El cielo lleno vida rodeaba toda la capital por no decir todo el mundo donde ahora la pareja recién resucitada estaba (Si, los protagonistas llegaron a la capital corriendo). Nada fuera de lo común, el típico mundo de fantasía, jóvenes aventureros, estudiantes a hechiceros, razas distintas, coexistiendo entre ellos, etc.
- Espera, espera maldita sea (Jadea de cansancio). Más allá de que no se como carajos, sigues con energía no se porque quieres matarme Karómi.
- ¿En serio? Tal vez golpearte la cabeza, te hará recordar porque estoy así.
- Mira, estamos en un lugar que escapa de lo que conocemos como casa. Estoy cansado y me está dando hambre, perdón por alejarte de tu amado "señor", pero nada bueno pasara si me logras matar. Recuerda estarás sola. Lo único que podemos hacer es aceptar está nueva oportunidad y ayudarnos entre nosotros para sobrevivir.
La mirada seria de Alejandro y la mirada de odio de Karómi, se cruzaban entre si mientras un silencio mental entre ambos llenaba su propia atmosfera. El aire de alrededor, se sentía espeso y había tanto silencio como para escuchar a un pájaro cantar a lo lejos en los bosques (recordemos que ya están en la capital). Karómi empezó a calmarse y poco a poco asimilaba la situación. Seguía molesta, pero incluso ella sabía que eso no resolvería nada.
- Bien pero no cuentes conmigo para nada, estas só......
- ¿Preferirías, vender tu cuerpo todas las noches y vivir como una armera?
- ¿Podrías dejarme terminar? Mira incluso si te odio y quisiera abandonarte, ambos saldríamos perdiendo. Somos unos renacidos, sin identidad, familia y siquiera conocemos el idioma de estas tierras.
- De hecho, estoy seguro de que de eso se encargo el tipo de arriba. (Habla de Dios obviamente)
- (Susurrando) Callate, y por último no tenemos un sólo centavo. Sep a pesar de que pase tanto tiempo muerta, aún recuerdo como se mueven estos mundos.
El silencio mental de ambos fue interrumpido por un grito alterado cerca a las puertas, al parecer alguien estaba siendo asaltado o atacado. En fin el silencio se fue.
— ¿Quieres callarte? Estamos conversando. Ni en este mundo respetan carajo.
— Insensible de. . . . Apresurate y vamos a ayudarla.
— ¿Para que? Bueno, podríamos sacarle algo de dinero en vez de ellos (risa leve).
— (Gritando) Sólo vamos maldita sea.
La pareja, entró a la capital, la cual era protegida por un muro de 4 puertas, norte, sur, este y oeste. Además de haber guardianes en cada puerta. En fin lo típico de un mundo de fantasía (no soy muy creativo con estas cosas).
— Esperen, identifiquense.
— Ella es Karómi y yo alej. . . . .
Alejandro paro la frase bruscamente y pensó en el hecho de que ahora era alguien nuevo. Eso significaba, nuevo nombre, nueva edad y nuevo pasado. Aunque lo segundo y último prefirió obviarlo.
— Somos Karómi y Alex (Si así de creativo soy con mi propio nombre)
— ¿Son visitantes o comerciantes?
— Lo que sea en ambos casos deseamos entrar, por favor.
— ¿Cuáles son las razones?..
— ¿En serio te pagan por acosar?
— Hijo, en ésta capital a pesar de ser inclusivos, no podemos aceptar a cualquiera. De ser así, habrían muchos problemas, aún más de los qué ya hay con la delincuencia.
Karómi bruscamente tomó el papel de Alex y hablo por el.
— Escuchame, mientras perdemos el tiempo, ahora mismo hay alguien por ese callejón que está siendo robada o incluso atacada. Dese prisa y. . . . .
— ¿Y que? ¿Acaso eso nos incumbe?
Con un rostro sorprendido por la respuesta del guardián, Karómi se quedó en silencio y paralizada. Era más que obvio que esto no era un mundo de fantasía al 100%. Aquí y en su viejo hogar, las cosas eran iguales, en ambos casos bailaban con su propio pañuelo y si alguien olvidaba el suyo, se hacían los locos.
— Lamentó el comentario de mi compañera señor guardián, ahora detallamos todo al pie de la letra así que preste atención. Somos Karómi y Alex, tenemos 18 y 17 años, vinimos aquí porque nuestro hogar fue asaltado por sectarios, todos nuestros amigos y superiores, murieron. Tenemos miedo y sólo queremos empezar desde cero.
Hubo un silencio en la atmósfera que rodeaba a las 2 parejas. Finalmente el guardián, abrió los ojos y miro los jóvenes "huérfanos"
— Entiendo, vienen de un orfanato, está bien. Pueden pasar, no hagan desorden y por favor no se metan en problemas. (Voz sería) Los caballeros nobles no resuelven los problemas con palabras.
Con una mirada fría y fija Alex asintió a las palabras del guardián, quien a la vez dio la orden de abrir las puertas. En si lo que hacían era abrir la rendija de seguridad, ya qué la puerta en si ya estaba abierta. La pareja, entró pasó por pasó hasta que oficialmente ya estaban en "Tierra Sagrada" la capital más importante de todo el mundo.
— ¿Qué demonios haces? Deja está estúpida cara de idiota y recuperate, no olvides porque estamos aca. Una persona está siendo acosada en esos callejones. ¿Quién sabe si vive o ya no? Vamos, nuestra primera misión del día acaba de empezar.
Karómi recuperada de la conmoción gracias a las palabras de Alex, una seria sonrisa y asintió con la mirada, después de todo siempre se puede confiar en tu compañero, aunque este te halla traído en contra de tu voluntad.
— Bien. . . .
Corriendo hacia aquel callejón. La pareja noto que habían escuchado el grito a pesar de que estaban afuera de los muros.
— Alex ¿Y si sólo alucinamos haber escuchado algo? Digo, este callejón no está tan cerca a la muralla que digamos y para rematar, nisiquiera los guardias lo hayan escuchado probablemente, además no veo a nadie acercarse a ese lugar
Caminando cada vez más cerca al callejón Karómi cuestionaba una y otra vez el hecho de haber escuchado una voz alterada.
— Mira. . . . .
Finalmente entraron a lugar causante del grito que ellos oyeron incluso afuera de las murallas. Era una chica de cabello marrón, de orejas en punta y pálida. Estaba desmayada, al parecer habían llegado tarde.
— Oye ¿estas bien? Karómi, deprisa.
— S. . Si, vamos.
Alex llegando primero hacía el cuerpo de la chica de cabello castaño, sujeto su cabeza y puso su mano en su pecho.
— (Gritando) Maldito pervertido, no es momento para esto. ¿Quieres violarla o algo así?
— (Gritando)¿Violarla? ¿Estas enferma? Mira sólo reviso que aún vive, su corazón está latiendo lo cual dicta que sólo se desmayó. Además mira, ya esta despertando.
Karómi y Alex vieron como la hermosa chica de orejas punteagudas abría los ojos, unos ojos celestes como el cielo, brillaban incluso en la sombra de aquel callejón cubierto de cajas y cartones con polvo y musgo.
— Oye calmate ya estás a salvo
La chica de repente pone una cara de miedo y empieza a gritar.
— Noo. Sueltame, no quiero por favor vete. Por favor.
Nota: Sorry por la carencia de imágenes, no se dibujar LOL
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ESTO NO ES UNA AVENTURA DE FANTASÍA
AdventureDe todo lo que puedes tener en tu próxima vida eliges molestar a otros.