Tu amor es mi destino

Capítulo 12

_Pase por aquí señorita_ me dice la recepcionista después de esperar unos quince minutos. Me abre la puerta de una oficina y entro sin más, adentro un joven apuesto me mira con una sonrisa.

_Anastasia Steele, un gusto conocerte_ me tiende la mano amablemente y lo saludo.

_El gusto es mío, gracias por recibirme_ por alguna razón me trasmite paz y un poco de confianza regresa a mi.

_No tienes que agradecer, realmente quedé encantado con tu borrador y estoy ansioso por leer todo el libro completo.

_Muchas gracias, realmente es honor que me diga esas palabras...le confieso que no tenía tanta confianza en esto.

_Estas equivocada, pero vamos toma asiento_ enseguida nos sentamos en un pequeña salita, uno frente a otro_ ¿deseas algo? ¿Estas cómoda?

_Gracias, estoy bien_ le entrego el escrito y él le da una mirada al índice.

_Tal vez no tengas confianza en ti, pero yo si_ solo le sonrió, no se que decir, realmente aprecio que tenga tanta confianza en mi proyecto_ lo comenzaré a leer desde hoy, tendrás mi opinión en unos días.

_Muy bien..._ imagine que debía retirarme, pero el solo me mira fijamente sonriendo.

_Me gustaria saber más de ti...es importante conocerte por podríamos trabajar juntos ¿te importaría si te invito a comer?_ me parece muy amable de su parte y acepto.

_Me encantaria_ sonrió y entonces el se levanta de su asiento y me tiende su mano.

_Entonces acompañeme señorita Steele.

_Solo dígame Ana_ su sonrisa se ensancha más y salimos de su oficina, me siento extraña por que me mantiene tomada de la mano, pero seguramente es un chico muy expresivo y no siente incomodidad. Le da órdenes a su secretaria y salimos de la editorial.

_¿Que te gustaría comer Ana? _ dice abriéndome la puerta de su auto.

_Cualquier cosa...

_Ana, eres mi invitada, escoge lo que quieras_ me muerdo el labio, bueno si tengo que escoger...

_Me gustaría una hamburguesa grande con queso y muchas papas_ últimamente las hamburguesas se han vuelto una adicción para mi, pero mi familia no me deja comerlas seguido, esta seria mi oportunidad. José sonríe.

_¿Eso será antojo tuyo o de tu bebé? _ pregunta mirando mi vientre, se queda ahí mirando por unos segundos _ no te he felicitado por que serás madre, felicidades...es una etapa hermosa_ sus palabras me sorprenden pero rápidamente le agradezco _ vamos por tu hamburguesa entonces_ subimos al auto y en cuestión de minutos llegamos a un restaurante de comida rápida. José me deja sentada en una de las mesas y se va para pedir nuestra orden, se ve demasiado extraño ahí, con su traje sin arrugas y su apariencia elegante, no debe estar acomtumbrado a venir a estos sitios. Después de uno minutos regresa con una bandeja con dos hamburguesas y papas fritas.
_Listo, come_ dice amablemente.

_Debes pensar que soy demasiado niña...puedo decir que no vienes seguido aquí ¿verdad?

_Te equivocas Anastasia...me encantan las hamburguesas, no pienses que soy muy formal...al menos no contigo.

_¿Por qué no conmigo? _ le pregunto dándole una mordida a mi rica hamburguesa, el sabor me hace cerrar los ojos, estoy en el cielo.

_Tu eres especial...conozco tu historia_ no puedo evitar escuchar pena en su tono de voz, entonces bajo la mirada.

_¿Y cual es mi historia? _ pregunto haciéndome la ingenua y tomando una papa frita.

_Pues eres una chica con sueños y en espera de un bebé, eres joven Ana pero ya has pasado por una pérdida...no debería estar diciendo esto, no quiero hacerte sentir mal.