Continuamos con la historia...
Narra Adrien:
No podía creerlo. Ella estaba parada justo en frente de mi a escasos metros de distancia. Mi corazón se aceleró y mis mejillas se tiñeron de un rojo intenso. No podía creerlo. Tuve que desviar mi mirada y agitar mi cabeza un par de veces para saber que no se trataba de un sueño.
Tragué saliva con pesadez antes de volver a levantar la vista. Y entonces los vi. Sus hermosos ojos azul zafiro, observándome...
Adrien: e-e-es e-ella.. –tartamudeé estupefacto
Luka: si, lo sabemos Adrien –me respondió
Nino: cielos, viejo –rio de lado- de verdad que estás muy prendido de esa chica
Adrien: n-no es a-así.. –respondí nervioso
Luka: ni siquiera puedes hablar coherentemente –me respondió
Adrien: n-no.. –insistí mientras lo miraba
Nino: no deberías dejar pasar esta oportunidad, nosotros nos adelantaremos –me volvió a guiñar el ojo
Adrien: ¿qué? –lo miré
Luka: exacto –dijo; ahora lo miré a él- demuéstrale todos los encantos que tiene el joven Agreste –también me guiñó el ojo
Adrien: ¿pero qué...?
Luka/Nino: ¡¡ADELANTE!!
No pude terminar de hablar. Ellos me empujaron al frente con todas sus fuerzas y por el impulso avancé un par de metros al frente.
Pero a veces soy algo torpe y justo hoy tenía que salirme ese lado. Me tropecé con un saliente del pavimento y caí al piso sin piedad, haciendo un escándalo. Solo maldije internamente a mis compañeros por lo que hicieron.
Estando en el pisó miré hacia donde ellos estaban, obviamente ya no se encontraban ahí. Los divisé alejándose del lugar riendo animadamente, me las pagarían.
X: ¿estás bien? –escuché decir a una voz femenina frente a mi
Adrien: ahh.. –volteé al frente- si, solo..
La miré. Era la chica del violín.
Se encontraba inclinada frente a mí, extendiendo su mano para que la tomara y ayudarme a levantarme. Sus ojos, ¡wow!, sus celestes ojos me miraban fijamente. No pude evitar volver a sonrojarme con violencia. Había hecho el ridículo frente a ella y ahora estaba frente a mí, ofreciéndome su ayuda.
Marinette: ¿de verdad te encuentras bien? –me preguntó preocupada- ¿no te lastimaste?
Adrien: no.. yo.. yo solo –tartamudeé de nuevo, ¿por qué hacía eso?
Marinette: entonces, vamos –me volvió a ofrecer su mano- levántate
Ella sonrió. Sonrió tan dulcemente que no pude evitar contemplar su rostro con vehemencia. Era perfecta.
Bajé la mirada y vi su mano. Con algo de nerviosismo la tomé y me levanté del suelo. Estaba apenado.
Adrien: gracias por ayudarme.. –dije una vez de pie
Marinette: no fue nada.. –volvió a sonreír- tu.. tu estabas en el concierto, ¿verdad? –me preguntó curiosa
Adrien: eh.. si.. –respondí sobando mi nuca con nerviosismo- estaba en primera fila
Marinette: si.. te recuerdo.. –respondió
Acompañó su respuesta con una tímida sonrisa, no pude evitar contemplarla aún más.
Marinette: ¿cómo te llamas? –preguntó
Adrien: Adrien.. Agreste.. –respondí con una sonrisa- y tú eres Marinette, ¿verdad?
Marinette: así es.. –volvió a sonreír
Por un momento nos miramos a los ojos sin decir nada más. El momento era perfecto.
X: ¡ey, Marinette! –una voz la llamó
Marinette: ¿uhm? –volteó
Ella volteó e igual hice lo mismo. Uno de sus compañeros la había llamado y le hacía señas con la mano para que regresara con ellos.
Marinette: oh.. son mis compañeros.. –dijo
Adrien: te llaman.. –dije
Marinette: así parece.. –dijo algo desganada
Parecía como si no quisiera irse y en el fondo yo también esperaba que no lo hiciera. Me acaba de acercar a ella, no como hubiera querido, pero al menos estábamos hablando. La miré.
Adrien: ¿te vas? –pregunté
Ojalá que no, por favor.
Marinette: talvez.. –dudó- ¿me acompañas?
Adrien: ¿qué? ¿a dónde? –pregunté confundido
Marinette: con ellos, para ver que quieren –respondió
Adrien: eh.. claro –sonreí mientras me sonrojaba
Marinette: bien –sonrió más
Esto parecía como si me fuera a presentar a sus amigos. Creo que me estoy adelantando, estoy imaginando cosas que aún ni han pasado..
Nos acercamos a sus compañeros, todos muy atentos a mi presencia, eso me incomodaba un poco.
Kim: ¿qué sucede? –preguntó curioso- ¿quién es tu amigo?
Adrien: ho-hola.. –respondí- soy..
Max: Adrien, que gusto verte –me saludó
Al menos tenía un conocido en ese grupo.
Adrien: hola Max –respondí
Nathaniel: ¿lo conoces? –ahora habló él
Max: es un compañero de la universidad –dijo sonriendo
Adrien: si –respondí- soy Adrien, un gusto. Estuve en el concierto, sé sus nombres
Marc: eso es de mucha ayuda –rio
Marinette: ¿qué sucede, Kim? –preguntó a su compañero
Kim: ya nos vamos –respondió- ¿nos acompañas o...?
No terminó de hablar, solo alargó su pregunta mientras me miraba. Ella solo rio.
Marinette: voy a dar una vuelta por los puestos –dijo mientras pasaba un mechón de su pelo tras su oreja- ustedes adelántense
Yo solo la miré cautivado ante esa simple pero gratificante acción. Un sonrojo se formó en mis mejillas.
Kim: ya veo.. –respondió- te veremos luego
Max: nos vemos Adrien..
Adrien: si, nos vemos.. todos.. –tartamudee
Una vez los vi alejarse me puse nervioso. Me habían dejado solo con la chica más hermosa y talentosa del lugar, no podía controlarme.
Quería hablar, decirle algo, cualquier cosa; si quería ir a pasear entre los puestos o por algo de comer o solo ir a sentarse, pero no articulaba ninguna palabra por mi boca, y eso me apenaba más, que vergüenza.
Al final ella habló.
Marinette: ¿quieres.. acompañarme?
Créditos de la imagen: Sach_cosan
Aquí el segundo capítulo de esta historia. Me está gustando mucho como va quedando, incluso más que la versión "original" que ya tenía de esta historia. Si les da curiosidad, no era tan tierna, MLB saca mi lado romántico.
Luego continuó con la historia. Denle Amor y compartan :)
Visita la página: @Miraculeros en facebook
ESTÁS LEYENDO
La chica del violín (Temporadas 1 y 2)
FanfictionHola, soy Adrien Agreste, un joven estudiante en una de las mejores universidades de París. No por ser pretencioso, pero es para que sepan, que gracias a esto, puedo contarles mi historia. La historia de cómo me enamoré de la mujer más bella, dulce...