Donde El Tiempo Se Detuvo

Capítulo 30: Salvación

(...)

Narra Paula

__<<¡No quiero morir!>>- pensé con el corazón palpitante- pude detallar por unos segundos a el asesino que se posaba frente a mi, permanecía inmóvil, no podía percibir sus gestos, pero sentía su mirada clavada en mi, como esperando el momento oportuno para atacarme- Llevaba puesto un abrigo de cuero negro, muy ancho, parecía unas tallas mas que la de su cuerpo, unos guantes de seda igualmente negros hacían juego con su atuendo, acompañado de unas botas brillantes negras igualmente, lo que me llamo mas la atención era lo que utilizaba para cubrir su rostro, que se encontraba cubierto por un manto traslucido negro, una tela muy fina que le llegaba hasta la cintura, en su rostro una especie de mascara de apariencia horripilante- esto me hizo poner los pelos de punta-

__¡No!- suplique sollozando- viendo como se incorporaba hacia mi con intenciones de hacerme algo- ¡Auxilio!- volví a gritar apoyándome con mis manos en el frío pasto del bosque- el asesino cubrió mi cuello con su gruesa mano- pude notar como iba aplicando mas fuerza y me iba faltando el aire- ¡Déjame ir!- suplique ahogando mis palabras- Ya sus manos apretaban mi mandíbula- me levanto con esta acción del suelo y me lanzo contra el tronco del árbol donde hace unos instantes recuperaba fuerzas- 

__Su rostro quedo a unos cuantos centímetros del mio- Podía notar como su respiración iba en aumento, se podía percibir la adrenalina que le causaba ese momento- De allí vi dos agujeros que se notaban en su mascara, eran redondos y negros, quien iba a pensar que detrás de esa mascara estaría el rostro de un asesino en serie- 

__Su mano libero mi cuello- de inmediato mi mano masajeo mi cuello- tuve la oportunidad perfecta de atacar a este maldito asesino- En cuanto se dio la vuelta y quiso agacharse para tomar un hacha que se encontraba tirada a unos pasos de el, con mis dos manos lo empuje con todas mis fuerzas, pude ver como este perdía el equilibrio y caía desplomado en el suelo- fue el primer instinto que se me vino a la mente-

__¡Auxilio!- empece a gritar al tiempo que me echaba a correr dejando atrás a aquel asesino que sin pensarlo se levanto- No quería voltear hacia atrás, solo quería correr y correr hasta salir de este bosque- Ya lograba divisar de cerca la estructura de la Mansión, podía oler la salvación- 

__¡Ayúdenme, por favor!- pedía a suplicas tras por fin salir de ese bosque, que para mi parecía nunca acabar- ¡Alguien, ayúdenme!- gritaba acercándome al jardín trasero de la Mansión- mis ojos veían a todos lados, parecía que saldrían disparados, me detuve y mi respiración iba en descenso-

__¡Paula! ¿Que te ocurre?- gritaba la voz de una mujer detrás de mi- Voltee y me alegre tanto de ver a alguien conocido, era Ellen quien corría hacia mi preocupada-

__¡Ayúdame Ellen!- logre decir articulando mis palabras que parecían no querer salir de mi boca- ¡Mataron a Patrick!- solté sin mas, mientras me unía a Ellen en un cálido abrazo-

__¿Que dices Pau?- me pregunto sin saber porque le decía todo eso, que parecía increíble- ¡Alguien nos ataco en el bosque!- grite soltándome de su agarre y dejando escapar lagrimas de mis ojos- 

__¡Viene detrás de mi!- solté en un hilo de voz recordando me que encontraba hace unos instantes en una persecución- voltee hacia el bosque de manera frenética, temía que viniese- No vi nada, solo las grandes copas de los arboles y una que otra ave tomando vuelo-

__¿Quien los ataco?- me pregunto soltando chillidos mientras sus manos cubrían su boca- 

__El mismo sujeto que ataco a los chicos en el hospital y el que viste aquella noche en la cocina- le dije queriendo que ella se hiciera la idea de quien fue-