Silencio. Tensión.
Esas eran las dos cosas que eran palpables en el salón una vez entraron. Lo que una vez fue un ambiente relajado y bullicioso lleno de amigos y compañeros riendo, bromeando o simplemente conversando se quedó congelado una vez la pareja atravesó sus puertas.
Momo realmente no quería mirar a nadie. Katsuki menos.
Ella, tan sutil como pudo, beso la cabeza de su compañero bañandole con un poco de su aroma, a pesar de que hacer eso le daba nauseas y ganas de vomitar, antes de empujarlo suavemente en dirección a su banco.
El rubio, suprimiendo toda su repulsión por la acción cometida, caminó hacía donde fue dirigido fingiendo que se sentía cómodo en su propia piel bajo la atenta mirada de todos.
Momo sonrió cortés en dirección general antes de sentarse adecuadamente en su puesto.
Todoroki solo miro a la rubia.
Kyoya solo lucía herida.
Y Midoriya, bueno, él, que sabía todo lo que en realidad pasaba, solo pudo dedicarle una leve sonrisa al omega frente a él.
La rabia lo llenó.
Hubo una explosión sobre el banco del de pelo verde.
Un profesor entro por la puerta.
Y cómo por arte de magia, todo volvió a su curso normal.
Solo que ya nunca sería normal.
Ahora esa no era nada más que una ilusión.
Una que retrasaba la verdad junto a la realidad.
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Apariencia
SpiritualCuando tu mundo gira en torno a las tres clases sociales: Alfa, beta y omega; y más encima vas a una prestigiosa escuela para ser héroe como la U.A para Momo no fue sorpresa que la comprometieran con algún omega que fuese fuerte y que pudiera de est...