muy tempra-

—No me arruines este momento Heath.- le suplico callandolo por instante, le tomo de la mano acariciando el tatuaje desgastado que tenía en la muñeca. —Te extrañe Heath. -

—Y yo a ti. -