𝓒𝓱𝓪𝓹𝓽𝓮𝓻 𝓯𝓸𝓾𝓻

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El olor a bebida era fuerte, los dos aunque fuesen resistentes al alcohol esta vez no lo fueron o de hecho Jake no lo fue, al menos Heath sabía contar y caminar recto aún. Era una noche nevada y el alcohol los ayudaba a mantenerse con temperatura normal, Gyllenhaal que ya iba por la segunda botella de Whisky se negó rotundamente a seguir bebiendo, mientras que Heath decía que debía ir con su hija, era muy tarde y debía darle las buenas noches.

Y, ¿Que pasó con la tarde?, bueno; platicar de que les sucedió en quince años, eso fue lo que hicieron, los dos reían cada vez por alguna estupidez y como eran los únicos dos que se quedaron en el bar, sus voces hacían eco. Y por más que quisieran quedarse tenían que volver a sus cabañas era de noche.

Jake se para de la silla de madera, y gruñe mientras se tocaba el trasero pues le dolía por tanto tiempo de estar sentado.

—H-Heath vámonos, ya es muy tarde. -
El de cabello castaño claro encendió un cigarrillo y comenzó a fumar, deja dos billetes de cien dólares, se levanta y camina junto con el Jake tambaleante a la salida, uno se sostenía del otro en todo el camino, Jake era el más borracho de los dos, así que deliraba mientras caminaba, riéndose y tocando la media barba que su compañero traía.

Heath dio una sonrisa, pero cuando llegó a su cabaña pues Jake solo lo siguió su paso, no le importo no le preguntó tan siquiera, vio a Matilda junto con Tom sentados en las escaleras.

—Hey, hola. Bueno como ya están aquí me iré a dormir. —el chico de asentó británico se levanta, mientras escuchaba y miraba confundido a Jake riéndose —¿Quieres que te lleve a tu cabaña Jake? - le cuestionó, sabía que no era ni capaz de identificar como diablos terminó en otro lugar que no era su cabaña.

—N-No... Heath me ayudara, ¿si? -Tom asiente y se despide, llendo se hacia otro lugar un poco lejos de esas cabañas y Matilda mira a su padre.

—Papá, voy a dormir. —se acerca a él y le brinda un beso en la mejilla, sin ganas pues el olor a alcohol y cigarrillo que su padre destila lo odia y le causa náuseas, se separa con rapidez al igual abre la puerta de su cabaña. —Buenas noches papá, buenas noches Tío Jake. -

—Buenas noches Matilda - Dice Jake entre risas y mira a Heath. —¿Me puedo quedar contigo?-

—Claro, siempre y cuando te duermas rápido. - exclamó con risa, lo ayuda a entrar hasta la habitación.

Cuando ya estaban dentro, Ledger se quita el abrigo y lo deja en uno de los sillones, mientras que Jake se estaba quitando toda la ropa que traía, sin vergüenza, sin pudor, como si estuviera solo en su casa, Heath cuando se dio la vuelta para verle Jake quito hasta que la última prenda que tenía era su Bóxer, el otro lo veía indiscreto, callado, como si a casar lo fuera, analiza su cuerpo tonificado, quizá un poco descuidado en cuanto a los pectorales, su vello en el pecho hasta que una línea se esconde bajo el elástico del bóxer color azul, sus pies descalzos, su cabello largo alboratado, ¿por qué están jodidamente lindo?, y se sonroja al saber lo que hace y voltea la mirada.

—Heath, ¿Sabes a que me recuerda esto? -

—¿A que cosa? - lo vuelve a ver, Jake se acercaba a él tomándolo desprevenido, sus piernas fuertes se habían hecho de gelatina y su pulso estába tan fuerte, como si el mismo fuego que trataba de invadir lo fuese a tocar y traga duro al tenerlo a centímetros de él.

—¿Donde vas a dormir? - Ledger, se sentía a morir, lo tenía tan cerca y no podía enviar alarmas a todo su corazón y cerebro.

—V-voy a dormir en el sofá... Tu duerme en la cama. -

—Esta bien. - Le sonríe y camina hasta la cama, se abre espacio entre la sabana y se cubre con esta, el otro que estaba parado aún, se dio una cachetada mental para que al fin se moviera, parpadeo y se movió hacia el closet, tomó una manta que estaba ahí, luego quito sus zapatos, cambió su ropa a una pijama abrigado ra y al fin, se acostó en el sofá.

Mirando al techo lanzó un suspiro profundo, ladea la cabeza para ver a Jake revolviense sobre la cama para al fin apagar las luces, lo ve acostarse boca abajo y se queda quieto de poco a poco. Los dos se quedan dormidos al fin.

Entre el medio de la noche, la luz golpean los ojos de Ledger, adormitado y medio enojado por despertar en su mejor sueño, parpadea incómodo por la claridad y mira del porqué las luces se encienden, luego una figura se posa enfrente de él, levanta un poco su torso y mira hacia arriba.

—¿Jake? - entonces, se abre paso entre su puesto en sillón, lo arrinconar contra el respaldar, su cara se estampa en su pecho, sus manos rodean su cintura y sus piernas se envuelven bajo la sabana. Un ligero sonrojo se desprende de sus mejillas, sorprendido lo mira nuevamente. —¿Jake? -

Esta dormido, vuelve acomodar su cabeza en la almohada y abraza el cuerpo ajeno, se sentía tan bien, y está vez no lo hacían por una película, no con cámaras enfrente esto era real al menos para el. Quizá en la a mañana se levantaría temprano para que Jake no se diera cuenta de lo que pasó.

🅛🅞🅢 🅣🅘🅔🅜🅟🅞🅢 🅒🅐🅜🅑🅘🅐🅡🅞🅝 🅙🅐🅚🅔. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora