Luego del almuerzo con todos los jugadores, el presidente y todo el ejecutivo de la selección, nos llevaron a cada quien a su casa.
Mario y yo bajamos en la mini mansión que él tiene en München, no era una mansión pero parecía por eso digo mini; su casa es bastante hermosa para ser de un hombre que es futbolista. Entramos y me quede sorprendida por los buenos gustos que tiene Mario para decorar.
- ¿Te gusta? - pregunto
- Me encanta; tu casa es hermosa - voltee a verlo - No parece tuya - reímos ambos
- Si, me lo han dicho muchos - dijo
- Y, ¿cuál es mi habitación? - pregunte
- Sígueme - dijo y me ayudo con mis maletas. Subimos las escaleras y había un pasillo con varias puertas - Esta es tu habitación - dijo y nos acercamos a una puerta color blanca - Es la de huéspedes - abrió la puerta - Pero sé que te sentirás cómoda - era una gran habitación, para ser de huéspedes; tenía una cama normal, una cómoda con espejo, un pequeño clóset y un escritorio para poner una lapto - ¿Qué te parece? - pregunto y voltee a verlo
- Me gusta. Gracias - dije y le sonreí
- De nada. Te dejo para que acomodes tus cosas - dijo abriendo la puerta
- Ok - dije, salió y se fue.
Comencé poniendo las maletas encima de la cama y comencé abrirlas, fui sacando ropa por ropa para irlas acomodando, las clasifique y abrí el armario, estaba bien para toda mi ropa y zapatos. Puse las blusas y los vestidos en ganchos, los pantalones y shores los doble y los puse en las gavetas que estaban debajo y los zapatos en un estante que era especialmente para ellos. Cerré el armario y puse las maletas en una esquina. Agarre mi iPad y la puse en el escritorio junto con mi pequeño bolso de lado. Saque mi teléfono del bolso y hable con mis padres.
Termine de hablar con ellos y fui al baño. Quite toda la ropa que traía y la deje encima del lavamanos. El baño era blanco con azul claro, tenía mármol en el lavamos y una tina mediana. Cerré la puerta con seguro y entre a la tina. Abrí la ducha y deje que el agua recorriera todo mi cuerpo. Cerré la ducha y lave mi cabello y luego mi cuerpo. Saque todo el jabón de mi cuerpo y el shampu de mi cabello para luego salir con una bata que tapaba mi cuerpo y una toalla enrollada en mi cabello. Agarre mi ropa sucia y la lleve en mis manos. Abrí la puerta y Mario estaba esperando afuera.
- ¿Tanto me demore? - que se note el sarcasmo
- Un poco - dijo riendo
- Ok - dije - ¿A qué hora es la cena? - pregunte
- A las ocho. Tienes tiempo para arreglarte y demorar lo que quieras - dijo y río un poco
- Payaso - le golpe el pecho y lo empuje adentro del baño para yo salir. Amaba sus estupideces, es que él es perfecto, todo él es perfecto.
Llegue a mi recamara y puse la ropa sucia en una cesta que estaba en una esquina del cuarto. Busque entre mi clóset; encontré el apropiado y los tacones que combinaban. Agarre el vestido, los tacones y un bolso de manos del color de los tacones y, los puse encima de la cama de sabanas color crema. Cerré el clóset y busque una panty y un sostén. Agarre la combinación perfecta, azul real, desde el sostén hasta el vestido; excepto los tacones que son beish al igual que el bolso de manos.
Busque mi secadora y mi rizadora en la gaveta del escritorio y las conecte al enchufe cerca de la cómoda. Quite la toalla de mi cabello y seque un poco mi cabello. Luego quite la bata de mi cuerpo y me puse el sostén y la panty y me volví a colocar la bata. Mientras la secadora y la rizadora llegaban a la temperatura, fui al baño a dejar la toalla. Toque antes de entrar y puse mi oído en la puerta a ver si Mario estaba. No escuche nada y entre. Efectivamente no había nadie, deje la toalla en el pechero y salí.
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Llévame Despacio (Mario Götze)
FanfictionEl amor de una fan es el más real pero el amor de una amiga incondicional es el más fuerte.