Un Cliché no tan Cliché

C A P Í T U L O 4

—Pero vaya, si que tengo suerte —dice al momento que se sienta en la cama poniéndose cómodo.

—¿Por qué? —pregunto tratando de no mirarlo tanto, así que me dirijo hacía mi cama para acomodarla y poder acostarme a dormir. Mañana veré a Lian y tengo que estar lo más presentable posible.

Él por su parte se levanta y camina hacia el baño. Intento con todas mis fuerzas no voltear a mirarlo. Falló y me arrepiento al instante.

Se encuentra recargado en el marco de la puerta del baño, de brazos cruzados mirándome, en el momento que lo miró su sonrisa crece. Se está burlando de mí el muy tonto.

Sabe que está muy bueno y es imposible no mirarlo.

—¿Tú piensas andar así? —pregunto tratando de verme seria e indiferente a su hermoso torso desnudo.

—Si —dice sin más.

—¿Perdón? Somos compañeros, ¿sabes? —suelto mirándolo directamente. —al menos ten la decencia de colocarte una playera y un short. Qué soy una chica y no un amigo tuyo.

—¿Qué más da el como ando? —pregunta sin mucho interés.

—Es incómodo, andas casi desnudo. Ah... y desde ya te dejo en claro que no voy a soportar que tengas sexo aquí en mi habitación eh.

Le digo rogando que realmente me haga caso y no lo haga. Sería muy incómodo un día llegar y encontrarlo en plena acción.

¡Ugh! Suelto una mueca de asco y niego con la cabeza ante tal imagen.

Una vez más regreso a lo que estaba haciendo hasta que hablo ocasionando que me tensara por completo.

—Cuando estes toda caliente y me estés rogando para que te coja, te voy a recordar que no lo haré porque tu misma así me lo estás pidiendo.

¿Pero.. ?

¿Y este quién se ha creído?

Lo encaró nuevamente tratando de mostrar en mi mirada toda la rabia que me ocasionó su comentario. Creído será.

Al verme solo fingió mandarme un beso —aún sonriendo el idiota —después se metió al baño cerrando detrás de él.

Mientras tanto me acosté y me dispuse a mandarle un mensaje a Malory para contarle sobre el idiota de mi compañero pero antes de hacerlo me llegó un mensaje de Kilian.

Buenas noches, Sophie. Me alegra mucho que estemos nuevamente los 3 juntos. Hasta mañana, sueña bonito.
11:03 pm.

Al instante apareció una sonrisa boba en mi rostro. No lo pude contener y solté un chillido de emoción al mismo tiempo que abrazaba mi teléfono como si fuera Lian en persona.

¿Por qué es tan lindo? ¡Cielos, si lo había extrañado!

Estaba por contestarle cuando mi compañero salió del baño para dirigirse a su lado de la habitación pero ahora traía una playera puesta. Sonreí para mis adentros.

—Por cierto, ¿cómo te llamas? —quise saber.

—No me digas que estás pensando en buscarme en Facebook, porque de ser así te aviso que no pienso aceptarte, no me gusta aceptar a mis ligues porque después hacen mucho drama con lo que ven —dice, y hace una mueca de desagrado. Se acuesta y veo como se acomoda mirando hacia la pared, dándome la espalda. Y ni siquiera me dijo su nombre.

—Bajate de tu nube que no me interesas en lo más mínimo —dije a cambio.

Lo alcanzo a escuchar reír, más ya no dijo nada más. Decidí continuar con lo mío y buscar la manera de contestarle a Lian. ¡Cielos! Me siento demasiado nerviosa y solo es un mensaje.