HILTON

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14 de octubre del 2014

1:05 pm

Pare minutos después en una gasolinera.

Mi mala suerte había hecho acto de presencia.

No solo se había agotado la gasolina también me habían dado ganas de entrar al baño, aunque había querido resistir la necesidad de entrar al baño no había dado buenos resultados gracias a eso ahora tenía esos dolores que te dan cuando te aguantas mucho.

Entre al baño de la gasolinera en lo que mi tanque se llenaba yo vaciaba mi vejiga.

Pero como dije tengo mala suerte que cuando iba a limpiarme descubrí que no había papel higiénico.

—Maldita sea— grite levantándome.

Sentía mojada mi ropa interior pero que se le iba a hacer.

Pague la gasolina y entre al auto lo que no esperaba fue encontrar a alguien sentado en el asiento del copiloto.

Era un tipo de cabello castaño claro tenía puesto un pantalón negro, una playera gris y no olvidemos el arma que se encontraba en su regazo.

—Si corres, gritas o haces algo sospechoso tendrás el honor de conocer a miquiztli.

— ¿Por qué le pusiste ese nombre a tu arma? — pregunté algo divertida a quien se le ocurría poner semejante nombre a su arma.

—¿Sabes al menos lo que significa? — pregunto el tipo enarcando una ceja.

—No, no lo sé— conteste mirándolo a los ojos.

— ¿Qué no te enseñaron en la escuela un segundo idioma? — pregunto mientras acariciaba su pistola.

—Mis maestros particulares pensaban que no era necesario y mis padres también lo creían— le contesté mirando el suelo el mencionarlos aún causaba algo en mi estómago.

— ¿Maestros particulares? — menciono frunciendo el entrecejo —Déjame adivinar niña de papis por lo tanto nunca asististe a una escuela por eso mencionas a maestros particulares y no olvidemos el hecho de que tienes dinero por qué los servicios de esos maestros no son nada baratos.

— ¿Niña de papis? Ja ya quisiera— conteste algo incomoda— ¿Y bueno me vas a tener todo el día aquí parada o quieres que te lleve a algún lugar?

— Es obvio que no quiero seguir platicando contigo— murmuró pasando su mano sobre su cabello —y dado las indicaciones que me dieron sobre ti tengo que llevarte frente al señor Hilton— dijo con aires de superioridad.

Señor Hilton ese nombre me parece familiar.

Lo había escuchado en algún lugar.

No recuerdo donde lo escuché.

El señor Hilton está satisfecho con ella han hecho un gran trabajo señor y señora Black.


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