Capitulo 11: El Último Recurso.

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Todos festejaban, Vieri se acerca a Carla y lo hace sonriente. Ella recibe un impulso de su ser, a lo que decide besarlo. Nunca antes ella había hecho algo así.

Laura se reencuentra con su querido compañero de toda la vida Jano. Ella nunca abandono su cariño por él.

Jhon se me acerca, me felicita apoyando su mano en mi hombro sonriente. Ganamos me decía, pero mi cara era totalmente diferente. Jhon observa eso, el se percata dejando lastima con una mirada.

Zeus se acerca a mí, el me mira sonriente, él sabía que su padre me eligió. En el no habían sentimientos erróneos, solo honor. Charlamos sobre lo que vi y lo que viví. Mi entrenamiento fue increíble gracias a aquellos que me apoyaron. Pero era momento de decirles a todos.

Inmediatamente me elevo a una posición donde todos me vean, hablo con los que me rodean, les digo la verdad.

Luctator:- Triadas, mis camaradas. He usado mucho poder para traerlos a la vida, con el Olimpo destruido la fuente base de poder no existe. Debilitados vencimos pero ahora hay un enemigo más poderoso ahí arriba. Caos ya está terminando de reunir fuerzas suficientes para reiniciar nuestro universo. El Eter que Urano me ha concebido es el único poder que puede hacerle frente. El único poder que en su origen porta la gracia para enfrentarse a la oscuridad. Cada uno de ustedes doce olímpicos porta una parte del Eter. La única forma de vencer es unir ese poder a su punto de origen y así como Urano lo portó, mi destino terminara con esto.

Todos bajan la cabeza, todos sabían que sucedería si me daban su poder. Aparte de perder su poder divino, también perderían todas posibilidades de reconstruir el Olimpo.

Por mi parte, una vez teniendo el Eter, me arriesgo a que mi cuerpo no lo soporte. Selene se aproxima para hablarme. Ella es la única Titán que sobrevivió ya que ella porta uno de los tesoros sagrados que la mantuvo con vida.

Selene:- Tendrás que llevarte mi tesoro sagrado. Te ayudará.

A lo que le respondo decidido.

Luctator:- No, debes tenerlo vos. Debes usar ese poder para proteger a la gente en la tierra. Cuídalos a todos. Tú siempre portaras la voluntad lunar.

Mientras camino observo a todos a mí alrededor, cada uno entendía lo arriesgado que es esta última misión.

Doce Olímpicos:- Ofrecemos nuestra gracia divina, otorgada por Eter residente en nuestros cuerpos, para ser entregada a nuestro guía. El líder Olímpico Luctator.

Cada estrella comenzó a desprender su aura y al mismo tiempo comenzando a opacarse. Mi estrella se ilumino a gran escala.

El círculo formado por los once dioses que me rodeaban comenzó a brillar. Cada dios desprendía una luz encandilante. El mundo comenzó a sentir temblores, los cambios climáticos que había eran increíbles. Al mismo tiempo la biblioteca de Vzkfraget comenzó a incendiarse.

El viento era demasiado fuerte, la luz que emanaba mi cuerpo era encandilante, los fuertes temblores se hacían notar. Mi poder se empezaba a equiparar con el de Urano.

Cada vez me costaba más y mas estar de pie, de soportar tal carga. Mis brazos se tiñen de líneas de energías de color blanco que llegaban hasta mis hombros. Ya estaba listo, cada Dios se siente más debilitado. En el centro estaba yo, desprendiendo rayos. Selene estaba impresionada con mi poder, comparado con el de antes que usaba un 12% del Eter, ahora uso un 144% de su poder.

Mientras avanzo a mi posición y despidiéndome de algunos, se acerca mi amigo Jhon. El me pregunta el por qué no revivo a Paola con mi poder. Yo lo miro sonriente y no respondo. La verdad es que solo puedo traer a la vida aquellos que posean una estrella astral.

Mis ojos veían la posición exacta para elevarme. A lo que parto a mi destino. Jhon observa cómo me alejo caminando y dice al mismo tiempo.

Jhon:- Contamos contigo.

Poco a poco me fui acercando para ir directo a Caos. Mientras lo hacia mi mente se llenaba de recuerdos de todo lo que pasó, todo por lo que pasé.

Al situarme en el lugar cada uno de mis camaradas del Olimpo, junto con los humanos, me observaban. Las últimas palabras que les digo les revelan muchas de sus dudas también.

Luctator:- Entiendo que cada uno tuvo que ascender para ser un Dios, pero aun que anularan sus sentimientos, estos no desaparecieron. El Eter que estaba en ustedes les daba parte de esos sentimientos, por eso recibían ciertos impulsos. A mí me costó comprenderlo. Juro que con este poder acabare con el mal, erradicare la energía oscura.

Al instante uso un gran impulso para elevarme del suelo y partir a enfrentarme con Caos. En el camino destruí el suelo y abrí cada nube por la que pasaba. A mí alrededor comenzó a aparecer energía eléctrica y luces de variados colores. Me estaba yendo al cielo de lo que quedaba de la Tierra Prometida, donde se encontraba Caos.

La Tríada de Héroes II - La Guerra Entre TitanesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora