Protector - Minjoong

CAPÍTULO 5

Al otro día, cuando ingresaron al colegio los saludó a ambos diciéndoles que los vería en el recreo, Hongjoong parecía completamente feliz, Wooyoung se alegró por eso, pero Mingi dudaba si de verdad lo estaba o solo estaba fingiendo. Más tarde se juntaron en la mesa de siempre.

- ¿Cómo estás hoy? - preguntó Wooyoung.

- Yo bien - sonrió - ¿y ustedes? -

- Bien, te ves contento hoy -

Hongjoong sonrió sin decir nada mientras sacaba una cajita de su mochila y se la extendía a ambos - miren, les hice galletitas -

- ¡Wow! ¿de verdad? - se sorprendió - ¿para nosotros? -

- Claro Woo - asintió, esperando a que las probaran.

- Encima muero de hambre, sos un angel gracias -

- ¿Y por qué nos hiciste esto? - preguntó Mingi.

- Solo tenía ganas de hacer algo por ustedes -

- ¿Por? -

- Porque son mis amigos ¿no? - respondió con ternura.

- ¡Obvio que sí!, Mingi callate y proba dale que están riquísimas -

Mingi hizo caso y probó una de las galletitas que se notaba, Hongjoong había hecho con mucho cariño - me encantan - agradeció haciendo que Hongjoong sonriera de oreja a oreja después de la aprobación del más difícil. 

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A Wooyoung se le ocurrió hacer una salida juntos ese día, fueron a pasar la tarde al río que estaba cerca de la ciudad, hablaron de muchas cosas y compartieron miles de anécdotas, Mingi comenzaba a soltarse un poco, le intrigaba saber más de él.

-  Voy a comprar algo porque ya me dió hambre ¿quieren algo? -

- No gracias - negó Hongjoong amablemente.

- Sí -

- Uf Min, ¿chocolate? -

- Sabes que sí -

- Que raro - rió - bueno, ya vuelvo - Wooyung se fue, dejándolos solos.

- Te gusta mucho el chocolate ¿no? - Mingi asintió -entonces la próxima voy a hacerte galletitas de chocolate - sonrió.

Mingi rió por lo bajo - no hace falta -

- ¡Sí hace!, a menos que no te hayan gustado - abultó su labio inferior. 

- Sí me gustaron, mucho -

Cualquier comentario de ese tipo hacía sentir bien a Hongjoong, y mucho más si venía de Mingi, no podía evitar sentirse alegre si él estaba, lo cuál lo hacía sentir extraño a Mingi, porque normalmente si alguien hablaba con él, terminaba de mal humor, pero Hongjoong solo sonreía ante cualquier comentario que él hacía.

- ¿Te puedo hacer una pregunta? -

- Sí -

- ¿Por qué me hablan? -

- ¿Por qué no? -

- Nadie quiere hacerlo - respondió con un tono triste - no sé porqué lo hacen ustedes -

- ¿Por qué? no hay porqué, supongo que así se conocen las personas ¿no? -

- Claro... me alegra estar con ustedes -

- Con Wooyoung será -

- ¡Hey no! - se quejó - con vos también -

- Como si fuera interesante... -

- Lo sos - le dijo mirándolo con curiosidad, se veía tierno, lo cual hizo que Mingi se pusiera nervioso - sos divertido -

- ¿¿Divertido?? - alzó sus cejas, lo que menos solían decirle a Mingi era que fuese divertido.

- Sí, me haces reír -

- Las pocas veces que digo o hago algo no tiene sentido o es puro sarcasmo -

- Por eso - soltó una risita - tus respuestas o acotaciones siempre me sorprenden -

 - Estás loco -

Parecía como si le divirtiera todo lo que Mingi decía, no podía creer que siendo que todos en el colegio le temían, ese chico tan dulce al que todos molestaban, fuera capaz de hablarle a Mingi sin vergüenza, de que le agrade estar con él y sonreírle de esa manera. Para Mingi, aunque no lo acepte, era demasiado extraño pero satisfactorio.