Un Simple Sirviente [CANCELADO] (YAOI/GAY)

•~Capítulo 7~•

Capítulo 7 —
Mi pasado.

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Mi padre era un marinero inglés, o esa es la escusa que me dice cuando le pregunto el porqué de mi nombre. Mi madre al contrario es japonesa, la historia cuenta que cuando un barco inglés desembarco en los puertos de un pequeño pueblo de Japón. Un hombre inglés buscaba dónde pasar la noche y fue donde se encontró con una hermosa mujer japonesa. Y aquí amigos comienza el drama. Los padres de aquella mujer japonesa se oponían a este romance. Pero como se esperaba, el amor triunfo y nació la aberración que soy yo.

Soy de una familia humilde, muy creyente de Dios así que solíamos ir muy a menudo a la iglesia que quedaba cerca de nuestra casa. Recuerdo que en ese entonces yo tenía 6 años de edad, solía jugar con una niña por un año mayor que yo. Pero no recuerdo su rostro o su nombre, pero si recuerdo que su cabello era rizado y rubio. Brillaba con el sol.

Recuerdo un día soleado de verano. Me encontraba en el patio delantero de la iglesia jugando con ella con la pelota que me habían regalado días atrás para mí cumpleaños. El juego era simple solamente era lanzarnos la pelota. Pero hubo un momento donde la lancé muy fuerte y llegó hasta la cerca de la entrada. Fui a buscar mi pelota, en cuanto estuve cerca un hombre apareció a mi lado y la tomó antes que yo. Él la extendió hacia mí, no conocía a éste hombre de cabellos verdes y roja mirada, así que dude un poco en tomar mi pelota. En cuanto la tuve en mis manos corrí hacia donde el padre de la iglesia, que se encontraba en las puertas de la entrada a esta, y me escondo detrás de sus piernas junto a la niña. No recuerdo de que hablaban. Pero a esa niña no la volví a ver después de eso.  

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Me quedé admirando el paisaje nocturno del lugar. La limusina había desaparecido del sendero hace alrededor de unos 15 minutos aproximadamente. Suspiré pesado y entre en la mansión, fue donde algo brillante estaba en el suelo. Era una pinza para el cabello. Puede que sea de Yui. Se lo guardaré hasta que regresen.

— Bien — Dije sonriente llevando mis manos a la cadera— Hora de ver mejor a este laberinto.

Ahora que lo pienso, ¿Dónde está el resto de la servidumbre?, ¿Vacaciones?
Bah, no importa. Así reviso mejor este lugar.

Pero en cuanto subí la escalera, el mundo me demostró lo cruel que es conmigo.

— ¿¡Porqué me odias maldito laberinto llamado mansión!?— grité alzando los brazos hacia el techo al tiempo que me arrodillaba. Haber si así me escucha el dios del laberinto.

A la mierda con todo. Entraré en la primera puerta que encuentre en este maldito pasillo.

No demore en encontrar la primera puerta. Estaba sin cerrar así que entre. Déjenme decirles que tienen un bonito baño aquí. Cerré la puerta y continúe en la búsqueda de otra puerta. La cual tampoco demoré en encontrar. Entré en la habitación, en el centro de esta se encontraba un piano, unos asientos forrados en cuero negro y un estante que me daba igual lo que había ahí.

— Es un piano muy bonito — Susurré cuando me acerqué a él.— ¿De quién será este piano? O ¿Quién lo toca?

Me senté dispuesto a sacar a mi Mozart y Beethoven interior.

— Hora de hacer música.— Dejé caer mis manos en las teclas del piano sacando un grito desgarrador de éste, suplicando que termine con su miserable vida— nunca pensé que tocaba tan feo.

— ¡Qué melodía más horrible!— la voz de una mujer me hizo ponerme de pie para después disimular que limpiaba el piano.— ¿Quién eres? ¿Y que haces en éste cuarto?

Llevé mi vista hacia la mujer de negra vestidura que se encontraba en el balcón de la habitación. Esa cosa no la vi antes. Me acerqué a ella para poder presentarme.

— Me llamo Taylor señora, soy un sirviente de aquí— Dije haciendo una reverencia hacia la mujer de largos cabellos morados.— ¿Quién es usted?

— Mi nombre es Cordelia— Dice con una bella sonrisa— Soy la madre de los trillizos.

Oh, Adiós a mis ganas de coquetear.

— ¿Se refiere a Laito, Kanato y Ayato?— Entonces ella es la mujer del cuadro. Es más hermosa en persona.

— Si, Ellos son mis hijos, Ahora haz el favor de retirarte.— Me ordenó.— Quiero estar en soledad por el momento.

— Si, Señora.— Hice una reverencia y me retiré de la habitación cerrando la puerta detrás de mí.

No tenía idea de que las madres de los chicos vivían aquí con ellos, será mejor que tenga cuidado en las habitaciones que entro.

¿A qué lugar podría ir donde no se encuentre ninguna madre de los chicos?

¡Oh! Ahora que recuerdo. Subaru no me dejó ver ese montón de ropa. No creó que haga daño dar un vistazo.

Después de abrir muchas puertas, y que el 90% sean de baños, Pude dar con la desgastada puerta de Firulais. Tomé el pomo he intenté abrirla, pero estaba con llave.

Me senté frustrado ante la puerta pensando en posibilidades para poder abrirla. ¿Una patada ninja? No, ya me rompí el pie y se notara demasiado que intente entrar en su habitación. ¿Por la ventana? Esas porquerías de ventanas no se abren, además que ni siquiera sé en qué piso estoy. Llevé inconsciente mi mano al bolsillo derecho donde sentí la pinza que encontré tirada en la entrada. Una sonrisa maliciosa apareció en mi rostro.

— Hora de ser Hacker.

No demoré mucho en abrir la puerta. Solo le di un par de vueltas y listo. Me dirigí inmediatamente hacia el montón de ropa de Subaru.

— ¿Qué ocultas aquí, Firulais?.

Para no dejar tan desordenado el lugar comencé a ordenar su ropa en el armario. No quedaba mucha ropa por ordenar, pronto daré con el tesoro oculto en ropa.

— ¿Es en serio, Firulais?— Susurré decepcionado. Solo era un ataúd. ¿Cree que le voy a criticar por tener un ataúd como cama? Eso hoy en día es muy normal.

Abrí el ataúd para ver su interior, dentro está forrado de color vino y en un rincón se encontraba el conejo que habia visto antes.

Inevitablemente solté un bostezo, no me acostumbro a los horarios nocturnos, aún más si es mi primera noche despierto. Miento si digo que no me metí dentro del ataúd para darme una pequeña siesta. En cuanto me acomode al lado del conejo dejé una alarma puesta en mi reloj de pulsera para no pasar de largo.

— Bien, son las 11:42 PM— Susurré para mí— que me despierte a las 12:00 AM estoy bien.

Y me dormí.

Hola💚

Editado el 31/03/20

Espero les haya gustado. Dejé la imagen de la habitación de Subaru arriba por qué Wattpad no me dejaba ponerla donde quería :'c

Próximo Capítulo:

Suicidio falso.

Nos vemos.

Karshian_Doll