Capítulo 40 | Blanco

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-No hay nada que no haría lo estar contigo, caramelo. -Me dijo el abuelo al teléfono, ha estado tan ocupado con su negocio que no había querido molestarlo, sé cuan duro a resultado la muerte de Antonelle para él que yo solo he estado centrada en mis cosas y me siento culpable. -Te digo que estoy bien, Lev. De verdad que charlie y yo lo llevamos con maravilla, solemos hablar de ella siempre. Es como sí él estuviera conociendo a una Antonelle que nunca vio y yo a una Leti que nunca conocí.

Me río agachando la cabeza y tocando el collar que me había obsequiado en mi cumpleaños, la extrañaba con locura ¿Que seria de mí sin aun estuviera aquí? Probablemente no estaría casada con Casey.

-Me he estado planteando algo. -Hablo al cabo de un rato.

-¿Ya te vas a divorciar tan de prisa?

Evidentemente bromea, por lo que no evito soltar una risa negando.

-Por Dios, Scott. Eres único. -Me responde con otra risa y yo suspiro. -Creo que iré a la universidad, digo, si no puedo solo hacer todo en línea...

El abuelo suelta un grito al auricular que tengo que separarlo.

-¡Lo sabía! ¡Charlie, Lev va a ingresar a la universidad me debes veinte dolares!

Tapo mi boca riéndome, hubiese pagado una fortuna por ver eso con mis propios ojos.

-Eso es lo mejor que he escuchado, caramelo. Siempre quise lo mejor para ti. Esa vida normal de adolescente que te mereces...

-Bueno abuelo sabes que eso ya no es posible...

--Joder lo sé, solo que me alegra que lo quieras retomar. Lev se que esa vida tuya no será fácil pero confío en que ese muchacho pueda mejorarlo. -Dice y niego aprovechando que ni puede verme.

Casey tiene tantas facetas que no se cual de ellas quiera hacer de mí alguien mejor, tal vez estoy aquí para hacer de él mejor y no lo contrario. Eramos exactamente iguales por eso ambos podíamos arreglarnos mutuamente.

-No sabes lo complicado que es estar con alguien como Casey.

-Lev. -Me dice con esa voz. -Nadie ha dicho que los matrimonios sean sencillos... Si no entonces nadie se casaría, pero están jóvenes, solo vivan su matrimonio como un simple noviazgo nadie dice que tenga que ser tan complicado. Debes relajarte, caramelo, tu sabes lidiar con más cosas que cualquier persona.

No sabía como demonios el abuelo tenía siempre las palabras correctas pero me alegro de aun tenerlo en mi vida, sé que tiene razón con respecto a ese tema del matrimonio yo solo no sé lidiar con la vida tan complicada que me hace llevar. Está bien estar enamorada lo que no está bien son los secretos y lo increíblemente difícil que me lo hace cuando me entero de una nueva noticia.

-Gracias abuelo, siempre estás cuando te necesito.

-Joder y a mi me alegra estar para escuchar como lo admites. -Se ríe sacandome una sonrisa. -Te amo, Lev. Y siempre estaré ahí. Ahora solo necesito regresar al trabajo ¿De acuerdo? Solo... No te metas en problemas.

Entonces no sería yo, Scott.

-Vale, abuelo. Solo cuidate ¿Quieres?

Él me dice que está bien y yo después de joderlo un poco más finalmente cuelgo y alzo la mirada al frente, estaba sentada frente a la zona de prácticas. Había dominado mantener el arma firme en mis manos pero aun no le daba al punto exacto que debía darle, es complicado pero se siente bien la adrenalina de tener una arma entre tus dedos. Tal vez mi mente narcotráfica siempre ha estado ahí y yo solo debía sacarla.

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