Ken！クーデター (Ken! Golpe de estado)

Preparación

(Miyuki)- Veréis, en esta misión necesito que 2 de vosotros vayáis a una herrería y la conquistéis. Los pasos serán estos:

Entraréis diciendo que tenéis una visita autorizada, con unas pequeñas chapas falsificadas conforme el emperador de Japón os autoriza entrar. Togu, te encargarás de hacer las chapas. Una vez dentro, iréis donde está el jefe de la herrería, en la sala superior, cuando lleguéis, habrán dos samuráis cubirendo la entrada. Les daréis las chapas y les decís que tenéis una cita con el jefe. Si os dejan entrar, que es lo más seguro, entráis sin ejecutar a nadie, en caso de que se opongan o descubran que es falso, atacadles sin piedad.

(Ken)- Matarlos sin piedad..? Si no nos han hecho nada...

(Miyuki)- Lo sé.. Pero recuerda esto: Una persona no consigue su objetivo sin sacrificios. Tenemos que dar un golpe de estado, y este es el primer paso. Aunque, si vas a matar, tienes que estar listo para que te maten.

(Ken)- Lo sé pero...

(Miyuki)- Además, ellos no dudarían en matarte.

No contesté a eso ya que sabía que tenía razón, así que simplemente asentí.

(Miyuki)- Cuando estéis con el director,habrán cinco guardias cubriéndole. Hablad con él sobre un cargamento de armas que yo misma pedí. El director, Hiro Hanabushi, me conoce como Akane Hanaba, hablarle de mi y de un cargamento de 10 katanas que pedí y que pagué anteriormente.
Ame, tú entrarás por el baño que hay al lado del director, ya que hay una ventana situada dentro. Entrarás sin hacer ruido, pero darás dos pequeños golpes a la pared para llamar la atención del guardia más cercano. En ese momento, saldrás por la ventana. Si entra y busca de dónde proviene el ruido, entrarás por la ventana de nuevo y lo matarás. Si puede ser no hagas mucho ruido. - Ame asintió - Cuando lo mates abre y cierra la puerta sin que los otros 4 guardias te vean para llamar su atención. Si los cuatro se dirigen al baño, los otros dos tendrán que matar a los guardias rápidamente para dejar al director indefenso. Si todo esto va bien, podemos seguir con el plan.

(Kenzei)- Parece fácil.

(Miyuki)- En realidad lo es, pero no bajéis la guardia. Vuestro objetivo es secuestrar a los trabajadores para que fabriquen un fusil de francotirador.

(Ken)- Un fusil..? - Me asusté un poco - Suena a algo terrorífico..

(Masuku)- Sí...

(Neiji)- ¿Para qué queremos eso, o mejor dicho, qué es..?

(Miyuki)- Un fusil es un arma que dispara un pequeño objeto llamado 'bala' que si le da a una persona, la puede herir gravemente o matarla. Solo con una, lo mejor, es que el fusil de francotirador es un fusil que puede disparar des de muy lejos. Con eso ya tendremos superioridad ante las armas de japón.

(Hosana)- ¿Quién usará el fusil? - Dijo con una voz fría.

(Miyuki)- Antes de nada, habría que intentar hacer dos fusiles. Una vez los tengamos, os enseñaré a usarlos y a disparar. En mi habitación tengo unos planos que hice para que los herreros puedan hacerlos bien.

Hosana miró mal a Miyuki.

(Miyuki)- He calculado más o menos y estaréis allí durante más de dos días seguramente. Dos del grupo harán un túnel bajo tierra en dirección a la herrería y llevarán sacos de arroz para que todos puedan comer.
Obviamente tendréis que cerrar las puertas de la herrería para que no entre ni salga nadie.
Una vez hayamos cumplido todo esto, entraran 5 de nosotros más para ayudar a Ame y a los otros dos. Lo malo de hacer un fusil de esos es que necesitaremos las miras.. - Miró a Kisame y ambos asintieron - Kisame, te encargo fabricar las necesarias.
Aprovechando que nunca lo hemos hecho, con tinte natural dibujaremos nuestra bandera.

(Masuku)- De eso me puedo encargar yo.

(Miyuki)- Sí. De momento eso es todo chicos, os daré más detalles individualmente.

(Todos)- ¡Sí!

Una semana después:

(Miyuki)- Chicos, hoy empezamos, ¿estáis listos..?

(Los 8 que íbamos)- ¡Sí!

(Miyuki)- No nos podremos comunicar a partir de ahora, así que, suerte y volved sanos a casa. - Nos miraba con orgullo.

Obviamente Miyuki me escogió, aunque fue junto a Neiji para ir los dos a por el director.

Fuimos él y yo hacia la herrería solos y nos plantamos en la entrada.