Cap.2 The One That Got Away

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La felicidad es efímera. En un parpadear el destello en sus ojos pasó a una expresión de horror e indignación,haciéndome sentir juzgada.
"¿Por cúanto tiempo lo has estado? " .- se levantó de dónde se encontraba y se aproximó a mí, con los ojos cristalizados, acorralándome contra la ventana para asegurarse que no evadiese sus cuestionamientos. Amanda era prima de Paul, a la vez que era mi mejor amiga, y entendía perfectamente bien su sentir. Vamos, había traicionado a su primo y no solo eso, fui lo suficientemente estúpida como para terminar embarazada de otro hombre, estaba en todo su derecho de enfurecerse conmigo,pero por otro lado, éramos mejores amigas desde los 5 años y nos conocimos cuando estudiábamos juntas en el Stockton Wood Road Primary School, hemos compartido muchos momentos divertidos y memorables, Amanda no era capaz de darme la espalda y abandonarme en éstos momentos, pues me apreciaba mucho. Mi amiga no podía con tal dilema.
"Casi 3 semanas" me apresuré , apartando la vista, mientras envolví mis manos alrededor de mi vientre, como si estos fuesen un tipo de escudo que protegiese a mi bebé de todo mal.
"Debes hablar con él".- sugirió, inmediatamente moví la cabeza negándome rotundamente.
"¡Debes decírselo, Natalie!" espetó.
"Lo mejor es que no".- dije quedamente. No me sentía capaz de hacerlo. Tenía miedo enfrentarle, temor que esos ojos...sus ojos caídos como de niño triste; tan característicos de él, me mirasen con decepción y dolor. No podía causarle más sufrimiento. Debía alejarme.
"No puedes irte y pretender no existir ¿Qué hay de tu familia? ¿ El instituto?... ¿Qué hay de Paul? Si te vas lo harás mierda." Permanecí en silencio, etonces continuó.- "...Paul ha estado muy preocupado por ti, dice sentir que lo estás evitando, no respondes sus llamadas, tampoco las devuelves,viene a vistarte y tu madre le dice que no estás cuando tu bicicleta está perfectamente estacionada en el jardín delantero, tampoco vas a verle en los resitales y ya no se cruza contigo en Penny Lane como normalmente lo hacían después del Instituto. Paul ha estado muy cabizajo por ti Nat"
Limpiándome las lágrimas y abriéndome camino hacia la puerta para acompañarla a la salida, como señal clara de tener suficiente con esta charla le dije a la vez que hacía un ademán invitándola a salir de ahí "Las verdaderas amigas están en los buenos y peores momentos. Si no vas a ayudarme a salir de aquí, ayúdame no estorbando"
Amanda me miró herida, y salió de mi habitación hacía las escaleras, bajando al living, yo detrás,y al posarse en el umbral de la puerta principal se giró hacia mí y dijo " Mañana temprano vendré a entregarte el boleto de tren con destino a Londres." Y sin más, se marchó. Eran las 11:32 pm, estaba segura que no dormiría esa noche.

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