𝐎𝐧𝐥𝐲 𝐇𝐮𝐦𝐚𝐧 «𝐌𝐞𝐱𝐮𝐬𝐚»

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Aclaración: Al menos en esta historia nadie tiene hermanos

Ahora si continúen :>
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El calor llegaba a más de 35º, haciendo un horrible sudor en sus cuerpos, estaban tan acostumbrados que incluso estaban por iniciar una "pequeña" fiesta y digo pequeña porque cuando los latinos se juntan termina siendo una gran fiesta interminable

—¿Como vas con Argie wey?— preguntó el mexicano a su mejor amigo de parche con una estrella

—Súper, weon es todo lo que buscaba— soltó un suspiro de enamorado

—Cielos, ya quisiera un amor así— carcajeó el mexicano para luego empinarse una botella de cerveza Corona mientras era observando por el de habla extraña y otras dos personas más

—Che, ¿que te paso sapo culiao'?— apuntó con su dedo índice a su cabeza el tricolor azabache arqueó una de sus cejas pobladas hasta comprender que traía puesta la venda que el chico peruano le dejó puesta

—Me caí wey— mintió el mexicano, el de un ojo alzó sus hombros restándole importancia llevando una botella de cerveza igual a la del mexicano

La música no estaba muy alta tan solo para animar más el ambiente, mientras que Perú preparaba la comida el tricolor mayor se acercó a este asustándole de paso —¡Mexico deja de estar de caga palos!— grito pegándole en el pecho con las pinzas

—Perdón delicada— ambos soltaron una carcajada —¿Te ayudó en algo?— observo todos los ingredientes en la zona de cocina

—Ayúdame con los pescados causa— apuntó a una charola donde reposaban los pescados, Mexico dejó su cerveza aún lado acercándose al manjar fresco, retiró las entrañas, quito las escamas, preparó un sazón especial untándoles por ambos lados y después llevarlos a cocinar el chico bicolor observaba de reojo al azabache, le encantaba su presencia, incluso podría decirse que se sentía pequeño con tan solo estar a su lado ¿Te imaginas cocinar junto a él? Ambos tenían buen gusto en la cocina, podrían considerarse los mejores chefs aún así la gastronomía mexicana parecía no tener un final, cada día era algo nuevo que probar e la población peruana fusionaban ambos platillos ¿Que podría esperar del norteamericano? Era muy admirado, alto, con tatuajes en sus brazos venosos, no estaba ni tan gordo ni tan flaco, estaba en su punto y su cuerpo trabajado llegando a ser igual que el brasileño, ufff le calentaba más que el sol de verano —Mierda— susurró volviendo a prestar atención a los platillos que él preparaba captando la mirada del azabache

—Hey cholito!~ canturreó el tricolor captando la mirada del más pequeño —Pásame los cerillos— sonrió mostrando sus dientes blancos, Perú carraspeó un poco pasándole los cerillos sin volver a mirarlo, en verdad que ese chico le ponía bastante nervioso

[...]

La tarde pasó increíblemente rápido y nuestros latinos se encontraban más ebrios que nunca, Chile nunca cerraba su boca hasta llegar a la desesperación de Colombia —Oiga sapo hijoeputa ¿cuando se piensa callar? Fastidioso malparido usted habla hasta por el culo— soltó el tricolor amarillo, azul y rojo recargándose en el sofá individual dirigiéndose a Chile quien lo reto y ambos comenzaron una "pelea"

—Yo mejor voy a darme un chapuzón— se levantó el mexicano tambaleándose al principio hasta alcanzar su taba de surf y dirigirse a la playa

—Nunca sale del agua boludo— habló Argentina en dirección a Bolivia el cual solo asintió con la cabeza

En el fondo del océano, más allá del oxígeno, de los terrestres, de los humanos existían seres mitológicos, así como el monstruo del lago Nes o los dragones y sirenas

Estos eran reales, contenían cuerpo de un simple humano, cabellos, ojos, boca, brazos pero en cambio de nariz estos tenían hendiduras branquiales a los costados de sus cuellos, no tenían piernas, claro que no, para poder ser rápidos contenían una alargada cola parecida a la de un delfín 4 chicos se divertían jugando en los restos de un barco hundido desde hace muchos años, no se les permitían ir más allá del arrecife y tenían estrictamente prohibido salir del agua o acercarse mucho a la superficie

Pero claro como todo buen adolescente curioso rompes las reglas sin percatarse que traería graves consecuencias y un posible sermón por parte de tus padres

Los 4 chicos nadaban más allá del arrecife, la aventura nueva era salir del agua y ver el hermoso cielo azul junto a la brisa fresca del mar

—¿Que creen que hacen? ¡Sus padres los regañarán!— habló el delfín azulado

¿Que? ¿Creían que no tenían comunicación con las demás criaturas acuáticas? Claro que podían entenderles

—We just want to see! (Solo queremos ver!)— exclamó el estrellado con un curioso gorro café humano

—No quiero ser el testigo de esto— habló el delfín dispuesto a irse pero su instinto lo obligó a quedarse, no podía dejar a los hijos de su rey solos ¿Que pasaría si un humano los viera? Seguramente UK se molestaría causando que los mares se vuelvan salvajes imposible para los humanos entrar o serian arrastrados por las fuertes corrientes oceánicas

Nueva Zelanda, Australia, Canadá y el más importante para el animal acuático USA, no tenía favoritos para nada, tan solo que ese angloparlante, rubio y ojos azules era muy curioso restándole importancia a que lo viesen, estaban cada vez más cerca de salir un poco más y sus cabezas saldrían respirando el fresco aire

Al salir vieron a un —¿Human?— exclamó Nueva Zelanda viendo a una ola la cual se encontraba un tricolor con marcas en su cuerpo realmente muy apuesto y de eso estaba consciente el de franjas con lentes oscuros

"Que es lo que hace?" Para todos se preguntaban aquello, Canadá ya lo sabía puesto a que siempre se escapaba y los observaba desde una distancia lejana, todo marchaba bien hasta ver a aquel chico surfista casi todos los días, hasta que por circunstancias del destino el humano sufrió un accidente si no lo hubiese visto seguramente estaría... ahogado