| Parte 2 |

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Querido diario:
Gracias a Dios, la escuela ha terminado y mis calificaciones han sido mejor de lo que esperaba. Mis padres están muy orgullosos de mí y han decidido premiarme con un viaje, si. ¡Nos vamos de viaje, tú y yo!

Por primera vez vamos a salir, solos de casa y estaremos de nuestra cuenta. Me asusta todo esto pero es mayor la emoción por conocer un nuevo lugar que solo estoy deseando que llegue el día y la hora. Esta mañana he buscando en internet algunos hoteles y la verdad están un poco ... mucho fuera de mi presupuesto pero creo qué hay más opciones solo que estás no serán de mucho agrado para mis padres pero en fin, con el dinero que me entregaron puedo hacer muchas cosas.

Hay algo que no me deja en paz y está repiqueteando en mi cabeza como el pájaro loco en aquel árbol de las caricaturas, es un lugar hermoso frente a la playa ... y bueno, no tengo vestido de baño y me aterra comprar uno y mucho peor, usarlo. Dios, mis piernas son tan pálidas, y esas marcas en mis caderas, y los rollo de mi barriga y ... mejor no sigo, hasta se me quitan las ganas de irme de viaje.

—Amelia, te buscan.—escucho la voz de mi hermana desde la planta baja, me pongo de pie y antes de salir guardo mi diario en mi lugar secreto.

Bajo las escaleras y antes de poder preguntar quién es, veo aquella figura imponente y que nunca podría pasar desapercibida justo en el vestíbulo sosteniendo unas margaritas.

—¡Ah, aquí está!—vuelve a aparecer mi hermana y la odio por estropear el silencio y los segundos que tenía antes de verlo—voy a salir, ¿necesitas algo?

Niego y muerdo mi cachete internamente.

—Pórtate bien, hermanita—dice abandonándonos y con una cara de malicia.

Rodeó los ojos y me concentro en mi visitante.

—Hola,Amelia. ¿Cómo estás?

Harry, Harry, Harry.

Mi corazón bombea fuerte y mis pulmones pierden oxígeno. Estoy bien, siempre que estás cerca, lo estoy.

—Bien. ¿Qué haces aquí?

¡Amelia, que ruda!

—Oh, yo solo vine ... porque ...

—Lo siento, lo siento. No quise decir eso, es decir, quería decir que ... mejor me callo.—digo intentando remediar lo que acabo de hacer.

—Está bien, bonita. Solo pasaba por aquí y vine a traerte esto; y a decirte que tengas unas buenas vacaciones. Haz tenido mucho en la escuela.

Bonita, bonita, bonita. Harry me dijo bonita.

Esto merece unos buenos chocolates.

Y si, necesito descansar de la escuela, de los chismes, de los maltratos, insultos, risas, burlas y demás ... porque en menos de lo que canta un gallo estaré nuevamente en aquellas cuatro paredes recibiendo más de lo mismo. Ya no quiero eso.

—¿Sabes?, creo que tomaré clases de guitarra ...

—Eso es genial—le digo evitando soñar aburrida. Me he dejado llevar por aquel pensamiento tonto de la escuela, bajó finalmente las escaleras quedando más pequeña que él—¿Quieres tomar algo?, he ... yo he ...

A little bit | h.sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora